El manatí es considerada una especie en peligro crítico en Ecuador
El Ministerio del Ambiente estima que en los parques nacionales Cuyabeno y Yasuní, apenas quedan unos 150 ejemplares de esta especie.
Un ejemplar de manatí que fue rescatado y permanece en un refugio en Perú.
Cortesía
Autor:
Actualizada:
Compartir:
Hay tres tipos de manatíes en el mundo, pero solo uno de agua dulce. Este vive en la cuenca del río Amazonas, por lo que su hábitat se incluye a Brasil, Colombia, Perú, Ecuador, Suriname, Guyana y Guyana Francesa.
En el caso ecuatoriano el Ministerio del Ambiente identificó las zonas donde vive este mamífero: los parques nacionales Cuyabeno y Yasuní. En las zonas donde habita esta especie se colocaron sonares y mediante estudios se determinó que en el país quedan apenas 150 ejemplares.
Por ello se considera una especie en peligro crítico. Lo que implica que su cacería está prohibida y hacerlo constituye un delito.
Gabriela Montoya, especialista de vida silvestre del Ministerio del Ambiente, explica que “a pesar de que está en áreas protegidas los mayores peligros que enfrenta con la cacería y la contaminación de ríos”.
Este dato coincide con lo que expone la organización ecologista internacional WWF. La ONG explica que la cacería del manatí comenzó en 1542 por su cuero, carne y grasa.
Y aunque está práctica disminuyó considerablemente aún existe. El Ministerio del Ambiente no ha logrado identificar un mercado de carne del manatí en el país.
Sin embargo, cree que las comunidades indígenas que habitan en esos dos parques nacionales podrían mantener esta costumbre, por lo que es importante potenciar el trabajo con ellos.
“Se trabaja en educación ambiental. Los guardaparques están permanentemente dando información para que conozcan la importancia de esta especia para la conservación”, señala la especialista.
La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) considera a este animal como “vulnerable”.
Otra amenaza es que, a pesar de las regulaciones y los controles, el turismo presiona la preservación de esta especie. Las embarcaciones ingresan al hábitat del manatí y ejercen estrés sobre su población.
Compartir: