En Tungurahua y Cotopaxi, 17.000 agricultores están al borde de la quiebra
Un derrumbe por las fuertes sequías destruyó el sistema de captación de agua en el canal de riego Latacunga-Salcedo-Ambato, que abastece de agua a los agricultores de tres cantones de la zona central del país.
Un vehículo de los bomberos en los exteriores de la Penitenciaría Nacional en Puerto Príncipe, Haití, el 14 de marzo de 2024.
EFE
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En la zona norte de Ambato (Tungurahua) y en Salcedo y Latacunga (Cotopaxi) más de 17.000 productores de verduras y hortalizas están desesperados por la falta de agua para regar sus cultivos.
“¡Sin agua todo se muere!”, dicen los agricultores y eso es lo que ocurre. ¿Qué pasó? La erosión de la tierra hizo que cediera unos 30 metros de montaña, lo que destruyó un tramo del canal de riego Latacunga-Salcedo-Ambato.
Por este canal biprovincial circulaba el agua que abastecía los cultivos agrícolas y para los animales de decenas de comuneros, asegura Marcelo Suárez, presidente del Sistema de Riego.
La afectación se detectó el martes 5 de marzo de 2024 en el sector de Salache-Angamarca, en Salcedo. Al principio, los agricultores no pensaron que el problema era tan grave, hasta que llegaron los técnicos a inspeccionar.
El prefecto de Tungurahua, Manuel Caizabanda, aseguró que los daños son severos y se estima que la obra esté lista en 21 días más para que el agua pueda circular nuevamente.
Sin embargo, para los agricultores 21 días más sin agua significa la quiebra y eso podría desabastecer en un 20% al país de las hortalizas y verduras, sostuvo el presidente del sistema de riego.
Tanqueros sacan provecho
Ernesto Chango es productor de hortalizas y verduras de Puerto Arturo, ubicado al norte de Ambato. En cuatro cuadras ha sembrado cebolla blanca, cilantro, lechuga y maíz, pero está muy preocupado, porque ni la lluvia acompaña.
El canal de riego pasa cerca de su propiedad y asegura que en los 50 años que tiene de construido es la primera ocasión que se quedan sin agua.
Invirtió alrededor de USD 5.000 con la esperanza de lograr una ganancia, pero ahora cree que todo se perderá. Sembró hace un mes y es en esa época de crecimiento cuando los productos requieren de mucha agua, recalcó el agricultor.
Mencionó que cada ocho días necesita por lo mínimo unos 10 tanqueros de agua, pero sus recursos no le abastecen, porque les están cobrando entre USD 30 y USD 40 por cada tanque. Es decir, necesita mínimo USD 300 por semana.
“Es demasiado. Están sacando provecho del problema. Por eso queremos que las autoridades nos ayuden con alternativas para no gastar demasiado en tanqueros”.
Ernesto Chango, productor.
Alex Chicaiza vive en la comunidad de Quijaló, en Salcedo. Siembra tomates y asegura que en 15 días más se muere toda la producción, si no tiene suficiente agua.
“Han pasado 17 días y se han agotado las reservas de agua. Ni siquiera llueve para recolectarla. Eso nos asusta porque puede generarse un caos. Pedimos que nos declaren en emergencia, porque las pérdidas económicas serán millonarias y los bancos no esperan", reclamó Chicaiza.
Solo Alex Chicaiza ha invertido cerca de USD 7.000 en producir tomates en invernaderos. Mencionó que en Quijaló existen al menos 10.000 metros cuadrados de producción de tomates.
Solo en 2.000 metros cosechan hasta 500 cajas, que las distribuyen en diferentes provincias del país. Sostuvo que incluso los tanqueros se están aprovechando de la necesidad y realizan un cobro exagerado a los productores.
Los ríos, una alternativa
El prefecto de Tungurahua, Manuel Caizabanda, aseguró que la urgencia de solucionar el problema hizo que se unieran autoridades, empresa pública y regantes.
Primero abrieron una vía, porque el sitio quedó inaccesible, cubierto de piedras y tierra. Después empezó la construcción de un muro de protección, donde se utilizan alrededor de 700 maquinarias pesadas.
Una vez concluidos esos trabajos empezará la rehabilitación del túnel que se destruyó en el deslizamiento, informó el presidente del sistema de riego.
La Empresa Pública del Agua (EPA) informó que los regantes deben esperar 21 días más para que la obra esté lista y el agua vuelva a fluir por el túnel y habilitar el sistema de riego para los miles de regantes que no tienen servicio.
Mientras tanto, los agricultores esperan que las autoridades de cada cantón y parroquia los ayuden a buscar alternativas, como enviar a los tanqueros del Cuerpo de Bomberos para que les provean de agua.
En la parroquia Izamba, el presidente del Gobierno Parroquial, Christian Ronquillo, aseguró que están adaptando motores para extraer el agua del río Ambato y distribuirla a los agricultores.
Ernesto Chango, quien pertenece a la parroquia Unamuncho, también espera acciones y un milagro, porque asegura que una semana más sin agua, significa el fin.
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