Muñoz: el entrenador que hizo fortuna vendiendo medicamentos donados
Abraham David Muñoz Veléz denunció a Daniel Salcedo por suplantación de identidad. La figura de Muñoz esta vinculada al escándalo por la venta de un medicamento que fue donado a Ecuador en plena pandemia de Covid-19.
Abraham Muñoz acudió la Fiscalía para rendir su versión en la indagación sobre la presunta red de corrupción en hospitales del IESS, el 6 de julio.
API
Autor:
Actualizada:
Compartir:
Oficialmente Abraham Muñoz es un preparador físico, aunque en su Registro Único de Contribuyentes (RUC) su actividad económica autorizada es la de "calificador de banano".
Muñoz hacía sus entrenamientos en un gimnasio al norte de Guayaquil, donde habría conocido al empresario Daniel Salcedo, quien es pieza clave en la investigación de la Fiscalía por corrupción en los hospitales del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS).
Clientes y compañeros de entrenamiento confirman a PRIMICIAS haber visto a Muñoz de manera frecuente. Pero nadie quiere hablar públicamente de él, por miedo.
"Nunca imaginé que se dedicaba a la venta de fármacos. Los entrenadores suelen vender suplementos alimenticios, pero no medicinas”, señala un preparador que pide mantener en reserva su nombre.
Desde el 7 de julio, circulan imágenes en redes sociales de Muñoz presumiendo de los fajos de billetes que habría amasado como producto de la venta del medicamento Actemra. Se trata de un fármaco usado para tratar pacientes críticos de Covid-19.
La psiquiatra Julieta Sagñay, quien superó el coronavirus en abril, alertó por primera vez sobre los negocios de Muñoz.
"Vendió ampollas de Actemra que habían sido donadas a los hospitales públicos", dice la doctora Sagñay. Ella se animó a denunciar a Muñoz cuando lo reconoció en unas imágenes de televisión.
Precisamente el 7 de julio, tras su declaración en la Fiscalía, Muñoz dijo que conoció a Salcedo porque había sido su entrenador físico. Pero aseguró que no eran amigos cercanos.
Además, negó cualquier implicación con los delitos que se le atribuyen a Salcedo. Pero cuando éste último intentó huir del país con rumbo a Perú llevaba consigo una credencial con la identidad de Muñoz.
Por ello, Muñoz ha interpuesto una denuncia por suplantación de identidad contra Salcedo.
Negocios y apuestas
Otro entrenador consultado por PRIMICIAS dijo que Muñoz tenía fama de apostador. “En sus historias de Instagram subía fotos de sus juegos de cartas con amigos, en los que las apuestas no bajaban de USD 5.000. Presumía de eso”.
¿Cómo solventaba sus apuestas? Es un misterio, pues según el Servicio de Rentas Internas (SRI), Muñoz no ha reportado ingresos ni pago del Impuesto a la Renta desde 2009.
Pero tras la denuncia de Sagñay se conoce que Muñoz habría recurrido a negocios "alternos" al entrenamiento físico.
Uno de estos negocios era la venta de Actemra, precisamente en marzo y abril de 2020, cuando Guayaquil vivía una crisis sanitaria y humanitaria por culpa de un fuerte brote de Covid-19 que costó miles de vidas.
Maldad con sobreprecio
La doctora Sagñay explica que su familia se contactó con Muñoz para adquirir el medicamento. Dice que eran momentos de desesperación, porque no se encontraba Actemra en los hospitales públicos ni las en farmacias privadas.
"Él vendía la ampolla de 200 miligramos en USD 1.000 y mi hermano se contactó con este sujeto", narra Sagñay. En las farmacias la misma presentación de este medicamento cuesta USD 200.
Cuando Sagñay recibió una foto del fármaco, enviada por Muñoz, notó que en la caja decía 'prohibida su venta' porque el medicamento había sido donado por el Roche al sistema de salud público de Ecuador.
Hace dos meses, Sagñay denunció el hecho ante la farmacéutica Roche que, a su vez, entregó las pruebas al IESS y al Ministerio de Salud Pública (MSP).
Fármaco delicado
En un comunicado oficial, Roche dice que entre marzo y abril donó al sistema de salud público de Ecuador 87.600 equipos de protección, insumos médicos y fármacos como Actemra.
Roche añade que ante "potenciales casos de falsificación, contrabando o comercialización fuera de establecimientos autorizados", la empresa notificó a las autoridades competentes.
David Pérez, neumólogo y médico clínico, explica que el medicamento Actemra se usa para tratar a pacientes de lupus o artritis reumatoide.
Pero, con la llegada de la pandemia de coronavirus, el medicamento empezó a ser administrado a pacientes de Covid-19, pese a que existen pocas evidencias clínicas sobre sus beneficios.
Actemra, según Pérez, actúa como antiinflamatorio "porque disuelve o elimina la acumulación de líquido en los pulmones en pacientes severos de coronavirus".
Al ser un fármaco de uso delicado, debe administrarse en hospitales y bajo la supervisión médica. En Guayaquil solo era usado en el hospital Teodoro Maldonado Carbo, del IESS, y en el hospital del Guasmo, del Ministerio de Salud.
"Muñoz tenía las ampollas guardadas en una caja de cartón y sin refrigeración. Jugó con la vida de las personas", añade la doctora Sagñay.
Por otra parte, el Ministerio de Salud aún no se pronuncia sobre cómo Muñoz tuvo acceso al medicamento donado por Roche al país.
Pero son públicas dos órdenes de entrega del fármaco, provenientes del hospital del Guasmo y firmadas en abril por el propio Muñoz.
Mientras que el IESS ha mencionado que investiga una fuga en las bodegas donde se guardaba la medicina.
Compartir: