De las risas a los reclamos: la polémica actuación del conjuez León
Iván León pide a los camarógrafos de los medios de comunicación que abandonen la sala antes del inicio del sexto día de juicio.
API
Autor:
Actualizada:
Compartir:
El estilo amistoso y relajado que pretende usar el conjuez Iván León para mantener el orden en el juicio del caso Sobornos 2012-2016, provoca malestar en los procesados.
Lejos de la solemnidad y frialdad que caracteriza a los jueces nacionales, Iván León, quien está a cargo del juicio del caso Sobornos 2012-2016, intentó imponer un estilo relajado, con bromas e informalidad, en los primeros seis días de la diligencia.
"Tomen asientito", dice León cada vez que ingresa a la sala. "Vayan a estirar las piernas y a satisfacer sus necesidades", menciona cuando dispone un receso.
Incluso, cuando ha habido enfrentamientos entre las partes, lo ha tomado con buen humor. "¿Ya está descansadita señora Fiscal?”, le preguntó a la fiscal Diana Salazar en la reinstalación del segundo día de juicio luego de una primera jornada que estuvo repleta de tensión.
Inicialmente ese estilo distendido ayudaba, efectivamente a reducir las tensiones, pero conforme avanza el juicio, las risas iniciales se fueron convirtiendo en reclamos.
León ostenta la calidad de conjuez temporal y asumió una de las más altas magistraturas de la justicia ecuatoriana a finales de 2019. Es uno de los reemplazantes momentáneos de los jueces destituidos por la evaluación impulsada por el Consejo de la Judicatura.
A pesar de esa condición temporal, León tomó todas las facultades, los derechos y las obligaciones de un juez nacional regular.
Una de esta es participar en los sorteos para conformar los tribunales de juzgamiento de los casos que llegan a la Corte Nacional.
León no solo que fue designado para los tres casos más importantes en temas de corrupción: Sobornos, Singue y Sabatinas; sino que también fue sorteado como presidente de los Tribunales.
Como juez ponente o presidente del Tribunal, León está a cargo de dar paso o no a las objeciones de las partes procesales que actúan en el juicio, de determinar las horas de inicio y finalización de las audiencias. En definitiva, dirige el juicio.
En los primeros días de la audiencia, su forma de dirigir la audiencia fue tomada de buena forma por los abogados de los 21 procesados, la Fiscalía y la Procuraduría. Varias veces sus frases fueron objeto de risas que rompieron con el silencio y la seriedad de un juicio.
Los abogados de los acusados, entre los que consta el expresidente Rafael Correa y otros altos funcionarios de su Gobierno, han manifestado insistentemente sus reparos con el trabajo del conjuez León.
Sus compañeros de Tribunal se han opuesto a algunas de sus acciones.
A continuación, le presentamos los cuatro momentos más tensos de León en el juicio, hasta el sexto día de audiencia:
- 1
Duración de las jornadas
Compartir:
El 10 de febrero, cuando el juicio se instaló, la audiencia duró 15 horas, incluyendo los tres recesos que el conjuez Iván León dispuso para que los presentes pudieran alimentarse.
Esa fue la primera inconformidad con el magistrado. Alembert Vera, abogado de Walter Solís, recordó al juez que la ley prohíbe alargar las audiencias más allá de las 17:30 si no hay un sustento para hacerlo.
León respondió que esa norma no aplica para los casos penales. De ahí en adelante, las audiencias se han alargado hasta altas horas de la noche.
- 2
Testimonios anticipados
Compartir:
Otro momento tenso fue cuando, en la noche del primer día, León dio paso a la reproducción de las grabaciones de los testimonios anticipados.
Se trato de los relatos de Pamela Martínez, exasesora de Rafael Correa; Laura Terán, exasistente de Martínez; y José Conceição Santos, expresentante de Odebrecht en Ecuador.
El problema fue en el último testimonio. Marcelo Dueñas, abogado de la asambleísta Viviana Bonilla y del exlegislador Christian Viteri, exigió que se reproduzca la parte del juramento del empresario brasileño.
Cuando esa parte sonó, Dueñas sugirió que el audio fue alterado. León se enojó visiblemente y amenazó con sanciones a Dueñas ante los reclamos del resto de abogados defensores.
- 3
Sanción a abogada de Glas
Compartir:
El punto más alto de las quejas por el trabajo del juez llegó el quinto día de audiencia, el martes 18 de febrero. La tensión obligó la intervención de la Policía Nacional.
Iván León solicitó a la fuerza pública que sacara de la sala al próximo abogado que interrumpiera el juicio.
En medio de objeciones de lado y lado, por el testimonio de un exasesor de Alexis Mera, exsecretario jurídico de la Presidencia, León ordenó una multa de USD 200 para Cornelia Salcedo, abogada del exvicepresidente Jorge Glas.
Pero multa quedó sin efecto al poco tiempo. La decisión del juez no fue respaldada por sus compañeros, los jueces Iván Saquicela y Marco Rodríguez.
- 4
¿Fraude procesal?
Compartir:
Un nuevo encontrón entre el conjuez León y la defensa del exvicepresidente Jorge Glas ocurrió la tarde del miércoles 19 de febrero, en el sexto día de audiencia.
Harrison Salcedo estaba contrainterrogando a la perito Alexandra Mantilla, encargada de la perfilación criminal. La mayoría de preguntas fueron objetadas por la Fiscalía y la Procuraduría y León aceptó esas objeciones.
Sobre el final de contraiterrogatorio, Salcedo alzó la voz y dijo, dirigiéndose a León, "usted es cómplice de fraude procesal", acusándolo de no dejarlo ejercer su derecho a la defensa.
Los jueces Iván Saquicela y Marco Rodríguez tuvieron que tomar el control de la audiencia para que los ánimos se calmaran.
Sí hubo una estructura criminal, dice perito
El sexto día del juicio tuvo actividad únicamente en la tarde, ya que en la mañana se realizó la rendición de cuentas de la presidenta de la Corte Nacional, Paulina Aguirre.
A las 14:30 del miércoles 19 de febrero de 2020 se reinstaló la audiencia. La fiscal Diana Salazar llamó a su trigésimo primer testigo. Se trató de Alexandra Mantilla, una perito que se encargó de la perfilación criminal del caso.
En su informe, la criminóloga concluyó que alrededor del gobierno de Rafael Correa sí existió una estructura criminal dedicada al cobro de sobornos a cambio de contratos con el Estado, como indica la teoría del caso de la Fiscalía.
El exlegislador Christian Viteri, uno de los procesados, considera que el trabajo realizado por Mantilla es bueno y desarrolla muy bien la supuesta estructura. Pero no entiende porque se lo vincula a él si solo fue un mensajero que recibió dinero para la campaña de Viviana Bonilla.
Compartir: