Tensión en la Corte entre la Fiscal y Pablo Celi por caso Las Torres
En la jornada 38 del juicio del caso Las Torres, Pablo Celi rindió su testimonio y con sus acusaciones desató una polémica con la Fiscal, Diana Salazar.
La fiscal Diana Salazar y el excontralor Pablo Celi durante la jornada 38 de la audiencia de juicio del caso Las Torres, el 22 de noviembre de 2022.
Twitter / @FiscaliaEcuador.
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Continúa bajo fuerte tensión el juicio de 11 personas involucradas en una supuesta trama de sobornos, en el llamado caso Las Torres, que involucra a pesos pesados, como la Contraloría, la petrolera estatal Petroecuador y la Secretaría de la Presidencia de Lenín Moreno.
El excontralor Pablo Celi, acusado en el caso Las Torres, terminó la presentación de sus pruebas el 22 de noviembre de 2022, lo que incluyó su propio testimonio sobre los hechos.
La audiencia continuará con la presentación de pruebas por parte de Pablo Flores, ex gerente de Petroecuador y también juzgado en el caso Las Torres.
Celi se desata contra la Fiscal
Cuando Celi habló, lo hizo para acusar a la Fiscal Diana Salazar de haber tejido una confabulación en su contra, y se desató un tenso debate durante el interrogatorio que la Fiscal encabezó.
Según la Fiscalía, Celi comandó una estructura de delincuencia organizada que gestionaba y cobraba sobornos a una empresa a cambio del desvanecimiento de glosas de la Contraloría.
Esta empresa es Nolimit, que era proveedora de equipos de refinación de Petroecuador, y que necesitaba subsanar las glosas para poder cobrar las facturas que le debía la petrolera y evitar multas.
Tres horas se tomó Celi para intentar rebatir la tesis de Fiscalía. El exfuncionario, hoy en arresto domiciliario, se dedicó a criticar el trabajo de la Fiscalía.
Incluso, acusó directamente a la Fiscal Diana Salazar de cometer al menos seis delitos:
- Calumnias.
- Uso doloso de su nombre (de Celi, ndr).
- Detención ilegal.
- Uso ilegal de recursos públicos.
- Fraude procesal.
- Falso testimonio.
'Soy una víctima'
Celi se autocalificó como una "víctima de una confabulación penal fraudulenta con fines políticos".
A su parecer, a la cabeza de esa confabulación en el caso Las Torres estuvo la Fiscal Diana Salazar.
El excontralor quejó, por ejemplo, de que pese a que la investigación de Las Torres se inició en 2019, él se enteró recién el 13 de abril de 2021, cuando fue detenido, de madrugada, en su domicilio en Quito.
Según Celi, hubo cálculo político, ya que su detención ocurrió dos días después de las elecciones presidenciales en las que Guillermo Lasso llegó a la Presidencia.
Celi alega que se buscaba su "proscripción como autoridad de control y echar abajo mis decisiones".
Incluso increpó a Salazar por lo que llamó "falta de lealtad institucional". Dijo que el 12 de abril de 2021, conversó con la Fiscal sobre los resultados electorales y no entiende por qué no le notificó en ese momento que había una investigación en su contra y que iba a ser arrestado.
Mientras Celi relataba su visión de los hechos, la Fiscal Salazar conversaba con su equipo de trabajo, tomaba apuntes, revisaba documentos. Incluso, en algunos momentos sonreía.
Pero Celi continuó con su arremetida. Dijo que el Ministerio Público utilizó una investigación desarrollada por lavado de activos en Estados Unidos, contra Raúl de la Torre y Roberto Barrera, para perseguirlo a él.
Añadió que en ese caso no se lo menciona y que las personas involucradas como Raúl De la Torre, Barrera y los accionistas y directivos de Nolimit no han sido incluidos en el caso ecuatoriano, ya que sus testimonios han sido funcionales a la tesis de la Fiscalía.
También atacó a Luis Miño, funcionario de carrera de la Contraloría, a quien Celi le encargó el despacho de Contralor cuando se firmaron los desvanecimientos de glosas de Nolimit.
En su versión, Miño aseguró que firmó el desvanecimiento de esas glosas por orden verbal del propio Celi.
El excontralor negó la aseveración. Y se refirió a Miño, durante el resto de la audiencia, como Tartufo, en referencia a la obra de Molière, que habla de un falso devoto de la iglesia, que traiciona a los otros personajes.
Cambio de estrategia
Según las normas que regulan las audiencias en materia penal, Pablo Celi, al ser procesado y acusado en el caso, hizo uso de su testimonio como medio de defensa.
Tenía la posibilidad de no responder el contrainterrogatorio de las otras partes, para evitar autoincriminarse.
Sin embargo, al inicio de la audiencia, Celi dijo que aceptaría todas las preguntas sin importar si eran "capciosas, argumentativas, especulativas o mal formuladas".
Después de las tres horas de su intervención, llegó el momento de las preguntas. Nuevamente, Walter Macías, juez ponente del Tribunal de Juicio, advirtió a Celi que estaba en su derecho de no responder. Un tranquilo Celi dijo que lo haría.
Esto a pesar de que ninguno de los equipos de defensa de los demás procesados pidió la palabra.
La Fiscalía, a través de Diana Salazar, tomó la palabra: empezó con una serie de preguntas sobre el caso Las Torres.
"Usted ejerció como Contralor General del Estado sin concurso de merecimientos. ¿Sí o no?" Celi respondió que lo hizo, cumpliendo la ley, asumiendo una subrogación.
La Fiscal siguió adelante sobre si Celi encargó el puesto a Luis Miño, si conocía sobre las glosas desvanecidas a favor de Nolimit, si conocía que en su despacho se encontraron documentos relacionados con esta empresa.
Celi daba respuestas largas y elaboradas. Pero Salazar le pidió que respondiera con un sí o un no.
Entonces, Marcelo Ron, abogado de Celi, intervino y señaló que, si bien las preguntas de Salazar eran cerradas, estaban antecedidas de una argumentación, por lo que su cliente también estaba en su derecho de responder ampliamente.
En ese momento, intervinieron los jueces. El magistrado Macías le dijo a Ron que estaba en su derecho de objetar las preguntas de Salazar. Pero el abogado reveló que el excontralor le pidió no intervenir.
Sin embargo, conforme las preguntas se hicieron más incisivas, Ron tuvo que intervenir y objetar de manera reiterada varias preguntas por considerarlas auto incriminatorias respecto al caso Las Torres.
Nuevamente, Macías les recomendó a Celi y a su abogado que reconsideraran su estrategia. Ron se acercó a la silla de su defendido y conversaron durante unos 45 segundos. Así acogieron la recomendación y Ron objetó casi todas las preguntas siguientes.
Los chats incómodos
En el transcurso del interrogatorio, Salazar le pidió a Celi pronunciarse sobre los chats encontrados en su teléfono.
Específicamente fueron dos los que incomodaron al excontralor, quien dijo que no contestaría más preguntas sobre chats.
El primero fue la conversación entre Celi y la exdirectora de Auditoría Interna Gubernamental de la Contraloría. La exfuncionaria estuvo en la entidad hasta noviembre de 2020.
Un mes después de su salida, el día de Navidad, la exfuncionaria expresó su gratitud a Celi a través de un mensaje de chat. Y se despidió asegurando que no entendía las razones de su desvinculación.
"Jamás me atrevería a decir nada, absolutamente nada de usted, de todo lo que tuve que desvanecer cuando me lo solicitó y aún en el caso de Claro que sé que está en la Fiscalía".
El segundo chat incómodo fue entre Pablo Celi y su hermano Esteban, también procesado en el caso y quien estuvo presente en la audiencia.
El martes 9 de noviembre de 2021, Pablo Celi envió a Esteban Celi un memorando sobre una orden de trabajo modificada. Y le pidió a su hermano que se lo reenviará a una concejala.
Celi no respondió las preguntas sobre esos y otros chats. Aseguró que no tienen nada que ver con el caso Las Torres, pero no se pronunció sobre el contenido de los mismos.
Zanjó el tema con un señalamiento a la Fiscal: "Si se iban a usar los chats de mi teléfono, la Fiscal debió desmaterializar también los chats que ella mantenía conmigo. Donde sí existen pedidos específicos".
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