Zoldan Corporeishon pagó USD 950.000 por 'comisiones fantasmas' en 2018
Imagen del allanamiento a las instalaciones de la empresa Zoldan Corporeishon, el 18 de junio de 2020.
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Zoldan Corporeishon Cia. Ltda. estuvo activa durante 18 años. Pese a que se creó para venta de dispositivos electrónicos, su principal actividad económica fue la venta de insumos médicos a nivel público y privado.
Ahora, la empresa es investigada dentro de la trama de corrupción que se presume existe los hospitales públicos. La ministra de Gobierno, María Paula Romo, la catalogó como "pieza clave" en la red.
PRIMICIAS reveló, en la edición del jueves 18 de junio, que esta compañía obtuvo 150 contratos con el Estado directamente y 70 más a través de otra empresa, que tiene los mismos accionistas, en todos sus años de existencia.
Zoldan Corp. acumuló, al menos, USD 42 millones de ingresos por sus contratos con el Estado.
Sin embargo, ahora, está en proceso de liquidación por disposición de la Superintendencia de Compañías.
La razón de esa liquidación está en el numeral 6 del artículo 361 de la Ley de Compañías: "(...) por pérdida del total de las reservas y de la mitad o más del capital".
Su dueña y última gerente, Mónica Zoldan, da pistas del mal estado económico de la empresa. En sus informes de 2017 y 2018, ella asegura que la empresa no tenía un sistema contable por lo que les fue difícil tomar decisiones oportunas.
En 2018, último ejercicio económico de la empresa, Zoldan Corp. contrató una auditoría externa realizada por la firma Insightaud Audit Support.
La auditora encontró varias fallas en el manejo de la empresa. Pero, el que más llama la atención es el pago de comisiones por cerca de un millón, sin que haya comprobantes de a quién o por qué se canceló ese valor.
Estos son los principales hallazgos de la auditoría externa:
- No se pudo evidenciar un buen manejo de reportes del efectivo y equivalentes como conciliaciones bancarias y arqueos de caja.
- La empresa no presentó un control de inventarios y existencias: cuando empezó la auditoría ya había vendido todo lo que tenía.
- Los saldos presentados ante el Servicio de Rentas Internas (SRI) difieren de los presentados en la contabilidad.
- Entre los gastos de la compañía existen rubros que ascienden a USD 950.000 por comisiones sin comprobante de ventas.
Deudas con empresas relacionadas
Además, tanto en la auditoría externa como en los últimos informes de gerencia (2017 y 2018) se menciona que parte de la mala condición económica de la empresa se debe a las cuentas por cobrar que, hasta finales de 2018, llegaban a USD 4,3 millones.
La mayor deuda por cobrar es a Sorin-Horea Chirculescu por USD 1,1 millones. Él es rumano, al igual que Laura Ulici, otra de las accionistas de Zoldan Corporeishon.
Chirculescu también es una asiduo proveedor del Estado en temas hospitalarios. Según el Servicio de Compras Públicas (Sercop), tiene 22 contratos con hospitales públicos.
Pero, la relación empresarial va un poco más allá. Chirculescu se presenta en sus redes sociales como gerente de ACU Medical -que no consta en la Superintendencia de Compañías- y como director de Logística en Z&U Med.
Z&U Med. comparte accionistas y directivos con Zoldar Corp.: Mónica Zoldan y Laura Ulici.
El segundo deudor es Javier Roberto Andrade Lara con una cuenta pendiente con Zoldan Corp. por USD 872.280,48. Él, al igual que Zoldan y Chirculescu, era uno de los proveedores favoritos del sistema de salud: acumula 95 contratos con hospitales públicos.
Un cobrador al que no le pagan
En el entramado de empresas que rodean a Zoldan Corporeishon está Compañía de Servicios Auxiliares de Gestión De Cobranza Recycob S.A.
Esta empresa, creada en 2015, se dedica a las operaciones de las compañías auxiliares del sistema financiero, específicamente en el área de cobranzas.
Uno de los 652 accionistas que tiene esta sociedad anónima es José Zoldan Fogel, también accionista de Zoldan Corporeishon y exgerente general de la misma.
Además de Zoldan, entre los accionistas de Recycob están el Banco Cafetero de Panamá, que figura como el mayoritario. Este Banco, es una filial del Banco Cafetero de Colombia, que fue liquidado en 2005.
Según un reporte de la Revista Semana de Colombia, en 1983 el narcotraficante Gilberto Rodríguez Orejuela utilizó el Banco Cafetero de Panamá para lavar USD 46 millones.
Actualmente el Banco Cafetero de Panamá no aparece en el listado de bancos activos de Panamá, tampoco tiene un sitio web.
Observación de la Contraloría
Entre las decenas de contratos que firmó Zoldan Corporeishon con el Estado, en 2016 la Contraloría observó el segundo de más alto valor.
La observación forma parte del examen especial a los procesos precontractual, contractual y de ejecución de contratos para la adquisición de bienes y servicios; y, su utilización en la planta central del Ministerio de Salud Pública (MSP), entre 2011 y 2015.
Uno de los resultados del examen es sobre el proceso inadecuado para la adquisición de 54 equipos biomédicos para el sistema de imagen de Rayos X digital para 20 centros de salud tipo B y 34 centros de salud Tipo C.
Ese proceso de contratación empezó el 7 de marzo de 2013, durante el Gobierno de Rafael Correa y siendo la ministra de Salud, Carina Vance.
Marco Sotomayor, gerente del Proyecto de Fortalecimiento de la Red de Servicios de Salud, solicitó dar inicio al proceso de adquisición.
Sin embargo, en los términos de referencia (TDR) no se incluyeron los estudios que sustenten la adquisición de los equipos y la distribución en los diferentes dispensarios.
16 empresas presentaron sus ofertas: 14 fueron descalificadas por el incumplimiento de varios requisitos. Zoldan Corp. también incumplió uno: presentar los manuales de los equipos en español.
Pero, la comisión técnica decidió que ese error podría ser convalidado y la empresa presentó, de manera posterior, la traducción del manual en copias simples.
De esta manera, el 13 de junio de 2013, Vance adjudicó el contrato a Zolan Corporeishon por USD 9.490.000.
Tres días después de la adjudicación, el MSP entregó a Zoldan USD 6,6 millones en calidad de anticipo. En el contrato se fijó como plazo el 16 de octubre de 2013 para que se pagué la diferencia del dinero, previo la presentación de un informe que detalle la entrega e instalación de los 54 equipos.
Sin embargo, llegó esa fecha y la mayoría de equipos no habían sido entregados o instalados. Las obras físicas de los espacios donde funcionarían no habían sido completadas.
Por esta razón, se firmó un contrato modificatorio para ampliar el plazo de entrega e instalación a un año. Mientras tanto, los equipos fueron entregados en una bodega del MSP sin ninguna prueba de funcionamiento.
El 31 de diciembre de 2015, se deposita a la empresa otros USD 2,3 millones. Para ese momento, aún faltaban de instalarse 13 equipos y tres de estos no funcionaban. Lo cual tuvo que ser asumido por el Ministerio porque, cuando se entregaron, no se constató su estado.
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