Amazonía ecuatoriana, la entrada para variantes de Covid-19 brasileñas
Al menos 58 haitianos han ingresado en los últimos 15 días a través de los puertos en la Amazonía ecuatoriana. Provienen de Brasil y su destino es Estados Unidos.
Un grupo de 44 ciudadanos de Haití arriban a El Coca, en Orellana, en su paso para migrar a Estados Unidos.
Radio Sucumbíos
Autor:
Actualizada:
Compartir:
En un largo viaje que puede durar semanas, 58 haitianos atravesaron la Amazonía de Brasil, Perú y Ecuador, en bote y a pie, en su intención de llegar a Estados Unidos.
El 11 de marzo arribó un primer grupo de 44 ciudadanos haitianos al Coca, provincia de Orellana; la mayoría eran familias y mujeres con sus hijos.
Las autoridades no han podido confirmar si el recorrido lo gestionan con bandas delictivas de trata y tráfico de personas; es decir, que pagan importantes sumas de dinero para guiarlos por la ruta hasta Estados Unidos.
Porque los llamados “coyoteros” no siempre acompañan a sus víctimas en el trayecto.
La entrada a Ecuador fue por El Coca; sin embargo, fueron llevados hasta Lago Agrio, donde se quedaron en la Casa del Migrante de Cáritas.
Según el gobernador de Sucumbíos, Álvaro Beltrán, “todos ingresaron a cuarentena, pero estuvieron dos días y se fueron, o les permitieron irse, este grupo de Cáritas”.
El problema es que varios de los viajeros presentaban síntomas de Covid-19, y venían de la Amazonía brasileña, donde hay nuevas variantes que son más contagiosas que las cepas que circulan en Ecuador.
“Al segundo día, cuando se les fue a realizar las pruebas de coronavirus, ya no había nadie”.
Álvaro Beltrán, gobernador de Sucumbíos.
Beltrán responsabiliza a la organización de cualquier consecuencia del paso de los migrantes por la provincia.
“Nuestra casa es la Casa del Migrante en Tránsito, administrada por el vicariato apostólico de Sucumbíos, la pastoral social Cáritas, nosotros hacemos un servicio humanitario, luego, la gente quiere seguir su camino”, responde Kelly Jordan, coordinadora de Movilidad de Cáritas en Sucumbíos.
El Ministerio de Salud visitó al grupo de haitianos, les dio medicación a quien lo necesitaba “y de ahí ellos decidieron, porque nosotros no podemos retener a los migrantes en tránsito”, explica Jordan.
Además, según ella, las mismas autoridades de El Coca y Lago Agrio no estaban coordinadas para una atención inmediata.
Tampoco crearon un cerco epidemiológico, ni vigilaron que este grupo de personas cumpliera una cuarentena.
En la Casa del Migrante, según su coordinadora, “ellos descansan, tienen alimentación, todos los servicios humanitarios y deciden cuándo irse”.
En su estadía en Ecuador, los ciudadanos haitianos esperaron transferencias de dinero de sus familiares en Estados Unidos para continuar el viaje.
En esa situación está actualmente una familia de cinco personas, que permanece en Sucumbíos esperando el dinero.
La falta de control y estudios epidemiológicos en la Amazonía pone en riesgo la entrada de nuevas variantes que no se puedan registrar.
Históricamente, la migración haitiana se ha dado por factores políticos y económicos que los ha sumergido en crisis recurrentes.
Brasil figura como un país de oportunidades para los haitianos desde 2014, cuando se realizó el Mundial de Fútbol, y por su política de visados favorables.
Para 2017, Brasil había entregado cerca de 70.000 residencias a ciudadanos haitianos.
Compartir: