El Chef de la Política
Elecciones 2025: arranca la disputa por el decisivo tercer lugar
Politólogo, investigador de FLACSO Ecuador, analista político y Director de la Asociación Ecuatoriana de Ciencia Política (Aecip).
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Si las elecciones fueran el día de hoy, pocas dudas quedan respecto a quiénes estarán en segunda vuelta. Si le prestamos atención a las encuestas de opinión pública, el presidente Noboa tendría un porcentaje de aceptación popular que le bastaría para llegar primero o segundo. Si consideramos los resultados de las últimas dos elecciones presidenciales, la Revolución Ciudadana tendría la suficiente cantidad de apoyos para colocarse en uno de los dos primeros lugares.
En el caso de Noboa, se parte del supuesto que el respaldo a su gobierno se va a trasladar a las urnas. En cuanto a la Revolución Ciudadana, el supuesto que se tiene en cuenta es que sus lealtades electorales no han variado, al menos desde la elección de 2023. Ambos supuestos resultan creíbles.
Aunque el escenario de que Noboa o González puedan ganar en una sola vuelta electoral no se lo puede descartar de un tajo, es poco probable que alguno de los dos llegue al 40% de votos válidos y marque al menos 10% de diferencia respecto a su contendor.
Por tanto, la discusión que ahora toma forma tiene que ver con quién llegará al tercer lugar y cuál será su caudal de votos. Si bien el tercero no recibe medalla de bronce ni diploma, la distribución de sus votos en la segunda vuelta será clave. Aunque esto es una obviedad, lo que marcará una diferencia es que, en esta elección, a diferencia de 2021 y 2023, hay varios candidatos que en caso de ocupar el tercer sitial abiertamente ofrecerían su apoyo a la Revolución Ciudadana en la segunda vuelta.
En efecto, salvo Bolívar Armijos y su respetable 0,36% de votos en 2023, en las últimas dos elecciones ningún candidato ha sido explícito en cuanto a sugerir que sus votos sean trasladados en el ballotage, en su momento a Arauz o luego a González.
Ahora esa es una realidad. Hay pocos argumentos para negar que si Rabascall, Serrano, Granja o Iza llegan al tercer lugar pedirán a sus votantes que apoyen a González en segunda vuelta.
Los dos primeros fueron (o son) personas muy cercanas al expresidente Correa durante sus diez años de gobierno y ahora no hay motivo para pensar en un distanciamiento real. Los otros dos, Granja e Iza, podrían tener ciertas distancias con la Revolución Ciudadana, pero en el momento de decidir, seguramente no volcarán su apoyo a Noboa. Este argumento es válido (al menos parcialmente) aun cuando está por discutirse si estas candidaturas, en primera vuelta, restarán votos a la propia Revolución Ciudadana o si arrancarán sufragios de otros espacios del espectro electoral.
Si Cucalón o Kronfle son los terceros en la carrera presidencial el panorama sería distinto y, aún sin hacer efusivos llamamientos a que sus votantes se inclinen por Noboa en segunda vuelta, es medianamente claro que por allí irían sus preferencias. No es muy probable que Construye apoye a González, al menos a juzgar por lo dicho por sus principales voceros respecto a los años de gobierno de la Revolución Ciudadana. Con el socialcristianismo nunca se sabe, dice la gente, pero en un escenario como el descrito sus mayores cercanías están con Noboa.
Independientemente de los candidatos, lo real es que en estas elecciones la mayoría de los posibles terceros están del lado de la evolución Ciudadana. Desde luego, los votos no se endosan de forma automática. Eso es una realidad. Sin embargo, algún nivel de influencia tiene el candidato sobre sus votantes y eso es lo que ahora está en juego.
La disputa por el decisivo tercer lugar abre otra incógnita hasta ahora sin respuesta. Una lectura señala que los posibles “terceros” cercanos a la Revolución Ciudadana tienen acuerdos para cumplir ese rol y permitir el retorno de esa agrupación política al poder. La otra interpretación es que simplemente se trata de reacomodos de los espacios de disputa electoral en los que los actores políticos más orientados a la izquierda buscan sus propias alternativas.
En todo caso, habrá que esperar a que las candidaturas definitivas sean expuestas y allí se tendrá una visión más clara de la función de los candidatos al tercer lugar. Lo único claro ahora mismo es que la primera vuelta resultará interesante no tanto por conocer quiénes pasarán al ballotage, Noboa y González, sino por el orden en el que llegará el segundo pelotón de candidatos.