La prioridad en la urbanización Sueño Guayaquileño ya no es el agua, ahora es la seguridad, reconoce ministro
La flamante urbanización a la que se mudaron unas 400 familias y que fue inaugurada en enero por el presidente Daniel Noboa ha quedado “atrapada” en medio de dos etapas de Socio Vivienda, zona dominada por la organización terrorista Los Tiguerones.

Tras la inauguración del plan Sueño Guayaquileño, el 4 de febrero de 2025, los habitantes aseguraron que solo recibían el servicio de agua potable por una hora al día.
- Foto
API
Autor:
Actualizada:
Compartir:
Más que el abastecimiento ininterrumpido de agua potable, para los habitantes de la recién inaugurada urbanización Sueño Guayaquileño la principal prioridad radica hoy en la seguridad, dijo el titular del Ministerio de Vivienda, Humberto Plaza.
“Está controlado el tema del agua, ahorita lo que estamos combatiendo es la seguridad”, reconoció Plaza. Según el funcionario, el Miduvi trabaja en una nueva instalación para proveer el líquido vital de manera constante a las 688 familias ubicadas en el plan habitacional.
El ministro aseguró que “hemos tenido que revivir un muerto”, al referirse al diseño original de la construcción, contratada en 2021 durante el gobierno de Lenin Moreno, y que carecía de servicios básicos como el agua potable y el tratamiento de las aguas servidas.
“El agua ya está en este momento, de repente hay un corte de un par de horas, pero hay suministro de agua desde el día que se mudaron, sería una responsabilidad mandar a gente a vivir si no hay agua”.
Humberto Plaza, ministro de Vivienda
Este complejo habitacional fue inaugurado por el presidente Daniel Noboa el 4 de febrero de 2025 en medio de las quejas de algunos moradores que denunciaron la falta del suministro de agua potable, servicio que se les proveía por horas diariamente, pues proviene de la planta de tratamiento que abastece a sectores aledaños.
“El agua llega por horas, en la mañana o en la tarde”, confirmó Carmen Salazar, una moradora de la urbanización la tarde de este 27 de marzo. Ella y su suegra accedieron a una vivienda en este nuevo plan habitacional, en el noroeste de Guayaquil.

Sueño Guayaquileño está ubicado en medio de las etapas 2 y 3 de Socio Vivienda, una ciudadela que la Policía considera tomada por los grupos delincuenciales, especialmente la organización terrorista Los Tiguerones que ha implantado el sistema de vacunas en dicho sector y en donde se registró una masacre que cobró la vida de 22 personas el 6 de marzo de 2025.
Al día siguiente de esa masacre, la Policía ingresó a la urbanización con un contingente de uniformados y descubrió que dos facciones de Los Tiguerones habían convertido las viviendas vacías en su escondite y base de operaciones.
El temor invadió a las cien familias que permanecían en la urbanización, algunas de las cuales —según versión policial— han preferido desplazarse a otros sectores de menor riesgo. Carmen dice que se mantendrá en su vivienda, pero pide a las autoridades atención urgente.
“Cuando recién entregaron la obra había guardias en la entrada a la urbanización, pero en las últimas semanas ya no se los ve. Pedimos que la Policía haga constantes patrullajes, por nuestra seguridad”.
Carmen Salazar, moradora
Esta moradora abandonó su casa y la dejó al cuidado de su suegra mientras se recupera del parto de su cuarto hijo en la casa de sus abuelos, en el suburbio oeste, y prevé volver en unas semanas.
El ministro Plaza descarta que se esté dando el abandono de las viviendas y aseguró que la Policía ha logrado neutralizar el accionar de estas pandillas que pelean por territorio.
“Se metieron a Sueño Guayaquileño y agarraron a unas personas, las agarraron con armamento largo; uno los combate y en 15 días regresan. El ministerio del Interior está haciendo un trabajo de inteligencia para que esto no vuelva a ocurrir”, aseguró Plaza.
La zona de Socio Vivienda —agregó— se ha mantenido durante mucho tiempo “caliente”, por lo que se realiza una coordinación entre los ministerios de Defensa y del Interior para combatir a los grupos delictivos.
“Cuando usted entra ahí no se encuentra con un estruchante de la esquina, sino con un GDO que tiene ametralladora, usted no puede irse con un policía que tiene una pistola 9 milímetros a enfrentarse con alguien que tiene una K47; no podemos mandar a la fuerza pública a enfrentarse al hampa en inferioridad de condiciones”, finalizó el ministro.
Compartir: