Inocar declara el fin de la búsqueda del barco Patricia Lynn, desaparecido en Manta hace 46 días
El Inocar entregó su informe sobre la búsqueda del Patricia Lynn, que desapareció hace 46 días en las costas manabitas. Con ello, las labores llegaron a su fin. No hay certezas de que el barco pesquero haya naufragado.
El Instituto Oceanográfico y Antártico de la Armada de Ecuador presentó los resultados de la investigación relacionada a la búsqueda del barco Patricia Lynn, que desapareció hace 46 días. La presentación se hizo la tarde del 5 de febrero de 2025 en la Capitanía del puerto de Manta, con presencia de los familiares de los pescadores desaparecidos.
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La tarde del 5 de febrero de 2025, cuando se cumplieron 45 días desde que el barco Patricia Lynn desapareció con 22 pescadores al oeste de las costas de Manta (Manabí), el Instituto Oceanográfico y Antártico de la Armada de Ecuador (Inocar) presentó los resultados oficiales de la investigación relacionada con las labores de búsqueda que hizo el buque BAE Orión.
“Existen estructuras geológicas diferentes a las de un talud natural a esa profundidad, tenemos que entender que la ubicación de ese indicio es a casi tres kilómetros de profundidad”, dijo Andrés Pazmiño, capitán de navío y director del Instituto Oceanográfico y Antártico de la Armada.
Lo que significa que la embarcación podría estar en ese punto, que se deriva de la siguiente hipótesis: indicio de probables irregularidades del fondo marino.
Sin embargo, Pazmiño aclara que solo son probabilidades y tampoco está garantizada la recuperación de restos, porque “es muy difícil tener medios que permitan” este tipo de acción.
“Ellos hicieron su rastreo y respectiva investigación, han encontrado algo que no está confirmado, que sea el barco pesquero Patricia Lynn, no nos han dicho que son ellos, nosotros tampoco, como familiares, estamos diciendo que son ellos… tenemos la fe en que pueden regresar con vida”, dijo María Chóez, representante de los familiares de los pescadores desaparecidos.
“Lo único que nos interesa es que nuestros familiares regresen. Estamos en esa espera de que ellos lleguen a sus hogares respectivos”, agregó Chóez.
¿Cómo fue la búsqueda?
El 8 de enero de 2025, el BAE Orión, un buque de investigación hidrográfico y oceanográfico de la Armada de Ecuador, salió desde la Base Naval Sur (Guayaquil), para ubicarse a 30 millas náuticas del puerto de Manta.
En ese lugar, la madrugada del 22 de diciembre de 2024, se perdió la señal de rastreo de la embarcación de bandera colombiana Patricia Lynn que zarpó desde la ciudad puerto el sábado 21 de diciembre, a las 14:55.
El BAE Orión empezó las labores de búsqueda el 9 de enero y salió aproximadamente por siete días. "En una operación por 15 días estuvimos utilizando sistemas acústicos”, informó el director del Instituto Oceanográfico y Antártico de la Armada.
Para dar inicio a la investigación, los expertos se basaron en tres evidencias: ubicación de la balsa salvavidas, posición donde se encontró el dispositivo EPIRB y el último punto reportado del DMS del Patricia Lynn.
En este sentido, el 24 de diciembre de 2024, durante una operación de búsqueda y rescate de la lancha guardacostas Río Daule, encontraron el dispositivo de salvamento del barco y también víveres flotando en el mar. También hallaron las dos balsas salvavidas del barco pesquero y un bote auxiliar.
Una vez en la zona de estos hallazgos, los especialistas debieron hacer un análisis del clima marítimo (viento y dirección de la corriente); establecimiento del área de exploración; separación de líneas con un equipo acústico que genera un relieve del fondo del mar, el cual fue de entre 2.800 y 3.000 metros de profundidad; se cubrió un área de 148 kilómetros cuadrados.
Finalmente, se ejecutó una superposición de línea de adquisición de datos para generar el relieve submarino, lo que permitió detectar “ciertas estructuras geológicas diferentes a las naturales de un talud, lo que nos generó un indicio de que podría ser una estructura diferente no natural”, manifestó Andrés Pazmiño.
El indicio fue ubicado a casi tres kilómetros de profundidad, que “es algo encañonado, tiene una corriente de fondo muy pronunciada de aproximadamente 33 metros por segundo”, explicó el capitán de navío.
"Hemos concluido", dice el Inocar
Con esto, las labores del Inocar llegaron a su fin, pues según el titular del instituto, ya se cumplió con la planificación y los procesos fueron en base a estándares internacionales.
“Hemos concluido, tenemos un informe correspondiente en donde evidenciamos dos sitios con estas estructuras geológicas diferentes del suelo oceánico”.
Andrés Pazmiño, capitán de navío y director del Inocar.
Y la Armada recomienda considerar las dos estructuras geológicas halladas en dos puentos (Eco 1 y Eco 2) como irregularidades del fondo marino, porque pese al esfuerzo tecnológico aplicado, la información obtenida hasta el momento no permite determinar con certeza su naturaleza.
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