"Una decisión irreflexiva de Ecuador" originó una tensión diplomática con Rusia
El Gobierno ruso ha advertido que la decisión del presidente Daniel Noboa, de transferir equipamiento militar ruso, considerado 'chatarra', podría tener un elevado costo para la relación bilateral.
Reunión entre la canciller, Gabriela Sommerfeld, y el embajador de Rusia, Vladimir Sprinchan, el 5 de febrero de 2024.
@RusEmb_Ecuador
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Rusia dio un golpe sobre la mesa. Justo cuando Ecuador anunciaba una transferencia de 'chatarra' a Estados Unidos, el Kremlin respondió con una sanción comercial: la suspensión de las importaciones de 25% del banano ecuatoriano.
Aunque el Kremlin no ha asociado la medida comercial con la transacción anunciada entre Quito y Washington, esta aterrizó en el tablero geopolítico después de que el gobierno de Vladímir Putin calificara la decisión de Ecuador como precipitada.
Es así como la breve declaración (16 segundos) del presidente Noboa, del 21 de diciembre de 2023, sobre un intercambio de 'chatarra' por nuevo armamento estadounidense, fue la antesala para la tensión diplomática con Moscú.
Sin embargo, ninguno de los dos gobiernos ha tomado estos roces e intercambios de comentarios y advertencias como un impasse. Los embajadores en Quito y Moscú se mantienen en sus sedes diplomáticas.
La disputa por la exportación de banano se mantiene como un asunto técnico, en medio de un evidente pulso político que mantiene a Ecuador en medio de dos gigantes: Rusia y Estados Unidos.
Una declaración "irreflexiva"
Las palabras del presidente Noboa han hecho que el Kremlin ponga mucha atención a los movimientos de Ecuador y su relación bilateral con Estados Unidos, que ha incrementado desde 2018 y parecería haber alcanzado su clímax con este nuevo Gobierno.
Pero el Ejecutivo ecuatoriano parece no darle importancia, ya que el presidente Noboa se mantiene firme y sostiene que "se va a proceder de todas maneras" con la transferencia de 'chatarra rusa y ucraniana' a Washington.
La canciller, Gabriela Sommerfeld, lo respaldó a afirmar que no es ilegal: "este equipamiento no estaba operativo y el Ecuador lo puede dar de baja, lo puede vender, lo puede regalar o lo puede intercambiar".
Por eso, desde Rusia, la Cancillería y el Servicio Federal para la Cooperación Técnico-Militar han advertido que la polémica transacción podría tener un elevado costo para la relación bilateral.
El embajador ruso Vladímir Sprinchan dijo que se trataría de "un paso poco amistoso" y que violaría "la postura de neutralidad" de Noboa frente al conflicto con Ucrania. La canciller María Zajárova agregó que se trataría de una decisión "irreflexiva", bajo presiones externas.
Y el Servicio Federal anticipó que "si el equipo militar de fabricación rusa se transfiere a un tercero, Ecuador violará sus obligaciones internacionales". Recordó que para ello se requiere, el consentimiento previo y por escrito de Rusia.
Pero la acusación de Moscú, de una falta de reflexión en la toma de decisiones del Gobierno ecuatoriano, ha sido respondida con ligereza, por parte del Ejecutivo.
El presidente Noboa lo minimizó al insistir en que se trata de 'chatarra' comprobada, aunque Moscú "alegue" que se trata de material bélico. Y advirtió que el derecho internacional le permite desecharla como tal.
E incluso, el Mandatario contestó que la postura de Rusia "no es la adecuada", porque Ecuador también se encuentra en guerra y que "si buenamente quieren ayudar, ojalá lo hagan".
De todas formas, el remezón comercial que implica la suspensión de las exportaciones de banano, los débiles argumentos técnicos de la autoridad fitosanitaria rusa (y la posibilidad de una sanción adicional a los claveles ecuatorianos) obligaron al gobierno de Noboa a dejar de lado las declaraciones y hacer un acercamiento oficial.
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