El último intento de diálogo queda en manos del ministro de Finanzas
El Gobierno del presidente Lenín Moreno intentará que el nuevo titular del Ministerio de Finanzas, Mauricio Pozo, sea el vocero de consenso para las reformas estructurales.
El presidente Lenín Moreno y el ministro de Finanzas, Mauricio Pozo, se reunieron con los proveedores del Estado para el pago de los atrasos, el 13 de octubre de 2020.
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Desde su llegada al poder, el presidente Lenín Moreno repite constantemente que su gobierno es de diálogo. Pero en los temas estructurales el discurso e intenciones no han tenido acogida.
A siete meses de dejar el cargo, el Mandatario puso un nuevo rostro a cargo del diálogo nacional: Mauricio Pozo, el nuevo ministro de Finanzas. En este último tramo de gestión, el Ejecutivo espera aplanar el camino precisamente para esas reformas estructurales.
Son cinco temas los que impulsará el Ministro con la agenda económica. Pozo pretende que los dos primeros sean aprobados en este mismo periodo:
- Una ley anticorrupción.
- Reformas al Código Monetario y Financiero, sobre el Banco Central.
Y los otros tres proyectos legales serán para entregar al próximo Gobierno, "tras una amplia discusión", para que quien gane las elecciones de febrero pueda perfeccionarlos y utilizarlos como base:
- Reformas laborales.
- Reformas tributarias.
- Reformas a la seguridad social.
Es así que el mismo Pozo ha aceptado la tarea de promover los cambios estructurales que el Ejecutivo no ha podido tramitar en 41 meses.
Además, lo intentará en medio del proceso electoral, un Legislativo mermado por los escándalos de corrupción y un creciente descontento social. Sin contar la pandemia de Covid-19 y la consecuente crisis económica.
Y en un escenario legislativo donde Moreno no ha tenido éxito en sus iniciativas, donde incluso le han negado reformas económicas urgentes y varios otros proyectos están olvidados.
Los predecesores en el diálogo
El 20 de junio de 2017 el presidente Moreno emitió un decreto para que el diálogo nacional, "con todos los sectores de la sociedad", sea una política de Estado. La idea era mejorar la gobernanza y gobernabilidad.
Más de tres años después los resultados son cuestionables. La coordinación de esta política estaba en manos de la extinta Secretaría de Gestión de la Política, que ahora es parte del Ministerio de Gobierno.
La primera etapa la encabezó el mismo Presidente, con todas las reuniones que tuvo en sus primeros meses de gobierno. La segunda fase la inauguró la entonces vicepresidenta María Alejandra Vicuña, el 6 de septiembre de 2018.
Finalmente, el Ejecutivo quiso acelerar las cosas con su tercer vicepresidente Otto Sonnenholzner, a quien encargó el diálogo nacional el 21 de diciembre de 2018.
En mayo de 2019 fue el lanzamiento del Acuerdo Nacional, pero las mesas temáticas de democracia y seguridad social tuvieron problemas y falta, precisamente, de acuerdos.
El último tema es uno de los que ahora quiere poner sobre la mesa nuevamente el ministro Pozo, en un intento por buscar consenso en los temas más sensibles.
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