Pabel Muñoz sigue imitando a Correa, ahora regaña en público a sus funcionarios

Para despejar dudas sobre la imagen que está construyendo para sí mismo Pabel Muñoz, el Alcalde de Quito no solo mantiene un espacio informativo semanal en el que hace de anfitrión, sino que tampoco vacila a la hora de regañar a sus subalternos en público.

Cuatro funcionarios del Municipio de Quito han sido cuestionados por Muñoz en estos enlaces semanales, sobre temas que suman reclamos entre los ciudadanos. Uno de ellos dejó el cargo tras el regaño.

El primero fue el exdirector de la Agencia Metropolitana de Tránsito, José Recalde, por las denuncias de corrupción en la entidad. Ante la falta de soluciones, Recalde fue despedido en febrero de 2024, apenas seis meses después de asumir el cargo.

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Pero con la salida de Recalde, los regaños de Muñoz subieron de tono. En el informe del 18 de marzo de 2024, el Alcalde apuntó contra el secretario de Movilidad, Álex Pérez; la secretaria de Seguridad, Carolina Andrade; y el director general del Cuerpo de Agentes de Control, Juan Carlos Guarderas.

A Pérez le recriminó la lentitud con la que avanza la reorganización de rutas y frecuencias del transporte público. Uno de los procesos más importantes que tiene la ciudad para mejorar la movilidad, pero que está paralizado desde 2019.

"Álex, a mi equipo le está faltando entereza, le está faltando rapidez sobre el tema de transporte. No puede ser que nos estén llevando como costales de papas", dijo.

Y continuó su informe con críticas más fuertes contra Andrade y Guarderas por un operativo de control en el que agentes metropolitanos golpearon a un joven afroecuatoriano.

"Carolina, coronel Guarderas, no estoy conforme con el primer informe que me han pasado. Y no estoy conforme con que no me lo hayan dicho el fin de semana", señaló.

Visiblemente molesto, Muñoz agregó que el documento "es bastante flojo, bastante mediocre". El Alcalde aseguró que la actitud de los agentes puede considerarse como "racismo institucional, que no lo vamos a permitir".

Estas palabras provocaron los aplausos de los asistentes. A Guarderas y Andrade no les quedó otra que aplaudir también los regaños que sufrían, según se pudo ver en las imágenes de la transmisión.

Pero es indudable que la imagen de Muñoz es distinta y, aunque intenta imitar el estilo de comunicación de su coideario, el expresidente Rafael Correa, el manejo de sus relaciones políticas es diametralmente opuesto. Muñoz, por ahora, no apela a la confrontación con otras autoridades.

Por ejemplo, la relación con el presidente Daniel Noboa, o con el presidente de la Asamblea, Henry Kronfle, ha sido cordial a pesar de pertenecer a tiendas políticas antagónicas. Los tres pasearon en el Metro de Quito días antes de su apertura. Incluso Muñoz y Noboa bailaron en una serenata quiteña en diciembre.

Muñoz en las redes sociales

Como el expresidente Rafael Correa, el alcalde de Quito, Pabel Muñoz, también es un usuario frecuente de las redes sociales.

Entre otras cosas, las utiliza para dar a conocer los avances de las obras que se ejecutan en la ciudad y responder los mensajes de sus simpatizantes. Aunque también han sido escenarios de confrontaciones con sus detractores.

Uno de ellos ocurrió el 4 de marzo de 2024 con un internauta que aseguró que debía ser destituido por haber hecho campaña a favor de la excandidata Luisa González.

El usuario Carlos Guarderas escribió: "Pero si hubiera justicia, debería ser destituido por usar su cargo para hacer proselitismo político". A lo que Muñoz respondió: "Vea, no sea malito. No me haga el pase gol. Con ese nombre de cuenta su tuit NO luce muy prudente".

Muñoz también reconoció que, durante sus primeros días de gestión, bloqueó a algunos usuarios que, según él, "no buscaban el bien de la ciudad".

'Sabatinas', pero en lunes

Desde el inicio de su gestión, Muñoz implementó un modelo de comunicación similar al que Correa utilizó durante sus 10 años de gobierno.

Una de sus primeras decisiones al llegar a la Alcaldía fue crear un espacio informativo semanal en el que resume las actividades que realiza durante la semana y anuncia las acciones que ejecutará esa semana. Lo llamó 'Frecuencia Quiteña'.

Aunque muchas veces esos anuncios no se concretan.

En las últimas semanas, estos informes también se han convertido en espacios en los que Muñoz critica el trabajo de sus colaboradores. Una práctica habitual que Correa mantuvo hasta los últimos días de su mandato en sus enlaces ciudadanos.

El 18 de marzo de 2017, durante su visita al cantón Salitre, el exmandatario regañó al entonces secretario de la Presidencia, Cristian Castillo, por los problemas que presentó el proyecto para la rehabilitación del hospital del cantón.

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"Compañeros del despacho, Cristian Castillo, secretario general de la Presidencia, es tu responsabilidad. Que hagan bien su trabajo o que me presenten su renuncia. Ya estoy cansado de esto (...) Uno trabaja el triple por el trabajo que no hacen otros", amonestó.

Pero ese es apenas un ejemplo. Durante los 10 años del régimen correísta, ministros, asambleístas, secretarios, viceministros, directores y otros funcionarios fueron reprendidos públicamente por el Presidente.

Muñoz apenas está comenzando con esta tradición.