Chile decidirá entre la ultraderecha y la extrema izquierda
El ultraderechista José Antonio Kast se disputará la Presidencia de Chile, en el balotaje del 19 de diciembre, con el diputado de izquierda Gabriel Boric.
El candidato por el Frente Amplio, Gabriel Boric, se disputarán la Presidencia de Chile en el balotaje del próximo 19 de diciembre.
EFE
Autor:
Actualizada:
Compartir:
El ocaso de los partidos tradicionales y la irrupción de la extrema derecha definirán en los libros de historia la primera vuelta de las elecciones presidenciales celebradas el domingo en Chile, donde la gran sorpresa fue el aterrizaje de un candidato "fantasma", que ni siquiera pisó el país para hacer campaña.
El ultraderechista José Antonio Kast, quien logró el 27,9% de los votos con más del 98% de las mesas escrutadas, se disputará La Moneda en el balotaje del 19 de diciembre con el diputado de izquierda Gabriel Boric, que aglutinó el 25,7%.
Las encuestas llevaban semanas anticipando el ascenso de Kast, pero casi ninguna le colocaba por encima de Boric, un exlíder estudiantil ecologista y feminista, que busca implantar un Estado del bienestar parecido al de Europa.
Ambos integran formaciones de reciente creación y es la primera vez desde el retorno a la democracia que los partidos tradicionales de centroizquierda y centroderecha se quedan fuera de la contienda.
Libertario en lo económico y ultraconservador en lo social, con duras posturas contra el aborto o el matrimonio igualitario, Kast no quiere que le pongan la etiqueta de extrema derecha, pero es complaciente con la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990) y seguidor del estadounidense Donald Trump y el brasileño Jair Bolsonaro.
"Chile merece paz y libertad", dijo ante cientos de simpatizantes tras conocer los resultados y dar las "gracias a Dios".
La promesa de aplicar mano dura contra la creciente violencia o construir una franja para frenar la migración ilegal en el norte explican parte del abogado ultracatólico, que arrancó la campaña sin apenas apoyo pero fue absorbiendo al oficialista Sebastián Sichel.
"Hoy hemos recibido un mandato y una responsabilidad que es tremenda, liderar un disputa por la democracia, por la inclusión, por la justicia y por el respeto a la dignidad de todos", indicó por su parte Boric desde la sede de su comando en Santiago.
Para Claudia Heiss, de la Universidad de Chile, "el auge de la extrema derecha tiene que ver con el miedo y el cansancio de las movilizaciones" y "es un efecto rebote de la ampliación de libertades civiles".
Las elecciones han mostrado también las dos almas que conviven en Chile: el futuro presidente encabezará el Gobierno más izquierdista desde Salvador Allende (1970-1973) o el más derechista desde Augusto Pinochet (1973-1990).
"En Chile hay una polarización asimétrica, como ocurrió en Estados Unidos. La sociedad se polariza porque uno de los polos se vuelve más extremo, en este caso Kast", explicó a Efe Julieta Suárez-Cao, de la Universidad Católica.
Compartir: