Ratas, palomas, cucarachas y hormigas: cuatro plagas que enfrenta Quito
El Municipio de Quito ha identificado alrededor de 100 puntos críticos a lo largo de la ciudad. La Secretaría de Salud implementa un plan de control.
Un niño juega con palomas en la Plaza de San Francisco, el 17 de enero de 2021. El Municipio considera a las palomas como una de las plagas que afectan a a ciudad.
Primicias
Autor:
Actualizada:
Compartir:
Parques, plazas, mercados, quebradas y algunos sectores residenciales de Quito sufren de al menos cuatro plagas: ratas, palomas, cucarachas y hormigas, según la Secretaría de Salud del municipio.
Estas cuatro plagas se han convertido en una amenaza para la ciudad, porque son portadores de enfermedades contagiosas, y además, pueden dañar la infraestructura privada y pública.
Las ratas, por ejemplo, son portadoras de salmonela, tifoidea y leptospirosis; mientras que las palomas son portadoras de histoplasmosis, una enfermedad que se contrae cuando una persona inhala el polvo de sus heces.
Además, sus desechos dañan las fachadas, paredes y monumentos de parques y plazas, sobre todo del Centro Histórico de Quito, donde existe una alta población.
El investigador en Ciencias Veterinarias de la Universidad de las Américas, Marco Coral, dice la leptospirosis se contagia a través del consumo de agua y alimentos contaminados por la orina de las ratas.
Este problema tomó mayor relevancia gracias a un video que circuló en redes sociales en el que se ve a varias ratas deambulando en la Plaza Argentina, en el norte de Quito.
El secretario de Salud, Francisco Viteri, explica que las ratas y las palomas son las plagas que representan mayor peligro. Estas especies son animales sinantrópicos, es decir, "se adaptan a las zonas habitadas por humanos, utilizándolas como sus hogares".
El funcionario calcula que en Quito hay entre 21 millones y 30 millones de ratas. Esta cifra se calcula tomando como base la media internacional de que en una ciudad hay entre siete y 10 roedores por habitante.
"En el caso de las palomas no podemos saber cuántas hay porque no existen parámetros que nos permitan calcular el número, pero sí podemos decir que hay miles", agrega.
Plan de acción
La Secretaría de Salud asegura que cuenta con un plan de acción continuo para combatir las plagas que hay en Quito.
La entidad identificó 100 puntos conflictivos en la ciudad, entre los que se destacan Tumbaco, Calderón, Quitumbe y Los Chillos. Se suman Solanda, La Magdalena, Centro Histórico, Iñaquito, La Delicia y La Mariscal.
El secretario Viteri detalla que, en el caso de las ratas, fue necesario colocar 30 kilogramos de cebos rodenticidas para evitar un aumento de esta población.
"A finales de enero evaluaremos el impacto de la intervención y volveremos a colocar los cebos si es necesario. Mientras tanto, seguimos evaluando otros puntos que requieren una intervención", adelanta Viteri.
Sobre el control de palomas, Viteri reconoce que no es una tarea fácil, pues depende, en gran parte, de la conducta ciudadana.
Estas aves se instalan en lugares en los que tienen fácil acceso a alimentos, como las plazas. "Es por eso que pedimos a las personas que no les den de comer". El Municipio insistirá en su pedido para que la ciudadanía elimine esta conducta.
Ángela Pérez llega todos los días a la Plaza de San Francisco, en el centro de Quito, para dar de comer a las decenas de palomas que hay en el lugar. "Para ir a mi trabajo debo cruzar la plaza, así que aprovecho para darles de comer", dice.
Medidas parche
El profesor de la UDLA, Marco Coral, califica como una medida parche al plan de intervención municipal. Sostiene que "la mejor forma de erradicar las ratas y las palomas es con un buen manejo de la basura".
Según Coral, la presencia de estos animales es un indicador de suciedad, descuido y mucha basura. "Hay que evitar que existan espacios con basura acumulada. Si la ciudad logra este objetivo, las ratas y las palomas desaparecerán", dice.
Para él, la colocación de cebos rodenticidas debe ser una medida complementaria al manejo de los desperdicios y a la limpieza que debe haber en los espacios públicos y privados.
Plagas de hormigas y cucarachas
El Código Municipal establece que el control y manejo de las plagas en el espacio público es tarea de las entidades municipales.
La normativa aclara, sin embargo, que en espacios privados, este es un deber de los dueños o arrendatarios de viviendas o establecimientos comerciales.
El secretario Viteri dice que eso significa que las personas deben controlar particularmente la presencia de otras plagas, como hormigas y cucarachas.
El investigador Marco Coral recuerda que, al igual que las ratas y las palomas, las hormigas y las cucharas se sienten atraídas por el fácil acceso a alimentos. Aunque en época invernal, las hormigas buscan espacios secos para sobrevivir.
Compartir: