Seis de cada 10 buses evitan la revisión técnica vehicular en Quito
El Municipio de Quito prepara una ordenanza para que los buses y los demás vehículos del transporte comercial realicen la revisión técnica en la ciudad de forma obligatoria.
Un bus emite esmog en Quito, el 20 de abril de 2023.
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Fallas en el sistema de frenos, problemas en la alineación y el mal estado de las llantas fueron las principales causas de los 3.364 accidentes de tránsito que ocurrieron en Quito, entre el 1 de enero y el 12 de diciembre de 2023.
El secretario de Movilidad de la capital, Álex Pérez, asegura que en esos siniestros estuvieron involucrados buses que no cumplieron con la revisión técnica vehicular en la capital.
"El 60% de buses no cumple con este trámite en Quito y prefiere hacerlo en otros cantones, lo que da paso a que ocurran más accidentes".
Álex Pérez
Esto ocurre, según la presidenta de la comisión de Movilidad, María Fernanda Racines, porque "en otros cantones la revisión vehicular se limita a una inspección visual sin parámetros técnicos adecuados".
Incluso, asegura que el Municipio de Quito ha identificado buses que cuentan con la aprobación del trámite, sin haber sido examinados por un centro autorizado.
Uno de estos casos ocurrió el 6 de julio de 2023. Ese día, un bus se accidentó en el sector de Miravalle 1, en el valle de Cumbayá, dejando nueve personas heridas. Las primeras investigaciones de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT) muestran que la causa del accidente fue la pérdida de frenos.
"Paradójicamente, mientras ese siniestro ocurría, el bus estaba pasando la revisión en un cantón distinto y muy lejano: Juján", dice Racines.
Por eso, la funcionaria considera que el Municipio debe implementar cambios a la ordenanza que regula la revisión vehicular.
Nueva ordenanza
El Concejo Metropolitano de Quito trabaja en una ordenanza para evitar que los buses y las otras 35.000 unidades que dan servicio de transporte comercial realicen la revisión vehicular en otro cantón.
Según el Municipio, este tipo de transporte está conformado por taxis, camionetas y buses institucionales, intercantonales e interparroquiales.
Racines dice que "el corazón de la ordenanza busca la obligatoriedad para que los buses y comercial cumpla con la revisión en Quito".
"Estas unidades recorren más kilómetros y, si no están en buen estado, pueden provocar más accidentes", afirma.
Y añade que la ordenanza también plantea que los buses que no aprueben la revisión vehicular en Quito no reciban el permiso de operación.
"La Ley de Tránsito y el Código Municipal facultan al Municipio a establecer parámetros para entregar ese permiso. Y creemos que uno de ellos debe ser el cumplimiento de la revisión en Quito", explica.
Mientras que el director de la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT), José Recalde, asegura que la revisión vehicular en Quito tiene la capacidad para identificar problemas técnicos que en otros cantones no es posible hacerlo por la falta de equipos especializados.
El secretario de Movilidad, Álex Pérez, no descarta que el Municipio planteé a la Agencia Nacional de Tránsito la obligatoriedad de que el transporte comercial sea sometido a dos revisiones vehiculares al año, como ocurría antes de 2021.
Las autoridades de movilidad de la ciudad esperan que la ordenanza sea aprobada durante las dos primeras semanas de enero de 2024.
"Hay equipos viejos"
El dirigente transportista, Jorge Yánez, asegura que los buses de transporte público están dispuestos a cumplir la revisión técnica vehicular en Quito.
Sin embargo, pone algunas condiciones. Por ejemplo, "que el Municipio renueve los equipos destinados a esta actividad, pues en los dos centros (Gumaní y Calderón) en los que se hace la revisión al transporte comercial hay equipos viejos que debieron ser sustituidos en 2017", dice.
Además, pide que exista un listado de los parámetros que los técnicos deben inspeccionar para evitar la discrecionalidad.
Pese a estar de acuerdo con la iniciativa municipal, el dirigente cree que su implementación no es fácil porque "en la ciudad no son 35.000 unidades de transporte comercial, son más de 45.000 y los dos centros de revisión no tienen la capacidad para satisfacer la demanda".
Es por eso que plantea que el Municipio llegue a acuerdos con los otros cantones de Pichincha para que un delegado de la AMT vigile el proceso de revisión vehicular de las unidades que decidan realizar el trámite en esos lugares.
"Esto quisimos plantear a la comisión de movilidad, pero nunca nos recibieron", se queja.
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