El promedio diario de nuevos contagios crece en la segunda mitad de enero
El Ministerio de Salud registra rebrotes similares a los de los días más difíciles de la pandemia. Los hospitales trabajan al máximo de su capacidad con pacientes infectados de Covid-19.
Personas esperan noticias de sus familiares internados en el hospital Eugenio Espejo, el 5 de enero de 2021.
EFE
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Los casos de Covid-19 en el país han crecido de manera importante durante los dos últimos fines de semana de 2021, llegando a los 3.942 casos diarios el 16 de enero y a los 3.060 nuevos contagios el 24 de enero.
Entre el 1 y el 15 de enero, el promedio de contagios diarios fue de 900, en diciembre de 607 y en noviembre, 783. Mientras que entre el 16 y el 25 enero el promedio subió a 1.470 nuevos contagios por día.
Este promedio incluye esos dos picos con más de 3.000 casos, que evocan a los días más complejos de la pandemia, cuando los días con 2.500 o 3.000 nuevos casos eran habituales.
El mayor pico de contagios se reportó 23 de abril de 2020, cuando se confirmaron más de 10.000 contagios, pero fue por la inclusión de pruebas rápidas.
En todo caso, desde septiembre el promedio bajó, y aunque hubo picos, fueron mucho más moderados. Según los reportes diarios del Ministerio de Salud:
- 2.249 casos, el 23 de septiembre.
- 2.021 casos, el 25 de octubre.
- 1.396 casos, el 27 noviembre.
- 1.186 casos, el 30 de diciembre.
El exdirector de Salud del Hospital Carlos Andrade Marín, Mauricio Espinel, explica que estos rebrotes son la consecuencia del aumento de la movilidad en diciembre, considerado un mes de alta actividad comercial y social.
El médico agrega que "el primer rebrote de 2021 (el 16 de enero de 2021) ocurre precisamente dos semanas después de las festividades de fin de año. Algo que los cálculos epidemiológicos lo preveían".
Espinel no descarta que en los próximos días puedan aparecer nuevos "explosiones de casos porque la ciudadanía sigue en las calles sin aplicar medidas de bioseguridad".
No hay camas
El incremento de contagios es más delicados en estos días, pues los hospitales de la red pública de salud trabajan a su máximo capacidad.
El 25 de enero de 2021, 1.364 personas estuvieron hospitalizadas en todo el país como consecuencia de la enfermedad. Ese día, 866 personas recibían atención médica por síntomas relacionados con el coronavirus y 498 estuvieron intubadas en cuidados intensivos.
Algo similar ocurrió el 21 de enero, cuando hubo 1.340 pacientes hospitalizados.
El epidemiólogo Alberto Narváez explica que el impacto en el sistema hospitalario tiene relación directa con el aumento de casos.
El problema -señala- es que los pacientes llegan a los hospitales cuando los síntomas han avanzado. "Si las personas llegan con necesidad de ventilación mecánica, el sistema hospitalario va a desbordarse y no todos podrán ser atendidos".
En el Hospital Quito Sur del IESS, uno de los que recibe la mayor cantidad de pacientes Covid-19, hay 50 personas que esperan una cama disponible en la unidad de cuidados intensivos.
Este hospital trabaja al 100% de su capacidad, al igual que el Carlos Andrade Marín, también del IESS.
Los hospitales privados tampoco tienen camas. Ana Delgado, directora de la Asociación de Clínicas y Hospitales Privados, dice que desde finales de diciembre de 2020, las camas destinadas a pacientes Covid-19 tienen una ocupación del 95%.
En Guayaquil, la situación es similar. Los hospitales del IESS registran una ocupación del 100%, y las clínicas privadas del 95%.
Positividad
La velocidad de transmisión de Covid-19 se mantiene con cifras altas en Ecuador. Las provincias de Carchi, Cotopaxi y Tungurahua son las que registran una mayor positividad.
Carchi reporta 45 casos positivos por cada 100 pruebas. En Cotopaxi, la cifra es de 43, y en Tungurahua de 41.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el número ideal para que la pandemia sea considerada controlada es de cinco por cada 100 pruebas. Pichincha, en cambio, tiene una positividad de 27 y Guayas, de 24.
El epidemiólogo Mauricio Espinel explica que "estos números reflejan que no se aplican suficientes pruebas a la población. Las pocas que se realizan son dirigidas a personas sintomáticas.
El médico recuerda que en la actual situación epidemiológica se deben practicar pruebas masivas para identificar pacientes sintomáticos y asintomáticos para aislarlos y cortar el avance de la enfermedad.
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