Además de al correísmo ¿a quién beneficiaría una alianza de las izquierdas?
Las organizaciones de izquierda participaron en una reunión, en la que acordaron analizar una alianza para las elecciones de 2025. Esta opción podría reducir el abultado número de candidatos presidenciales.
Las organizaciones de izquierdas participaron en una reunión en busca de una coalición este 31 de julio de 2024.
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Partido Socialista
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La reunión de las organizaciones política de izquierda terminó, el 31 de julio, sin un camino tan claro. Los partidos y movimientos llegaron a unos acuerdos mínimos, y volverán a reunirse para evaluar la posibilidad de tener un candidato en una gran alianza electoral.
Apenas horas después de la reunión, sin embargo, ya se registró la primera baja: Unidad Popular. Su representante, Natasha Rojas, aseguró que ellos no están de acuerdo en llegar a una coalición que incluya al correísmo. Y este 1 de agosto, el partido confirmó a su candidato presidencial: Jorge Escala.
Aparte de Unidad Popular, en la reunión participaron Revolución Ciudadana, Centro Democrático, Pachakutik, el Partido Socialista, RETO y la Conaie. La Izquierda Democrática estaba invitada, pero no asistió.
El problema para la coalición es que la Revolución Ciudadana es la organización política más grande y con más apoyo de aquellas que aceptaron la invitación a la reunión de las izquierdas. Por lo tanto, es la que más opciones tiene de presionar por su candidato, o incluso llegar a imponerlo.
Pero de hecho, una alianza traería beneficios para todos, además de posiblemente concentrar los votos.
Por un lado, las organizaciones políticas más pequeñas recibirían beneficios electorales que les pueden permitir, por ejemplo, seguir existiendo como partidos o movimientos. En cambio, la misma alianza lograría tener otros bonos como más fondo de promoción electoral.
Según el calendario electoral, las alianzas se puede inscribir hasta el 30 de agosto de 2024. Los candidatos para estas coaliciones pueden ser electos en unas primarias de alianza, o mediante un acuerdo después de que cada organización lo haga.
Los beneficios de las alianzas
Participar en una coalición tiene distintos beneficios en varios ámbitos. El primero es obviamente el electoral, pues al reducir la cantidad de candidatos, los votos se concentran más en los pocos candidatos. El CNE ha proyectado que en estas elecciones podría llegar a haber unos 12 candidatos.
El segundo beneficio es para la alianza misma, pues el CNE creó una serie de incentivos a este tipo de coaliciones justamente para reducir el número de candidatos.
El más importante es el fondo de promoción electoral (que se usa para la pauta en prensa, radio, televisión y vallas). Cuando hay alianzas, estas reciben un 20% adicional de este fondo por cada organización que se sume a la coalición. Por lo tanto, mientras más grande sea el acuerdo, mayor dinero para pauta tendrán.
Otro incentivo, que es especialmente importante para los movimientos pequeños, tiene que ver con el umbral de votos para su eliminación del registro electoral. Cuando hay coaliciones, el porcentaje que obtenga la alianza no se divide entre sus miembros, sino que se lo asigna a cada uno de ellos. Por lo tanto, un binomio que obtenga más del 4% tendrá asegurada su existencia legal por al menos cuatro años más.
Este último punto es especialmente importante para RETO y el Partido Socialista, cuyos candidatos en 2021 obtuvieron menos de esa votación y, por lo tanto, estarían a un paso de la eliminación.
Las opciones presidenciales
Las organizaciones políticas que, por ahora, siguen en diálogos para esta posible alianza han lanzado ya nombres, que serían las opciones presidenciales para la coalición de izquierda y centro izquierda. Sin embargo, en los acuerdos deberán tomar en cuenta que el binomio presidencial obligatoriamente debe estar integrado por un hombre y una mujer.
En primer lugar está el candidato del correísmo, que se definirá este sábado 10 de agosto, en su Asamblea. Entre las opciones que se han hecho públicas están el expresidente de la Judicatura, Gustavo Jalkh, y la misma excandidata presidencial Luisa González.
Desde el lado de Pachakutik, en cambio, la opción es el presidente de la Conaie, Leonidas Iza. Sus primarias serán el mismo 10 de agosto.
Entre los posibles miembros de la coalición están dos antiguos aliados del correísmo. Por un lado, Centro Democrático, que ha planteado entre sus posibles precandidatos a José Serrano, exministro del Interior de Rafael Correa. Y del otro está el Partido Socialista, que presentó el nombre de Pedro Granja, un abogado también cercano al correísmo.
RETO, en cambio, no ha anunciado a precandidatos, aunque esa organización política ya tuvo una asamblea el pasado 29 de julio.
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