En cinco meses de 2022, los femicidios dejan a 89 niños en la orfandad

Andrés tiene apenas cuatro años. A esa edad, los niños suelen tener los primeros recuerdos conscientes de su vida. Quizá uno de esos primeros recuerdos sea de dolor, pues hace pocos días su madre fue asesinada a golpes en el cráneo.

Su muerte fue instantánea y el victimario fue el padre del pequeño, a quien la tragedia le llegó por partida doble, pues el hombre está preso y el niño permanece con una tía materna en su natal Manabí.

Ella espera que el asesino reciba la máxima pena que establece el Código Integral Penal para este tipo de delitos, es decir, 26 años de cárcel.

Andrés es solo uno de los 89 niños que en los primeros cinco meses de 2022 han perdido a sus madres, víctimas de femicidio.

El dato se desprende de un informe publicado por la Fundación Aldea, organización que desde 2017 se dedica a la recopilación de datos sobre femicidios en Ecuador.

El estudio muestra que mayoría de los hijos de las víctimas (32) tiene más de 18 años, aunque entre las víctimas colaterales también hay niños e incluso bebés:

• Menores de un año: un niño.
• De uno a cinco años: 18 niños.
• Entre seis y 10 años: seis niños
• De 11 a 17 años: nueve adolescentes.
• Mayores de 18 años: 32 jóvenes.
• No se tiene información: 22.

Geraldine Guerra, vocera de la fundación, dice que esas cifras son alarmantes. "Cada año que pasa vemos que más niños pierden a sus madres, como consecuencia del aumento de los femicidios".

La activista dice que esos niños necesitan, con urgencia, el bono que anunció el Gobierno el 8 de marzo de 2022 para suplir sus necesidades, ya que muchas víctimas estaban a cargo de sus hogares.

Guerra agrega que 2022 se perfila como el año más violento contra las mujeres, pues desde 2017 estos crímenes no paran de incrementarse, con excepción de 2018.

• 2017: 153 femicidios.
• 2018: 88 femicidios.
• 2019: 106 femicidios.
• 2020: 118 femicidios
• 2021: 197 femicidios.
• Enero-mayo: 118 femicidios, entre ellos, cinco transfemicidios.

La psicóloga Marisol López explica que es deber del Estado brindar ayuda psicológica a las víctimas que deja el femicidio. Sobre todo porque la mayoría de estos asesinatos ocurre en los sectores sociales más vulnerables.

"Hay que evitar que esos niños se conviertan en personas violentas", dice López.

El problema es que esa ayuda casi nunca llega. David perdió a su madre el 25 de junio de 2015 cuando solo tenía un año de edad.

Su abuela, Karina Gálvez, recuerda que su nieto apenas recibió ayuda psicológica del Estado durante tres meses, pero "nunca nos llamaron para otras citas". El pequeño tiene ahora ocho años y todavía ignora que el victimario fue el padre del niño.

¿Dónde hay más femicidios?

Guayas es la provincia más violenta contra las mujeres. La investigación de la Fundación Aldea muestra que entre enero y mayo de 2022 se registraron 34 femicidios en esa provincia, lo que corresponde al 28,8%.

En segundo y tercer lugar aparecen Esmeraldas y Manabí, con 15 y 13 femicidios respectivamente.

Con relación a las edades de las víctimas, la mayoría tenía entre 18 y 35 años. A este grupo pertenecían 66 mujeres, mientras que 12 víctimas tenían entre 36 y 45 años.

Las cifras tienen información preocupante, pues también hay niñas víctimas de femicidio. En lo que va de 2022, 15 niñas murieron en manos de un hermano, padre, padrastro, primo, tío o abuelo.

Gerladine Guerra, de la Fundación Aldea, recuerda que la mayoría de femicidas pertenece al círculo familiar cercano de las víctimas.

Las armas más utilizadas

Las armas de fuego son los objetos con los que se comete la gran parte de los femicidios. Al menos así ha sido en los primeros cinco meses de 2022.

En este período, el 68% de los femicidios se produjo con un arma de fuego, según la publicación de la Fundación Aldea.

Otras herramientas utilizadas en estos crímenes fueron las armas blancas, con el 13%, y las manos de los agresores, con el 8%.

Guerra espera que el Gobierno cumpla su ofrecimiento de invertir los USD 24 millones que anunció para prevenir la violencia contra las mujeres y evitar que más mujeres sean asesinadas.