Mendoza acepta que coordinó con Azuero retiro del dinero para hospital
El exlegislador Daniel Mendoza amplió su versión en el caso Hospital de Pedernales. El manabita responsabilizó al asambleísta Eliseo Azuero de la corrupción.
Eliseo Azuero y Daniel Mendoza, durante la sesión de la Comisión de Fiscalización de la Asamblea del 2 de diciembre de 2019, en la que recibieron a la ministra María Paula Romo.
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Aunque intentó deslindarse de responsabilidades, Mendoza -en la ampliación de su versión- dio detalles de cómo operaba la red de corrupción.
Según la Fiscalía, esta estructura -supuestamente comandada por Mendoza y Azuero- desvió los fondos públicos destinados a la construcción del Hospital de Pedernales.
"El mismo Eliseo Azuero me comentó que había sido adjudicada por segunda ocasión la obra del Hospital de Pedernales, ante lo cual le solicité que, de ser posible, pudiéramos coordinar lo relacionado con la mano de obra local que sería necesaria", dijo Mendoza el 2 de septiembre, ante la Fiscalía.
Pero, la actuación de Mendoza y Azuero, con relación a esa casa de salud, fue más allá de la coordinación de la mano de obra.
En otra parte de la versión, el exasambleísta manabita contó que Azuero le solicitó que hiciera efectivo unos cheques. Mendoza delegó esta acción a Jean Carlos Benavides, su exasesor quien también está involucrado en el caso por delincuencia organizada.
Según Daniel Mendoza, en un primer momento, no tuvieron problemas para efectivizar varios cheques. Pero -posteriormente, debido a la pandemia y las restricciones de movilidad- la tarea se complicó.
"Momento en el que empecé a recibir llamadas insistentes de Eliseo Azuero indicándome que debía cumplir con sus compañeros de bancada. Ante la presión, solicité a mi asesor que se apersone de dicha logística", aseguró Mendoza.
Según Mendoza, Azuero y Jorge Jalil, exdirector del Servicio de Contratación de Obras (Secob) y también vinculado al caso, designaron a Franklin Calderón para que coordinara el cobro de los cheques.
Pero, el exlegislador aseguró que no tiene ninguna relación con Calderón y que solo lo conoce por su actividad profesional en la construcción.
Sin embargo, la Fiscalía posee más información que contradice esa aseveración. En el teléfono de Calderón se encontraron chats, en los que llama "jefe" a Mendoza.
Azuero, quien se encuentra prófugo, también fue convocado a ampliar su versión de manera telemática. Pero, no lo hizo.
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