La militarización redujo los crímenes en Durán un 25%

El alcalde de Durán llegó cuando el acto de inauguración estaba en marcha, vestido con una camiseta gris (y gorra a juego). Pero debajo de la prenda de algodón tenía un chaleco antibalas. Luis Chonillo inició su gestión presencial un mes después de asumir el cargo.

El funcionario recordó el jueves un mes del atentado del que logró salir ileso. Pero se le quebró la voz al mencionar a los dos policías asesinados a disparos cuando lo custodiaban a la sesión inaugural del Concejo Cantonal, en el centro Durán.

“Hemos estado atendiendo de forma virtual y, a partir de ahora, con medidas de seguridad, vamos a estar asistiendo de forma intermitente, para inspeccionar de forma presencial obras y actividades del municipio”, dijo el alcalde.

Chonillo reapareció en territorio en la inauguración de dos Unidades de Policía Comunitaria (UPC). En 20 días de gestión virtual, el cantón ha sufrido dos roturas de acueducto. Y un 60% de Durán cumplió este 15 de junio cuatro días sin servicio de agua potable. 

La administración ubica a la dotación de agua como problema prioritario, incluso por encima de la seguridad, mientras limpia basurales desperdigados por la ciudad, que han provocado un problema de salud pública y un brote de leptospirosis.

“El agua potable es nuestra prioridad. Hemos tenido que apagar incendios porque la situación en la que hemos recibido el Municipio es crítica”, señaló Chonillo a la prensa.

Seguridad en Durán

Tras el atentado contra el alcalde, posible ataque de un brazo armado de la banda Los Choneros, el cantón se militarizó a finales de mayo con 500 soldados de élite que ejecutan operaciones combinadas con la Policía.

El coronel Christian Mayorga, delegado de la Policía en el acto de entrega de las dos UPC, dijo que Durán venía siendo el único distrito de la Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón) en las que las muertes violentas estaban decreciendo. 

La intervención ha contribuido con un trabajo de “contención de la violencia” en un distrito marcado en 2022 por escenarios de cuerpos colgados o desmembrados en la vía pública. En lo que va de 2023, Durán reporta 67 asesinatos, frente a 84 en el mismo periodo de 2022. 

La militarización le abrió el camino al retorno del alcalde, que salió del país tras el atentado del 15 de mayo. Y reapareció en un acto público en Guayaquil, el pasado 3 de junio, durante una sesión en la Prefectura de Guayas.

“La primera opción (tras el atentado) pudo ser renunciar, porque la familia se preocupa, pero soy responsable con los ciudadanos y aquí estamos”.

Luis Chonillo, alcalde de Durán.

Durán necesita otras ocho UPC, según Chonillo, y de hecho los terrenos fueron donados en el marco de un plan del Ministerio de Gobierno. Además, se prevén donar otros dos terrenos para la construcción de cuarteles intermedios, a cargo del Gobierno Nacional.

Los dos UPC entregados el jueves se construyeron con presupuesto local, una iniciativa de la administración municipal anterior que sufrió retrasos. Una de las unidades, la del cerro Las Cabras, cuenta con muros reforzados y vidrios blindados ante incidencia de bandas violentas. 

Sin agua potable

La provisión de agua potable es un problema histórico de Durán, cantón vecino a Guayaquil. El servicio por tubería llega a las casas tres veces por semana, durante tres horas, en horarios establecidos por sectores. 

Pero el pasado domingo 11 de junio el acueducto de 800 milímetros sufrió dos roturas. Y hasta este jueves el servicio seguía interrumpido. Y se esperaba restablecer el flujo del líquido por la noche o, en su defecto, hasta la mañana del viernes 16 de junio.

El Municipio ordenó incluso a los carros de bomberos abastecer con agua a la población. “Hemos recibido agua por tanqueros, pero no ha sido suficiente”, dijo José Vives, miembro del consejo barrial de Durán y habitante de la ciudadela Abel Gilbert.

La Empresa de Alcantarillado y Agua Potable de Durán (Emapad) informó que el daño afectó 15 sectores; es decir a 25.000 usuarios de los 41.000 que existen en el cantón.

Las roturas de la tubería se atribuyen a cortes eléctricos. Cuando el sistema se queda sin energía, el agua baja con fuerza de un reservorio a 100 metros sobre el nivel del mar en lo que se llama un golpe de ariete, reventando el acueducto en sus puntos más débiles.

Chonillo dijo que se estudia instalar válvulas para evitar los golpes de ariete y roturas con cortes de electricidad. 

A la concesionaria de agua potable de Guayaquil, Interagua, Durán le debía desde marzo pasado USD 300.000. La Municipalidad hizo un acuerdo de pago para que desde Guayaquil se distribuya el líquido a los sectores hasta donde tienen alcance.

¿Basurales industriales?

Los brotes de enfermedades como salmonella y leptospirosis -ligada a la proliferación de ratas- pusieron el foco en las condiciones de insalubridad de Durán desde inicios de año.

La administración del alcalde Chonillo intervino desde el primer día de labores una serie de microbasurales, basurales y macrobasurales desperdigados por la ciudad. 

“No solo es un problema de mala disposición de los desechos domésticos, en ciertos barrios se saca la basura a la hora establecida”. dijo Juan Solís, director de Ambiente. “También hay basura del sector empresarial e industrial que no está llegando al relleno sanitario”.

En Durán se asientan unas 300 industrias. La Dirección de Ambiente del Municipio detectó que la mala disposición de basura del sector empresarial contribuyó a la formación de al menos 15 macrobasurales, en los que se recolectaron entre 20 a 80 toneladas de basura. 

En esos lugares se halló basura que no corresponde al sector domiciliario, incluso desechos peligrosos como envases de agroquímicos y medicina caducada. 

Solís dice que empresas pueden estar utilizando servicios de recolección no autorizados, pero eso no les exime de la responsabilidad por sus desechos. La competencia Ambiental para ejercer los controles es de la Prefectura de Guayas, con la que están trabajando, dijo.

La Municipalidad prevé iniciar la próxima semana una campaña de comunicación y sensibilización ambiental y, en un mes, arrancar con controles y sanciones. Las multas van desde tres a los 75 salarios básicos por mala disposición de desechos.