Ecuador abre el abanico: busca vacunas chinas, rusas y estadounidenses
El Gobierno ya cerró una negociación de dos millones de dosis con el fabricante de la vacuna china Sinovac. Con Rusia empezarán los acercamientos para comprar la Sputnik V.
Médicas del Centro de Salud Pumapungo de Cuenca preparan las dosis de la vacuna contra el coronavirus, el 19 de febrero de 2021.
API
Autor:
Actualizada:
Compartir:
Las escasas dosis de vacunas contra el Covid-19 que han llegado al país y la baja disponibilidad a escala mundial obligaron a que el Gobierno ecuatoriano busque nuevas opciones en países como China y Rusia.
Esto, a pesar de que el exministro de Salud, Juan Carlos Zevallos, reiteró que solo las vacunas que cuenten con la aprobación Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) o de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) podrían aplicarse en el país.
Pero el 25 de febrero de 2021, Zevallos anunció sorpresivamente la primera compra de vacunas a una empresa china. Ecuador recibirá dos millones de dosis de Sinovac, pese a que no tiene la aprobación de uso de emergencia de las agencias reguladoras mencionadas.
"Esta vacuna cuenta con una autorización temporal de la Organización Mundial de la Salud (OMS)", dijo Zevallos en su última rueda de prensa como funcionario.
El primer millón de estas dosis llegará en marzo, mientras que el otro millón arribará en abril.
Estas vacunas son parte de los 20 millones de dosis que el Gobierno asegura haber adquirido a fabricantes como Pfizer, AstraZeneca y Sinovac. Además de las negociaciones con la iniciativa Covax de la OMS.
Pero la negociación con Sinovac no es la única que ha tenido el Gobierno con empresas chinas. Zevallos confirmó que también mantuvo reuniones con el laboratorio Anhui Zhifei.
Esta empresa tiene previsto iniciar con la fase 3 de investigación en las próximas semanas. Ecuador es uno de los candidatos para la realización de esta fase del ensayo clínico.
El proceso está en manos de la Agencia Nacional de Regulación, Control y Vigilancia Sanitaria (Arcsa), que debe aprobar el inicio del ensayo.
El exministro dijo que Ecuador tampoco ha descartado adquirir otras vacunas como las de Covaxx, Novavax, Johnson & Johnson, Moderna, Sinopharm, Cansino Biologics y Gamaleya Institute.
Primeros pasos con Rusia
La primera reunión entre el Gobierno ecuatoriano y los representantes de la vacuna rusa Sputnik V estaba prevista para el 26 de febrero de 2021. El exministro de Salud, Juan Carlos Zevallos, dijo un día antes de presentar su renuncia que a las 09:30 mantendría el primer acercamiento con el fabricante.
Tras la dimisión de Zevallos, el Gobierno no ha confirmado si la reunión se concretó o si se aplazó hasta que un nuevo ministro asuma el cargo.
Lo que Zevallos sí dijo es que la vacuna rusa ha ganado confiabilidad al haber publicado los resultados de sus ensayos clínicos.
Para el experto en farmacología Enrique Terán, las vacunas chinas y rusas han demostrado tener la seguridad y eficacia suficientes para ser administradas en el país.
Sin embargo, advierte que no será fácil adquirirlas, pues otros países de la región como Argentina, Bolivia, México, Nicaragua, Paraguay y Venezuela se adelantaron en las negociaciones y tomaron ventaja frente a Ecuador.
Considera un error del Gobierno no haber adelantado negociaciones con estos fabricantes y "centrarse únicamente a las vacunas de Pfizer y AstraZeneca".
El experto sostiene que la Arcsa debe preparar las aprobaciones de uso de emergencia para estas vacunas, como lo han hecho Colombia, Brasil y Argentina.
Terán cree que el nuevo ministro debería también "investigar las vacunas chinas, rusas, indonesias e indias que se encuentran en la fase 3 de investigación para empezar a negociar con sus fabricantes".
Las vacunas que llegarán
El Gobierno ha asegurado que al menos tres vacunas serán parte del plan de vacunación que se extenderá durante 20201: Pfizer, AstraZeneca y Sinovac.
Según el Ministerio de Salud, a lo largo del año llegarán, producto de negociaciones directas con los fabricantes, seis millones de dosis de Pfizer, cinco millones de AstraZeneca y dos millones de Sinovac.
A estas se suman siete millones de vacunas de la iniciativa Covax, de la Organización Mundial de la Salud (OMS), aunque en este caso no se trata de una vacuna específica, pues la iniciativa distribuye las biológicos disponibles entre sus integrantes.
En los tres casos que sí se conocen, la ciudadanía deberá recibir dos dosis para alcanzar una inmunidad que puede ir desde el 50% hasta el 95%. Sin embargo, estas vacunas se diferencian por la tecnología con las que fueron elaboradas.
La vacuna de Pfizer usa un tecnología llamada ARN mensajero, que suministra parte del código genético del virus para que las células aprendan a producir una proteína propia del virus y desencadenar una respuesta inmune.
La vacuna de AstraZeneca, en cambio, utiliza un virus diferente al SARS-CoV-2 y menos nocivo. Por lo general disfrazado con proteínas del coronavirus para generar una respuesta inmunitaria.
Mientras que Sinovac utiliza la técnica de virus inactivo. Bajo este método, se inocula una versión completa del virus SARS-CoV-2 aunque debilitado o desactivado para que el cuerpo, sin el riesgo completo de la enfermedad, pueda generar anticuerpos necesarios para combatirla.
Compartir: