Transporte escolar, sin un plan para el regreso a clases presenciales

El sector del transporte escolar siente frustración tras la decisión del Gobierno de retomar las clases presenciales, de manera voluntaria y progresiva en Ecuador.

Las disposiciones del Ministerio de Educación han sido claras para los establecimientos educativos y padres de familia, pero este sector, que agrupa a unas 13.000 unidades en todo el país, no tiene certezas.

“No hay normativa para ellos”, aceptó una vocera del Ministerio de Educación.

“Es algo discrecional entre establecimientos y padres de familia, como Ministerio no nos corresponde”, reveló.

Las clases se encuentran suspendidas desde hace 14 meses en Ecuador, tiempo en la que los alumnos han recibido la educación de manera telemática, lo que constituyó el primer golpe al sector del transporte escolar.

“Con el anuncio de la vuelta a clases, fuimos a hablar en los colegios, ellos nos dicen que esperemos para ver la cantidad de alumnos que van a ir a presencial y de ese número cuántos van con sus padres y cuántos en expreso”, dice Luis Tenesaca, dueño de una furgoneta escolar.

“Hay una frustración enorme, llevamos más de un año sin trabajo, con el precio de los combustibles en alza, sin clases presenciales y con teletrabajo”

Luis Tenesaca, dueño de un bus escolar.

El precio del diésel ha subido un 48% en Ecuador desde julio de 2020, cuando el Gobierno de Lenín Moreno implementó un sistema de bandas que ata el precio de los combustibles al costo en el mercado internacional.

En Guayaquil, los transportistas escolares tuvieron un respiro durante los 12 días que duró un paro parcial de transporte de pasajeros, que laboraban de 04:00 a 12:00, debido a que “no les alcanzaba” para cumplir la jornada completa.

En esos días, el Municipio de Guayaquil permitió a los transportistas escolares realizar recorridos para ayudar a las personas que buscaban regresar a la casa.

Medidas de bioseguridad

La compañía de transporte escolar e institucional Santa Clara señala que sigue una serie de medidas de bioseguridad, para garantizar el cuidado de la salud de sus pasajeros, las que son de cumplimiento obligatorio.

• Limpiar a diario la llave y la cerradura exterior e interior de cada vehículo.
• Limpiar cada día el volante, la palanca del cambio de marchas y el freno de mano.
• Es importante usar guantes y, una vez terminada cada ruta, desecharlos.
• Si tose o estornuda, se debe limpiar a fondo el salpicadero y cristal delantero por la parte interior.
• El conductor siempre debe usar su mascarilla.
• Todos los usuarios deben portar sus mascarillas.
• Mantener un dispensador de gel.
• Mantener un tacho de basura con funda diaria.
• Viajar a un aforo del 50%, según la capacidad de fábrica.
• Viajar con las ventanas abiertas si el aforo es del 50%.
• Vigilar con el termómetro infrarrojo de mano para filtrar la primera sospecha del virus.
• Mantener la distancia de seguridad entre usuarios.
• Mantener siempre el reporte de posibles contagios, sea el conductor o los usuarios.

Un manual similar mantienen en otras cooperativas y federaciones, cuyas posibilidades de volver a trabajar todavía son inciertas.

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