Baches, fisuras y hundimientos: ¿Por qué las calles de Quito están más deterioradas?
En Quito hay calles llenas de baches y fisuras. Y, a eso se suman problemas como el hundimientos de la calzada en la Av. de los Shyris. El Municipio explica las razones de este problema.

Trabajadores en la avenida De los Shyris, tras el hundimiento de la calzada, el 20 de marzo de 2025.
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Las torrenciales lluvias que soporta Quito desde inicios de febrero de 2025 están causando estragos. Si bien la capital no ha sufrido inundaciones ni graves consecuencias por eventos naturales, las avenidas y calles resienten el impacto del temporal.
A largo de la ciudad se ha vuelto común ver baches, fisuras, fugas de agua y hasta hundimientos que han acelerado el deterioro de gran parte de los 6.700 kilómetros de vías que tiene Quito.
Este problema cobró mayor relevancia la tarde del 19 de marzo de 2025, cuando en la avenida De los Shyris, una de las principales arterias viales del norte de la capital, se produjo el hundimiento de una parte de la calzada. Específicamente, en la intersección con la avenida Gaspar de Villarruel, un punto de gran afluencia vehicular.
Patricio Calle, gerente de Obras Públicas de la Empresa de Movilidad y Obras Públicas (Epmmop), reconoce que las lluvias han complicado los trabajos de la entidad. "Las lluvias causan algunos efectos. Uno de ellos es el retraso en la programación de nuestro cronograma y el otro son los daños en el asfalto", dice el funcionario.
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Calle explica que, en algunos casos, el agua se filtra por el pavimento y provoca fisuras, hundimientos o desprendimientos, sobre todo en las vías que no han recibido mantenimiento:
"Hay calles y vías que no han recibido mantenimiento de ningún tipo en 10 o 15 años. Ahí hay más probabilidades de daños"
Patricio Calle, gerente de Obras Públicas de la Epmmop
La calle Pablo del Solar, en el norte de la ciudad, es solo un ejemplo. Los baches que aparecen a cada paso retratan la falta de mantenimiento de los últimos años. Una situación similar ocurre en la calle El Batán, también en el norte. Ahí, el hundimiento del asfalto pone en riesgo a una de las alcantarillas del sector.
Jorge Rivera, jefe de Alcantarillado de la Empresa de Agua Potable (Epmaps), explica que en época de lluvias, las alcantarillas trabajan a su máxima capacidad, aumentando las posibilidades de que existan problemas en la red de alcantarillado.
"Hemos tenido que intervenir en algunos puntos en toda la ciudad", dice. Mientras que Calle agrega que la acumulación de agua es uno de los "enemigos" de las vías, pues provoca todo tipo de daños.
Calle y Rivera coinciden en que la limpieza de sumideros y de alcantarillas es la principal estrategia para mitigar los daños en las calles y avenidas. Para 2025, el Municipio tiene previsto invertir más de USD 1 millón en esta tarea.
¿Mala calidad del pavimento?
La Empresa de Obras Públicas asegura que el pavimento que utiliza en el plan de rehabilitación vial cuenta con todas las certificaciones de calidad. "Quito siempre ha comprado el pavimento a Petroecuador y esta empresa cumple con la normativa", dice Patricio Calle, de la Epmmop
Insiste en que la aparición de baches y fisuras obedece al fuerte invierno. "Lo mismo ocurre con el pavimento rígido. No se trata de mala calidad, sino del clima o de la técnica que se usó para colocarlo".
A finales de 2024, el alcalde de Quito, Pabel Muñoz, reconoció que hubo problemas en la colocación del pavimento rígido en el carril de la Ecovía. Además, la Epmmop multó con USD 64.000 a empresas que incumplieron los cronogramas, luego de que tuvieron que reemplazar el pavimento en las avenidas Los Naranjos, Simón Bolívar y en calles secundarias de Tumbaco.
Calle asegura que la Epmmop cuenta con un equipo de fiscalización que verifica que las empresas contratantes cumplan con los plazos y términos estipulados en los contratos. Aunque insiste en que, en algunas ocasiones, puede haber retrasos por las condiciones climáticas. "Una cosa que no se debe hacer es pavimentar cuando llueve. Si se lo hace, el material se daña y se incurriría en más gastos para todos", dice.
Pablo Ramón, director ejecutivo del Consejo Estratégico de Infraestructura, sostiene que el principal problema de las calles de Quito es la falta de mantenimiento preventivo. "No es tanto la calidad del asfalto. Lo que pasa es que en el país no hay una cultura de mantenimiento y se espera a que el daño sea mayor para actuar", dice.
Agrega que el Municipio de Quito ejecuta el mantenimiento de unos 150 kilómetros año, cuando deberían ser, al menos, 300 kilómetros. "Los primeros mantenimientos en una vía deberían hacerse a los tres o cuatro años. Esto permite que se puedan arreglar fácilmente los baches que recién aparecen a los ocho o nueve año. Mientras que a los nueve o 10 hay que levantar unos cuatro o cinco centímetros de la capa asfáltica para colocar una nueva, con un refuerzo de dos centímetros más para que la vía aguante otros 10 años", detalla.
El problema, explica, es que el Municipio de Quito no realiza los primeros mantenimientos y solo espera que aparezcan los baches para actuar. "Bajo ese tipo de trabajo, el asfalto pierde la mitad de la vida útil", asegura.
Plan de repavimentación
El alcalde Pabel Muñoz dijo, en una entrevista con PRIMICIAS, que el Municipio rehabilitará alrededor de 150 kilómetros de vías en 2025. Para esto, la Empresa de Obras Públicas cuenta con un presupuesto de USD 152,6 millones.
Actualmente, la entidad tiene abiertos más de 30 frentes de trabajo a lo largo de la ciudad, entre las que se destacan las siguientes:



Además, el Municipio decidió intervenir directamente la avenida Simón Bolívar, desde el extremo norte, en el sector de Calderón, hasta la intersección con la Autopista General Rumiñahui. Estos trabajos se extenderán hasta finales de junio y se realizan ante la negativa de las empresas privadas a participar en el proceso de conseción.
"Vamos a hacer los estudios para saber lo que podemos hacer en la Simón Bolívar y, luego de eso, llamaremos a otro concurso. No se descarta la concesión", dijo Muñoz.
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