Manabí vigila embalses de tres represas para evitar más inundaciones
La Prefectura de Manabí contrató una consultoría con la empresa manabita Urbano Sostenible por USD 140.350 para prevenir desastres por la época invernal.
Vista de al represa La Esperanza
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Los 22 cantones de Manabí sufren inundaciones o deslizamientos que han dañado infraestructuras y cobrado víctimas debido al fuerte temporal invernal que afecta a distintas regiones del Ecuador.
En Manabí, la prefectura activó un plan de etapa invernal y, además, contrató un Plan Multiamenaza, que incluye una Agenda Provincial de Riesgos.
Según el Gobierno Provincial de Manabí, existe un plan invernal, en el cual realizan previsiones en obras esenciales, como limpieza en cauces, puentes y alcantarillas.
Carlos Villacreses Viteri, coordinador de Infraestructura para el Desarrollo del Gobierno Provincial de Manabí, dijo que ya han ejecutado 299 acciones de prevención en 19 cantones.
Además han realizado 370 respuestas emergentes en 17 cantones y han desplegado 25.779 ayudas de Desarrollo Social.
Villacreses señaló que el Gobierno Provincial contrató una consultoría con la empresa manabita Urbano Sostenible para realizar un Plan Multiamenaza.
Esto incluye la Agenda Provincial de Riesgos, para identificar peligros como inundaciones, deslizamiento de tierra o sequías.
Una vez identificadas estas amenazas se pueden aplicar medidas y acciones de prevención, así como alertas tempranas.
Esta consultoría tiene un Presupuesto Referencial Total (sin IVA) de USD 140.350, según consta en el Sistema Oficial de Contratación Pública.
El Plan Multiamenazas y Agenda Provincial de Riesgos tiene los siguientes objetivos:
- Contribuir a la planificación y articulación institucional.
- Capacidad de respuesta inmediata ante desastres.
- Prevención y mitigación de riesgos y emergencias.
- Aportar a la construcción de comunidades seguras y sostenibles. Liderar la agenda provincial para la reducción de riesgos.
El Coordinador de Infraestructura para el Desarrollo también explicó que en la provincia hay un incremento de los asentamientos humanos en zonas de riesgo, lo que aumenta la vulnerabilidad.
Agregó que otro factor es la desforestación, que ha provocado un cambio de suelo, lo que compromete los recursos hídricos, las cuencas y microcuencas de la provincia.
Villacreses puso como ejemplo la alerta de riesgo de 16 familias ante el hundimiento de la tierra en el sector La Vainilla, del cantón Santa Ana. En esa zona, las personas fueron evacuadas.
En este mismo escenario, desde cantones como Bolívar, Santa Ana y Chone han llegado alertas de que las represas Poza Honda (en Santa Ana), La Esperanza (cantón Bolívar) y Río Grande (en Chone) podrían llegar a rebasar los niveles máximos y desbordarse.
Por ello, ya trabajan en los caudales para evitar que las obras de excedencias o vertedores de las presas funcionen, es decir que no se deben activar en condiciones normales.
Estos embalses, según el funcionario, realizan trabajos de limpieza de lechuguines para que no afecte el transporte fluvial.
Para Villacreses, que el río Portoviejo se desborde depende mucho de la represa Poza Honda, porque el cauce está controlado por el embalse multipropósito, es decir que abastece de agua para riego y controla las inundaciones.
Realidad rural
La vialidad rural es otra problemática de la época invernal, por las complicaciones que deben enfrentar los agricultores para sacar a vender sus productos o realizar otro tipo de actividad.
Desde la Prefectura realizan medidas emergentes, como limpieza de derrumbes y palizadas y habilitar pasos.
Además, en estas zonas existen planes de ayuda social y limpieza de esteros.
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