Estos son los resultados del estado de excepción que concluyó tras 90 días
Las Fuerzas Armadas seguirán ejecutando operativos de seguridad contra grupos criminales, tras el fin del estado de excepción.
Militares durante un operativo en Quito el 7 de abril de 2024.
Fuerzas Armadas
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El Bloque de Seguridad, integrado por policías y militares, ejecutó más de 272.000 operaciones durante el estado de excepción por grave conmoción interna, entre el 9 de enero y el 6 de abril de 2024.
Así lo detalla el Ministerio de Defensa en un comunicado emitido tras el fin de esta medida, que dejó los siguientes resultados:
- Más de 18.000 detenidos, 300 de ellos por presunto terrorismo
- Más de 260 operativos contra grupos terroristas
- Incautación de 77.500 kilos (equivale a 77,5 toneladas) de drogas
- Decomiso de 140.300 galones de combustible
Según el Ministerio de Defensa, en este periodo se logró "golpear a estructuras terroristas, incautando una gran cantidad de armas, municiones y explosivos, evitando así el cometimiento de diferentes delitos contra la vida".
Presencia militar en el conflicto armado interno
La Cartera de Estado asegura que, tras el fin del estado de excepción, "las Fuerzas Armadas seguirán manteniendo el control y el orden en todo el territorio nacional".
Así lo estableció el presidente Daniel Noboa en un nuevo decreto ejecutivo, firmado el 7 de abril, en el que reconoce la persistencia del conflicto armado interno.
En ese decreto, el presidente dispone a las Fuerzas Armadas ejecutar operaciones militares para "prevenir y erradicar la actividad de grupos armados organizados en el territorio nacional".
Además, declara a las cárceles de zona de seguridad y seguirán bajo el control de policías y militares.
Ola de violencia
Pese al estado de excepción, en las últimas semanas ha existido un nuevo brote de violencia criminal.
Durante los últimos días de marzo se registraron masacres en cantones de Manabí y Santa Elena. También el asesinato de la alcaldesa de San Vicente.
Además, durante el estado de excepción, el delito de extorsión y los secuestros no frenaron. En Guayaquil, por ejemplo, se quintuplicaron.
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