Visa Schengen, la esperanza para los ecuatorianos que no quieren volver
Los ecuatorianos que quieran quedarse en Europa necesitarán una visa Schengen, que exige que demuestren solvencia económica.
Ecuatorianos en Budapest viajando hacia Varsovia, el 3 de marzo de 2022.
Cancillería
Autor:
Actualizada:
Compartir:
“Yo no regreso a Ecuador”, dice segura 'María', una estudiante de Medicina de 21 años, quien prefiere no identificarse.
Ella teme enfrentarse a las críticas en redes sociales, luego de que el canciller Juan Carlos Holguín afirmara que un 20% de los 708 ecuatorianos que hasta el 3 de marzo de 2022 ha logrado salir de Ucrania, no quiere volver al país.
'María' está con su hermano y una amiga en Polonia. Los tres no tienen previsto volver al país por el momento, a pesar del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.
“Es una decisión. Para mí, estar en Ecuador sería perder el tiempo, no hacer nada, mientras que aquí tengo acceso directo a buscar opciones y es incluso más barato”.
'María', ecuatoriana en Polonia.
El ataque ruso a Ucrania no les dio tiempo para realizar ningún trámite en la universidad, que en este momento no tiene la capacidad de entregarle los documentos de las materias que ha terminado en cuatro años de estudio.
En Ecuador, la Secretaría de Educación Superior, Ciencia, Tecnología e Innovación (Senescyt), dice tener un plan de contingencia para ubicarlos en las universidades públicas y privadas, según las carreras y el nivel de estudios que hayan alcanzado.
“En caso de que la universidad no pueda entregar documentos, se tomará una prueba de conocimientos, la misma que permitirá ubicarlos en sus respectivos niveles de educación”, respondió la Senescyt a PRIMICIAS.
'María' y su hermano, de 19 años y quien estaba en un periodo de adaptación en Ucrania, no han firmado ningún documento que exima de responsabilidad al Estado ecuatoriano, como indica el procedimiento de Cancillería para quienes decidan quedarse en Europa.
“No hay clases hasta el 13 de marzo, y solo me queda esperar que la universidad me diga qué va a pasar”, dice María, quien ya está buscando la opción de que sus materias sean convalidadas en otra universidad de Europa.
Mientras tanto, los tres se moverán a países cercanos donde no les piden visas y puedan permanecer por tres meses bajo el estatus de turistas, como Turquía y Rumania.
“He leído que hay oportunidades en Bélgica para transferir los estudios para los estudiantes ucranianos”, dice 'María'. Pero para eso necesitará de una visa Schengen, que requiere de exigentes requisitos para permanecer en países europeos.
Requisitos para una visa Schengen
El espacio Schengen está compuesto por 26 países, que han acordado permitir la libre circulación de los ciudadanos como en un solo país.
Los ecuatorianos requieren de la visa Schengen para entrar en ese espacio. Y los requisitos no son sencillos de cumplir, sobre todo cuando la estadía es larga.
Para los estudiantes ecuatorianos que mantienen la incertidumbre sobre la continuación de las clases y quieren una visa de estudios en Europa, más allá de llenar formularios y de ser aceptados en una universidad, necesitan demostrar solvencia económica.
Por ejemplo, Bélgica estableció en 95 euros diarios el valor que un ciudadano extranjero debe acreditar en una cuenta bancaria para su estadía en ese país; es decir, USD 38.000 anuales, sin incluir el costo de la carrera universitaria que tienen un valor mínimo de USD 6.000.
La decisión de alrededor de 600 ecuatorianos de estudiar en Ucrania radica en que resulta económico cursar una carrera universitaria, explica Roberto, el padre de 'María'.
“Es una educación de calidad y es más barato que en Ecuador. Por ejemplo, las maestrías allá pueden costar USD 5.000, incluida la estadía durante un año, mientras que acá solo la universidad puede ser el doble”, explica Roberto.
También le puede interesar:
"Lo que debamos cubrir como Estado para que los jóvenes terminen sus carreras, lo haremos"
La Senescyt asegura que ha conversado con universidades privadas para que reciban a los alumnos que necesiten terminar sus estudios.
Compartir: