En pleno toque de queda, lanzan explosivo cerca de un centro comercial en Guayaquil
Dos hombres lanzaron un explosivo la madrugada del lunes frente a Plaza Mayor, norte de Guayaquil, y luego trataron de huir a bordo de un auto robado.
Dos hombres capturados tras la explosión de un artefacto en el norte de Guayaquil, el 25 de marzo de 2024.
Policía Nacional
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Durante el toque de queda, aún vigente en Guayaquil, la Policía atendió la alerta de un nuevo atentado con explosivos en el norte de la ciudad, la madrugada del 25 de marzo.
La detonación del artefacto explosivo ocurrió a la 01:00 del lunes, en las avenidas Pablo Baquerizo Nazur y Demetrio Aguilera Malta, a la altura del centro comercial Plaza Mayor. La amenaza iba dirigida a un negocio tecnológico en la ciudad.
Según información policial, agentes del sistema preventivo de Guayaquil escucharon la detonación a los lejos, durante un recorrido de rutina.
Al acudir al sitio del estallido, observaron la huida de un auto liviano, sin placas, en dirección hacia una avenida del norte de Guayaquil.
Tras la persecución policial, los agentes capturaron a dos hombres, identificados como Luis Armando F.O., de 36 años; y Danny Javier A.H., de 29 años.
Ambos registran antecedentes penales por los delitos de tenencia de armas de fuego y sustancias sujetas a fiscalización.
Moradores del sector, donde se detonó el aparato explosivo, reconocieron por las características físicas a Danny Javier A. H., como la persona que había dejado la bomba en la calle.
Continuando con las investigaciones, la Policía determinó que el vehículo, utilizado por los presuntos terroristas, registra una denuncia de robo en 2022, al sur de Guayaquil.
Al momento, los sujetos se encuentran en la unidad de flagrancia para la audiencia de formulación de cargos. Se los acusa del presunto delito de terrorismo, sancionado con una pena privativa de libertad de 13 a 15 años.
Pese al estado de excepción, que debe acabar el próximo 8 de abril, la Policía ha reconocido que las amenazas explosivas, con fines de extorsión, y los secuestros, son delitos recurrentes en Guayaquil y otros cantones de Esmeraldas y Los Ríos.
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