La Aerovía lidera la oferta de opciones turísticas en Guayaquil
Durante el feriado de Semana Santa, el sistema de transporte municipal atrajo más visitantes que la noria, ubicada en el Malecón Simón Bolívar. Según sus autoridades, la Aerovía registra 10.000 viajes diarios.
La Aerovía y La Perla se conectan a la altura del Malecón Simón Bolívar, centro de Guayaquil.
Municipio de Guayaquil
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Largas filas de usuarios se evidenciaron en las distintas paradas de la Aerovía, durante el último feriado en Guayaquil.
Una de las paradas de mayor movimiento es precisamente la del Malecón Simón Bolívar, desde donde otro de los atractivos de Guayaquil salta a la vista: la Perla, aquella noria gigante que opera desde el 25 de octubre de 2016.
Aunque la Aerovía se concibió como un medio de transporte, en la actualidad se ha convertido en otra opción de entretenimiento o paseo familiar.
Camilo Ruiz, administrador del sistema de transporte municipal, dijo que este servicio registra un promedio de 10.000 viajes diarios. Tiene capacidad para movilizar hasta 40.000 personas por día.
"Desde enero de 2022, mes en que se experimentó una de las asistencias más bajas por el repunte de la variante de Covid-19, omicron, hasta la presente fecha se ha incrementado la demanda en un 48%", explicó a PRIMICIAS.
Los USD 0,70 que cuesta cada viaje y los 20 minutos de trayecto desde el centro de Guayaquil hasta el malecón de Durán son algunas de las razones que atraen a sus visitantes. Hasta bodas civiles se han celebrado en sus inmediaciones.
Sus 154 cabinas tipo teleférico funcionan todos los días, de 06:00 a 19:00.
Durante su recorrido, de 4,1 kilómetros y cinco estaciones, se pueden apreciar el río Guayas, los malecones de las dos ciudades, bienes patrimoniales como el edificio del Hospital Luis Vernaza, Las Peñas y el cerro Santa Ana.
"Estos atractivos turísticos, efectivamente, hacen del servicio de transporte una experiencia muy agradable y segura, tanto para el usuario diario como para el turista", agregó Ruiz.
Aunque no clasifican a sus visitantes, su administrador sostuvo que entre junio y agosto hay muchos usuarios de la Sierra, justamente durante las vacaciones escolares. Pero también se visualiza presencia de extranjeros de manera regular todo el año.
La Aerovía opera desde el 21 de diciembre de 2020, ocho meses después del pico de la pandemia. El Municipio de Guayaquil invirtió USD 135 millones.
La Perla y el barco Morgan, con suertes distintas
La Perla le lleva cinco años y medio de ventaja. Fue inaugurada el 25 de octubre de 2016. El alcalde de esa época, Jaime Nebot, la resaltó como la primera rueda gigante de Ecuador y la más alta de Sudamérica.
Sus 57 metros de altura la distinguen entre los otros atractivos del Malecón Simón Bolívar. Representaciones y Operaciones Latinoamericanas (Reprolimit) asumió el costo de inversión, que ascendió a USD 4,3 millones, y su manejo por 25 años.
Según sus autoridades, 756.880 personas rodaron en La Perla durante su primer año de funcionamiento, lejos de la meta de 1,3 millones de turistas anuales, prevista por la concesionaria.
Desde entonces, se desconoce cuántos la visitan y su recaudación. Quienes transitan por el malecón, la ven casi vacía incluso los fines de semana. Esto, a pesar de sus acompañantes del Safari Xtreme, que comprende cinco juegos mecánicos.
La noria tiene 36 cabinas con aire acondicionado y su vuelta dura 12 minutos. Opera todos los días, de 10:00 a 22:00 y su costo es de USD 3,50, de lunes a viernes; y USD 5 los sábados y domingos.
El barco Morgan es el gran ausente del río Guayas. Se inauguró el 2 de octubre de 2003, durante la primera administración de Nebot.
El entonces alcalde calificó a la embarcación como una interesante propuesta para paseos turísticos y culturales por el río Guayas.
Se creó la empresa de turismo Mar Petroleum, del argentino Enrique Llanas, con respaldo de la Fundación Malecón 2000.
El Municipio construyó incluso un muelle cerca de la calle Sucre, donde funcionaban las boleterías.
Luego de 19 años, su realidad es otra. Atrás quedaron esos viajes fluviales de 50 minutos por sitios turísticos como Puerto Santa Ana, barrio las Peñas, Malecón 2000, Isla Santay y Mercado Caraguay. A raíz de la inauguración de la Aerovía, los términos para su operación cambiaron.
Camilo Ruiz explicó la situación. "Por los 30 metros de la altura de su mástil, la navegación del barco Morgan representaba un riesgo permanente para la seguridad de los más de 10.000 usuarios que utilizan el servicio público de transporte, cuya altura no supera los 11 metros en marea alta".
El administrador de la Aerovía añadió que esto podría producir un accidente muy grave.
Por eso hicieron recomendaciones técnicas a las autoridades competentes, para que regulen la operación del Morgan y ambas actividades puedan convivir con el menor riesgo posible.
Según Ruiz, el representante del barco aceptó reducir la altura de su embarcación, como consta en la carta de navegación del río Guayas y en la resolución que norma la navegabilidad en las cercanías de la Aerovía.
"No se trata de que una actividad sea excluyente de la otra, la navegabilidad en el río Guayas debe promoverse y ese es el espíritu de la Aerovía", concluyó.
Los usuarios esperan ver pronto al Morgan navegando por el Guayas.
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