Fiscalía investiga presuntos delitos sexuales en la División de Ejército 'Tarqui'
La Fiscalía inició una investigación previa tras recibir dos denuncias de presuntos delitos sexuales en la Tercera División del Ejército 'Tarqui', en Cuenca.
Imagen referencial. Un cuartel militar de Cuenca.
Ejército ecuatoriano/Facebook
Autor:
Actualizada:
Compartir:
La denuncia de una conscripto y de una subteniente dieron inicio a una investigación por presuntos delitos sexuales, que involucra a personal de la Tercera División del Ejército 'Tarqui', en Cuenca.
El primer hecho habría ocurrido en diciembre de 2022. La víctima es una subteniente, quien sostiene “que ha sido violada”, explica a PRIMICIAS Ramiro Ordóñez, director de la Defensoría del Pueblo en Azuay, que auspicia la demanda.
Inicialmente, ella no denunció el hecho porque un superior le dijo que no lo haga, “porque va a perder el liderazgo frente a la tropa”, detalla Ordóñez. Pero en marzo de 2023 decidió poner la denuncia cuando ocurrió otro hecho que ahora está bajo investigación.
Un día de marzo, una conscripto pidió permiso para salir del cuartel y horas después, llamó a la subteniente para pedirle ayuda. Le dijo que sentía que habían puesto algo en su bebida y que estaba acompañada de dos militares.
La subteniente salió del recinto militar para auxiliarla. “Actualmente, la subteniente es procesada por desobediencia al salir del recinto sin autorización”, detalla el Defensor del Pueblo de Azuay.
Ordóñez explica que, a raíz de las denuncias, la Defensoría de Pueblo ha podido conocer actos que deben ser investigados dentro de la Tercera Zona Militar.
Por ejemplo, hay una persona que, en los dos casos, es “identificada como la que organiza y facilita las salidas” de las conscriptas, explica el funcionario.
Inicio de la investigación
"Cuando supimos del hecho, se tomaron las acciones pertinentes. Dimos acompañamiento y asesoría jurídica a la conscripto y a la subteniente", aseguró Arturo Velasco, excomandante de la Tercera División del Ejército, en una entrevista con Radio Tomebamba.
Las autoridades militares conocieron los hechos el 30 de marzo de 2023 y pusieron dos denuncias en la Fiscalía un día después. A la par, iniciaron un proceso administrativo bajo el reglamento militar.
En el proceso interno, hubo una audiencia preliminar, en la que las autoridades militares consideraron que “existen faltas con características de atentatoria”, por lo que se conformó el Tribunal de Disciplina para juzgar a cuatro involucrados.
Las faltas atentatorias son las más graves del reglamento disciplinario del Ejército. Si se determina la culpabilidad de los involucrados, la sanción es la separación inmediata de la institución.
El Tribunal Disciplinario instaló la audiencia de juzgamiento, que concluyó el 25 de mayo de 2023. La resolución aún no se ha emitido, informó la Defensoría del Pueblo.
De forma independiente al proceso que lleva la Zona Militar, la Fiscalía inició la investigación previa en las dos denuncias que están registradas.
El fiscal debe reunir los elementos necesarios para determinar si se instala la audiencia de formulación de cargos, que es la que da inicio a un proceso judicial.
Protocolos de actuación
La institución militar sostiene que cumplió todos los protocolos que se deben aplicar en estos casos. Existe un reglamento transitorio de género y una cartilla de género, que contienen las directrices.
Arturo Velasco, quien fue comandante de la Tercera División del Ejército 'Tarqui' cuando ocurrieron los hechos, se solidarizó, a nombre de la institución, con las jóvenes y sus familiares. "Tengan la confianza de que actuaremos de manera estricta ante lo sucedido", aseguró.
También sostuvo que en esta zona militar no han existido otras situaciones de ese tipo.
Además, la institución detalló que, dentro del fuerte militar, hay supervisión a tiempo completo, como establece el régimen interno "para garantizar los derechos del personal femenino".
El Cabildo por las Mujeres de Cuenca se pronunció al conocer los hechos y solicitó que se adopten mecanismos de control y evaluación permanente sobre las conductas que afecten la equidad de género en la institución.
Además, permanecerá vigilante de que los procesos administrativos y penales se cumplan y las denuncias no queden en la impunidad.
Compartir: