Brasil: Policía recupera el control del Congreso, Presidencia y Corte Suprema
Agentes antidisturbios cargaron contra los manifestantes, afines al expresidente Jair Bolsonaro, con gases lacrimógenos y establecieron un perímetro alrededor de la plaza que agrupa a los tres poderes del Estado en Brasilia.
Momento en que fuerzas de seguridad detienen a simpatizantes del expresidente Jair Bolsonaro, en el Palacio Presidencial de Brasil, el 8 de enero de 2023.
Reuters
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Seguidores del expresidente Jair Bolsonaro invadieron el Palacio de Planalto, sede del Ejecutivo; además de los edificios de la Corte Suprema y el Congreso de Brasil, este 8 de enero de 2023.
Los manifestantes exigían una intervención militar para que deponga al presidente Luiz Inácio Lula da Silva, quien se posesionó el pasado 1 de enero.
Luego de al menos cuatro horas del asalto, las fuerzas de seguridad lograron recuperar el control de las tres sedes gubernamentales en Brasil.
Agentes antidisturbios cargaron contra los manifestantes con gases lacrimógenos y establecieron un perímetro alrededor de los edificios que albergan los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
Según informaciones preliminares de la Policía, citada por medios locales, hasta el momento hay 150 detenidos.
Ante los graves altercados, Lula, quien se encontraba de viaje en el interior de Sao Paulo, decretó la intervención federal en Brasilia.
La medida, que estará vigente hasta el próximo 31 de enero, implica que las fuerzas de seguridad de Brasilia estarán bajo control directo del Gobierno federal.
Lula también prometió encontrar y castigar a los "vándalos fascistas" que "destrozaron todo lo que encontraron a su paso" en Brasilia e identificar a los posibles "financiadores" de esos actos antidemocráticos.
Poco antes del anuncio de Lula, el secretario de Seguridad de Brasilia, Anderson Torres, quien fue ministro de Justicia en el Gobierno de Bolsonaro, fue destituido de su cargo.
Un asalto al estilo de Trump
El episodio vivido este domingo en Brasilia recordó a la invasión del Capitolio de Estados Unidos ocurrida el 6 de enero de 2021, por parte de simpatizantes del expresidente Donald Trump, quien guarda una relación de amistad con Bolsonaro.
El exmandatario brasileño se encuentra actualmente en Estados Unidos, adonde viajó dos días antes de la investidura de Lula.
Medios brasileños mostraron en redes sociales la destrucción que dejaron los 'bolsonaristas' en el Palacio Presidencial.
Los ventanales de la sede del Poder Judicial también fueron rotos por los manifestantes, que ocuparon los edificios de los tres poderes en el país.
Mientras que en el Congreso, el grupo superó una barrera policial y subió la rampa que da acceso al techo de los edificios de la Cámara de los Diputados y del Senado.
Además, atacaron algunos vehículos de la Policía Legislativa, que brinda seguridad al Congreso.
Otros rompieron vidrios y lograron ingresar al recinto legislativo, e incluso grabaron videos detallando el asalto al Congreso.
El hecho ocurre luego de que los 'bolsonaristas' acampaban frente al Cuartel General del Ejército, en Brasilia, desde el día posterior a las elecciones del pasado 30 de octubre, en las que Lula derrotó a Bolsonaro.
Condena total
Desde Ecuador, la Cancillería condenó lo ocurrido en Brasil y "reitera su apoyo irrestricto a la democracia y al gobierno legítimamente electo".
Mientras que el presidente colombiano, Gustavo Petro, envió su solidaridad a Lula. Además, pidió una reunión urgente de la Organización de Estados Americanos (OEA).
A los rechazos expresados por Ecuador y Colombia, se sumaron otros países como Costa Rica, Panamá, Argentina, Chile y en general todos los gobierno de la región.
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