Intentos de asalto y secuestros provocan nerviosismo entre usuarios de la Ruta Viva
La Ruta Viva es una de las vías con mayor flujo vehicular de Quito y está plagada de problemas. Se han reportado secuestros, accidentes y nuevas modalidades de robo.
Vehículos circulan en la Ruta Viva, el 12 de abril de 2023.
Jonathan Machado / Primicias
Autor:
Actualizada:
Compartir:
Los 13,6 kilómetros que tiene la Ruta Viva, una de las principales vías que conecta a Quito con el valle de Tumbaco y con el aeropuerto Mariscal Sucre, lleva meses convirtiéndose en una vía de alto riesgo para quienes la utilizan.
Las denuncias por accidentes, robos e intentos de secuestro se reportan a diario. No solo eso, sino que las víctimas relatan cada vez incidentes más violentos.
El comandante del Distrito Tumbaco, Marco Enríquez, asegura que la Policía no registra denuncias sobre robos y secuestros en la Ruta Viva. Pero reconoce que se ha enterado de varios casos a través de redes sociales.
De todas maneras, adelanta que al un patrullero y una moto, en las que seis policías patrullan la vía, pronto se sumarán otros 10 policías y cinco motos. "Con eso esperamos dar más seguridad y tranquilidad a los usuarios", dice.
Ataques con 'miguelitos'
Guillermo Herrera, quien vive en Cumbayá, estuvo a punto de ser una víctima de la nueva modalidad de robo a conductores que los delincuentes utilizan en esta vía.
La noche del 1 de julio de 2024 regresaba a su casa cuando escuchó un fuerte ruido en su auto.
Pasaron pocos segundos y sintió que su carro se inclinó hacia la derecha, pues dos llantas se desinflaron tras pisar unos 'miguelitos', una especie de clavos doblados que se usan para ponchar neumáticos.
Herrera aceleró a pesar de que su auto perdió agarre y potencia, pero logró llegar hasta el sector de Lumbisí, donde pidió auxilio a otros conductores que estaban en el sector.
La intención de los delincuentes es que, tras pisar los 'miguelitos', los conductores se detengan a revisar sus llantas y en ese descuido son asaltados.
Xavier Flores se salvó de lo mismo una madrugada entre semana. Cuando circulaba por el sector de Yanazarapata sintió que pisó clavos y que su carro se desestabilizó. Vio más adelante a dos policías que le hacían señas para detenerse, pero los ignoró y aceleró todo lo que pudo.
"Si eran policías de verdad y me perseguían, les hubiese pedido auxilio para que me acompañen a mi casa, pero me ignoraron", relata.
Para su suerte, ese día había inflado las llantas con nitrógeno y, sin saber, eso le dio tiempo para llegar hasta su casa, en el sector de La Primavera. Al llegar vio que tres de las cuatro llantas de su auto habían pisado 'miguelitos'.
Intento de secuestro grabado en video
En redes sociales se viralizó el testimonio de un intento de secuestro que sufrió un ciudadano el 22 de junio de 2024 cuando se trasladaba a Cumbayá desde Quito.
El incidente quedó grabado en una cámara de video que instaló en su auto. Allí se observa cuando un vehículo que transitaba por el carril derecho se le cruza en el camino y un sujeto se baja del puesto de copiloto con un arma de fuego.
Sin perder el control de la situación, la víctima aceleró y esquivó al vehículo agresor. Mientras escapaba, el delincuente le disparó, pero falló.
Un dirigente barrial de Cumbayá, que pidió la reserva de su nombre por seguridad, dijo que la Ruta Viva se ha convertido en un punto conflictivo debido a varias razones.
Una de ellas es el mayor flujo de tráfico vehicular. "Las rutas rápidas permites que los delincuentes puedan escapar sin mayores problemas y más aún cuando no hay presencia policial".
Agrega que "la falta de iluminación y la desolación, sobre todo en horas nocturnas, favorece la realización de asaltos sin ser detectados".
Cree que es posible combatir la delincuencia con un "trabajo conjunto entre entidades de gobierno y la comunidad".
Accidentes de tránsito
Quienes usan esa vía, o viven en las zonas aledañas exigen mayor presencia policial. Aseguran que la vía se ha vuelto intransitable, sobre todo en horas de la noche y madrugada. Además, de la inseguridad, otro problema son los accidentes de tránsito.
La Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) señala que entre el 1 de enero y el 10 de julio ocurrieron 32 siniestros que dejaron un fallecido y cuatro heridos.
Las autoridades de tránsito y de la Policía aseguran que trabajan conjuntamente para intensificar los operativos a lo largo de la Ruta Viva, por donde circulan cerca de 60.000 vehículos cada día. Esto la convierte en una de las vías de mayor carga vehicular de la ciudad.
Concesión de la Ruta Viva
La concesión de la Ruta Viva, prevista para finales de 2024 por el Municipio de Quito, tambalea.
Durante el proceso, con el que la Alcaldía buscó empresas interesadas en administrar la vía, solo tres presentaron ofertas. Un número inferior a las cinco o seis que esperaban las autoridades de movilidad.
El alcalde Pabel Muñoz dijo que aún analiza el futuro del proceso, pues aspira a tener mayor interés de empresas privadas. Mientras toma una decisión, la Secretaría de Movilidad dijo que realizará intervenciones en la vía para evitar un mayor deterioro.
Compartir: