Encuesta sobre desnutrición infantil apunta a todos los estratos

Uno de los equipos que realiza la Encuesta Nacional sobre Desnutrición Infantil (ENDI) en Ecuador llegó el 1 de febrero de 2023 a Puembo, una parroquia rural de Quito. Allí los esperaban en su casa José Napa y Fanny Montero con su niño, de tres años.

Con un experto en antropometría (ciencia que estudia el tamaño, forma, proporción y composición corporal) y dos encuestadoras empezó el procedimiento, que este se divide en los siguientes pasos:

• Medir y pesar con exactitud al niño.
• Tomar muestras del agua que consume para analizar si el nivel del cloro es el adecuado y si hay bacterias, como la E. coli (heces fecales).
• Tomar una muestra de sangre para saber si padece anemia (falta de hierro).
• Aplicar un banco de preguntas para conocer el desarrollo cognitivo del niño.

Así se está desarrollando la primera encuesta especializada en desnutrición crónica infantil, dijo Roberto Castillo, director ejecutivo del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), ente encargado de esta tarea.

Las etapas del proceso

La última cifra de Ecuador tiene respecto al tema es de 2018, que arroja un dato alarmante: el 27,2% de niños menores de tres años padecen desnutrición crónica. Y, según Castillo, para combatir esta problemática es necesario medirla.

El INEC ha trabajado más de un año en esta encuesta.

La encuesta empezó en abril de 2022, cuya primera etapa fue la de seleccionar barrios y, con cartógrafos, enlistar las viviendas donde hay niños menores de cinco años.

La segunda etapa arrancó en julio de 2022 y consistió en aplicar el formulario sobre características básicas de la vivienda y la encuesta de desnutrición. Castillo enfatizó en que no solo apunta a estratos bajos, sino también a los altos y en las partes rurales y urbanas del país.

Durante seis meses, ya han llegado a 10.752 niños y esperan, durante el año, alcanzar a más de 23.000.

"No solo vamos a medir la desnutrición, sino también todos aquellos determinantes que puedan explicar los fenómenos de la desnutrición".

Roberto Castillo, director ejecutivo del INEC.

Para realizar la encuesta, el INEC ha tenido el acompañamiento de Unicef, con el fin de cumplir con los estándares para hacer estas mediciones. En cuanto a los análisis del agua, explicó que es importantísimo evaluar el agua que está llegando a los hogares.

"Un niño que consume agua de mala calidad tiene enfermedades diarreicas y, a su vez, puede padecer desnutrición", acotó el director.

Encuesta pospandemia

La encuesta no tiene final, dijo Castillo, pues se realizará de manera continua. Los primeros resultados se expondrán a mediados de febrero de 2023, será "los primeros pospandemia", advirtió.

Actualmente, en el país están trabajando 160 personas que van visitando aleatoriamente las viviendas.

Por eso, el presidente hizo un llamado para que las personas abran las puertas de sus casas a los equipos, conformados un antropometrista (quien tiene experiencia en enfermería), un encuestador y un supervisor.

Algunos de los equipos con los que trabajan fueron donados por Unicef.

Al final, determinaron que el hijo de Napa y Montero no tenía anemia. Que los niveles de cloro en el agua eran los adecuados. Y que las muestras sobre bacterias las mandarán a analizar.

Napa subrayó que, pese a que a su hijo lo lleva regularmente a chequeos médicos, es importante que les hagan esta encuesta para conocer la desnutrición infantil el país.