Perros rescatistas con capacidades sobrehumanas
Los canes tienen una capacidad olfativa única. Esa ventaja les transforma en los compañeros ideales del Benemérito Cuerpo de Bomberos de Guayaquil, BCBG. ¡Conoce aquí más de estos seres extraordinarios! ?
Simulacro para acreditación 2022
Cortesía BCBG
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Los perros son considerados los mejores amigos del hombre y no hay duda. Brindan desde su cariño hasta sus capacidades exclusivas para convertirse en verdaderos héroes en situaciones de peligro extremo por un desastre natural u otra emergencia.
¿Por qué los perros trabajadores pueden ponerse en primera línea de una catástrofe? Por su gran sentido del olfato. Los canes, dependiendo de su raza, tienen de 200 a 300 millones de receptores olfativos mientras que los humanos solo 5 millones. Ellos cuentan con regiones olfativas en sus cerebros dedicas al procesamiento de olores. Por tanto, su inteligencia superior se debe a una combinación de factores anatómicos y fisiológicos.
"Por su capacidad innata y un adiestramiento acertado, los perros demuestran inigualable dedicación y habilidad para enfrentar desafíos difíciles. Su presencia sella el equipo ideal para la búsqueda y rescate de personas en estructuras colapsadas".
Mayor Ricardo Jairala, jefe operativo del Grupo Especializado Canino - BCBG
Para aprovechar este talento y dar respuesta más efectiva al servicio de la comunidad, el BCBG, cuenta con el Grupo Especializado Canino, desde el 2013.
Los perros reciben entrenamiento constante y sus instructores también son capacitados a la vanguardia de las operaciones.
Historias escritas en 4 patas
Raknar y Viggo cumplieron un rol fundamental en la búsqueda de personas atrapadas bajo toneladas de tierra por el deslizamiento de una montaña, en el cantón Alausí, provincia de Chimborazo, el 26 de marzo de 2023.
- La responsabilidad de los canes era captar olores humanos antes que las grandes máquinas entraran a retirar los escombros. En dos días de trabajo, los perros dieron nueve marcaciones de las cuales se extrajeron cuerpos, luego de horas de excavación.
"Devolver un pariente a su familia fue una escena conmovedora. Incluso, después de haber cumplido su trabajo, los perros interactuaban con quienes vivían ese momento de dolor. Un abrazo o una lamida de manos tenían mucho significado".
Ricardo Jairala
A esa misma zona regresamos luego de 40 días y los canes dieron más señales positivas para identificar osamenta, recuerda Jairala, quien también se desenvuelve como Jefe de la División Fluvial del BCBG.
Asimismo en 2023 se vivió otra experiencia. Con la intervención de un perro trabajador y el equipo técnico especializado a más de drones, se rescató a una persona extraviada en el cerro Paraíso en el Puerto Principal.
Historias como estas se escriben con frecuencia y sus protagonistas siempre están listos para responder a las alertas y someterse a condiciones adversas.
Entre juegos y premios, un trabajo serio
Las razas más nobles para el trabajo de búsqueda y rescate de personas están: pastores belga, holandés, alemán y australiano; labrador; golden retrevier y border collie. Los cuales poseen facilidad para adaptarse y por ende para el entrenamiento, sostiene Jairala.
Con un método basado en el juego y premio, un perro inicia su formación a los seis meses de edad. Proceso que podría durar dos años. Al cabo de ese tiempo también habrá madurado un vínculo para siempre con su compañero humano.
Estos perros son evaluados en temas de sociabilidad, sensibilidad auditiva, audacia y actividad. Ellos son entrenados para trabajar en sincronía con los bomberos. Aquí funciona al máximo la comunicación, pues el guía debe interpretar correctamente los mensajes que le da su camarada de cuatro patas.
"Ellos te dicen la ruta a seguir. Buscan rastros y te pueden señalar la ubicación de una persona con un margen de error de hasta 5 metros. Todo depende cómo capten las partículas de olores que salen de los escombros".
Ricardo Jairala
Cuando salen a trabajar, los canes viajan en sus caniles con el resto del convoy. Sus guías son responsables de llevarles suficiente comida y productos de hidratación, pues no saben cuándo retornarán.
Los perros, por su alta actividad física, tienen una alimentación rica en proteína. Además, semestralmente se los lleva al veterinario para exámenes completos que incluyen radiografías, ecos, hemogramas, etc.
De otro lado, los canes cuentan con su documentación al día, en caso de ser llamados a una emergencia fuera del país junto con su dupla humana.
Los perros rescatistas ejercen su trabajo hasta los siete u ocho años de edad, pero esta condición varía según su estado de salud.
Actualmente, los Bomberos de Guayaquil cuentan con siete canes trabajadores, de los cuales dos tienen acreditación para búsqueda en estructuras colapsadas, uno para rescate acuático y cuatro están en formación para adquirir la certificación por parte de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos, etapa que podría culminar en octubre de este año.
Definitivamente, detrás de cada operación existe un equipo comprometido. Perros y bomberos, el binomio perfecto, una combinación de habilidades que les da el coraje para enfrentarse a situaciones donde cada minuto cuenta.
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