Las altas temperaturas no dan tregua en España e Italia
Se espera una semana de intenso calor en España e Italia. El anticiclón Caronte elevará las temperaturas por encima de los 40 grados en varias ciudades de los dos países.
Un perro bebe agua de una fuente durante un caluroso día en Turín, Italia. Foto del sábado 15 de julio de 2023.
Tino Romano / EFE
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España e Italia volverán a sufrir intensas olas de calor desde el 17 de julio de 2023, con récords de temperaturas, por encima de los 40 grados centígrados en España y hasta de 45 grados en algunas ciudades de Italia.
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) española advirtió de que esta masa de aire cálido procedente de África afectará a gran parte de los países de la ribera del Mediterráneo.
Y de que en España las temperaturas serán muy altas, por encima de los valores habituales del período más cálido del año, que se extiende entre mediados de julio y mediados de agosto.
Según la Aemet, a partir del 17 de julio entrará una masa de aire muy cálido, seco y estable. Las noches serán sofocantes, con temperaturas mínimas por encima de los 24 grados en varias localidades.
Se espera que el jueves 20 de julio comiencen a descender las temperaturas en todo el territorio español y se ponga fin a esta nueva ola de calor.
El anticiclón
La masa de aire cálido proveniente del África, denominada como anticiclón Caronte, elevará las temperaturas hasta los 45 grados en algunas ciudades italianas.
El anticiclón llegó desde 16 de julio a la península. Y 16 ciudades se encuentran en alta roja por las altas temperaturas, entre ellas, Roma, Palermo, Messina (en Sicilia), Bari, Bolonia, Florencia, Perugia y Pescara.
Otras ciudades importantes están en alerta naranja, como Ancona, Bolzano, Génova, Milán, Reggio Calabria, Trieste, Venecia y Verona.
Pero las temperaturas se intensificarán aún más desde el 17 de julio y puede batir algunos récords históricos de calor, como el de Roma, que llegará el lunes a 37-40 grados y el martes a los 42-43 grados.
Estas temperaturas pueden ser muy peligrosas para los turistas que estos días han invadido Roma y que a veces tienen que hacer largas colas para acceder a sus famosos monumentos, como el Coliseo o los Museos Vaticanos.
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