Esto se sabe de la misteriosa desaparición del barco Patricia Lynn en las costas de Manta
A 34 millas náuticas del puerto de Manta (Manabí), se perdió la señal del barco Patricia Lynn con más de 20 pescadores. Hay una denuncia por desaparición involuntaria y también una investigación por inconsistencias en el registro de zarpe.
Este es el barco Patricia Lynn, que desapareció en las costas de Manta el 22 de diciembre de 2024.
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“Que los devuelvan, solo queremos la vida de ellos”, es la súplica de Gladys Holguín, hermana de unos de los tripulantes del barco pesquero que desapareció frente a las costas de Manta hace 20 días. No hay certeza de qué pasó y parece que a la embarcación se la ‘tragó el mar’.
La madrugada del domingo 22 de diciembre de 2024, cerca de las 01:50, fue la última señal de rastreo o tracking de la embarcación de nombre Patricia Lynn que salió a faenas de pesca desde Manta, ciudad del centro sur de la provincia Manabí.
Desde esa fecha, hay pocos hallazgos, pero los familiares mantienen las esperanzas de que la tripulación, conformada por un poco más de 20 personas, está con vida.
Según los registros oficiales, la embarcación de bandera colombiana zarpó desde la ciudad puerto el sábado 21 de diciembre, a las 14:55.
Ese mismo día se tuvo contacto con el jefe de máquina a las 20:50 y todo marchaba con normalidad. Sin embargo, a las 21:30, se perdió la señal.
No pasó mucho tiempo y ya para las 22:18 entró una señal de emergencia por activación de la Radiobaliza de Localización de Siniestros o EPIRB (Emergency Position Indicating Rad Beacon); básicamente es un dispositivo utilizado para emitir señales de socorro.
Las horas pasaron y, lamentablemente, a la 01:50 de la madrugada del 22 de diciembre de 2024, a 34 millas náuticas del puerto de Manta, se perdió la señal de rastreo y hasta este sábado 11 de enero de 2025, se desconoce el paradero de la embarcación y sus tripulantes.
Más de 20 desaparecidos
En el permiso de zarpe de la Capitanía del Puerto de Manta consta el registro de 17 personas, pero los familiares de los desaparecidos aseguran que son 21 tripulantes.
Sin embargo, en la Fiscalía General del Estado existe una denuncia por el delito de desaparición involuntaria de 23 ciudadanos; tres de ellos están ingresados como desaparecidos, pero en calidad de no reconocidos, debido a que no consta el número de cédula.
El proceso ingresó la mañana del 23 de diciembre de 2024, a la Unidad de la Fiscalía de personas desaparecidas de Manta.
Jorge López, capitán del Puerto de Manta, dijo el pasado 24 de diciembre que solo estaban autorizados 17 tripulantes. “Aparentemente hay uno que no se embarcó y los demás se han subido sin autorización”.
“Eso ya tiene que dilucidarlo dentro de las investigaciones que ya se abrieron aquí en la Capitanía, el expediente sumario para investigar los aspectos técnicos y marítimos que sucedieron”.
Jorge López, capitán del Puerto de Manta.
En el caso del pescador que no abordó, se conoció que días antes de que el barco saliera del puerto había reportado una problemática familiar relacionada con su esposa que se enfermó. Por eso no se embarcó. Incluso el ciudadano ya rindió versión voluntaria en Fiscalía.
López también reconoció la existencia de una serie de inconsistencias “dentro del caso que ya se pasa del ámbito marítimo a otro ámbito que tiene que ser investigado por las autoridades competentes”.
Además, PRIMICIAS conoció que el sistema de videovigilancia del barco que se maneja desde tierra fue vulnerado y por eso también existe una denuncia que ha desencadenado una investigación.
Según el Registro regional de buques, Patricia Lynn tiene como puerto de registro Buenaventura (Colombia).
Desde la Capitanía de Manta informaron que el barco estaba alquilado a una empresa ecuatoriana de nombre Pezymar Export.
En el Registro de Embarcaciones Pesqueras Industriales del Ministerio de Producción, Comercio Exterior, Inversiones y Pesca, la compañía está ubicada en la provincia de Santa Elena, en el cantón Salinas.
El drama familiar
Entre los desaparecidos hay 16 manabitas (de Manta), dos del Guayas, uno de Pastaza, uno de Esmeraldas y tres que no se sabe de dónde son oriundos.
El mantense Erik Israel Holguín España, de 42 años, es parte de la tripulación desaparecida y era la primera vez que iba a faenas de pesca en el barco Patricia Lynn. Lo había hecho en embarcaciones de otras compañías.
Gladys Holguín, hermana de Erik, habló con PRIMICIAS y narró los duros momentos que atraviesa ante la incertidumbre de la misteriosa desaparición.
“Nosotros tenemos la esperanza de que ellos estén vivos; no sabemos qué le pasó al barco, porque no hay pruebas evidentes que digan que el barco está hundido… Solo queremos que los devuelvan y, si están secuestrados, que los devuelvan…”
Gladys Holguín, hermana de uno de los desaparecidos.
“La vida de él era el mar”, agregó. Erik es el tercero de siete hermanos y, cuando no estaba en faenas de pesca, se dedicaba a jugar bingo o a realizar trabajos en un taller de fibra.
Gladys aseguró que, cuando se enteró de la desaparición, “el día domingo, nosotros le escribimos a él, le preguntamos qué pasaba y ese día no se fueron los mensajes, pero el lunes, a las 02:51, se le van los dos vistos… nosotros llamamos y abría la llamada, se escuchaba como viento, pero no respondía nada”.
Ella asegura que lo mismo pasó con otros tripulantes: las llamadas entraban, pero nadie contestaba.
Desde la desaparición de la embarcación, familiares de los pescadores llegan diariamente a la Capitanía del Puerto de Manta para pedir que se agilite la búsqueda y obtener respuestas.
“Lo único que nosotros queremos es verlos y, si en realidad ellos están muertos, queremos darles una cristiana sepultura”, dijo otro familiar de los pescadores desaparecidos.
Así como la fe de Gladys se mantiene intacta por volver a ver con vida a su familiar, también es el caso de Dayana Burgos, quien de igual forma espera el regreso de su hermano Brayan Burgos.
Una semana después de la desaparición del barco con los tripulantes, ella publicó un sentido mensaje en redes sociales: “Como familia, clamamos y suplicamos que aparezcan con vida, estamos desesperados por su regreso”, decía parte del post.
El 1 de enero de 2025 volvió a escribir, en la red social Facebook, donde dijo: “Todos los días pido por tu vida y por la de tus compañeros, para que vuelvan con bien... No sabes lo mucho que te extraño, ñañito”.
Hallazgos y búsqueda
Las únicas imágenes de los tripulantes con vida están registradas en un video cuando zarpan desde Manta y los pescadores se despiden con las manos. Los familiares viven la incertidumbre y el dolor desde Navidad y Fin de Año.
A raíz de la alerta de la desaparición, la Armada de Ecuador informó que, el 24 de diciembre de 2024, durante una operación de búsqueda y rescate de la lancha guardacostas Río Daule, encontraron el dispositivo de salvamento del barco PATRICIA LYNN y también víveres flotando.
Además, hallaron las dos balsas salvavidas del barco y un bote auxiliar. También se activaron labores de búsqueda y rescate con aviones de exploración aeromarítima y el buque Imbabura.
Ya para el miércoles 8 de enero de 2025, a las 08:00, el BAE Orión salió desde la Base Naval Sur (Guayaquil) con destino hacia la última posición reportada de Patricia Lynn. El BAE Orión es un buque de investigación hidrográfico y oceanográfico de la Armada de Ecuador.
Luego, el jueves 9 de enero de 2025, llegó a la zona, donde empezaron las labores de búsqueda por dos días con un sonar multihaz, herramienta para hacer un barrido del fondo marino.
En el área donde se perdió la señal de la embarcación se encuentran las placas tectónicas de Nazca y la continental. La profundidad es de entre 500 y 2.000.
Entre el sábado 11 y domingo 12 de enero está previsto que se den a conocer hallazgos en casos de que existan.
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