Pugna entre bandas se traslada al Centro de Adolescentes Infractores
La Policía investigaba a la víctima, de 17 años, por varias muertes violentas en Milagro. El SNAI aclara que se trata de un hecho aislado y que tomaron medidas para evitar que se repita este episodio.
Medicina Legal retira el cuerpo de Carlos V., de 17 años, tras ser asesinado en el Centro de Adolescentes Infractores (CAI) de Guayaquil, el 9 de abril de 2022.
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El crimen de un adolescente de 17 años, registrado el 9 de abril de 2022, en el Centro de Adolescentes Infractores (CAI) de Guayaquil, encendió las alarmas de las autoridades, ya que se trata de un enfrentamiento entre Los Lagartos y Los Choneros.
Estas dos organizaciones delictivas se disputan el poder en las cárceles del país.
La Policía recibió la alerta cerca de las 14:00, pero el hecho se produjo a las 11:45, según el parte. El joven fue identificado como Carlos V. y llevaba casi 24 horas en el Centro de Adolescentes Infractores.
Según información preliminar, otros seis internos atacaron al guardia del CAI, le quitaron las llaves, ingresaron a la celda de Carlos V., y lo apuñalaron.
En la audiencia de flagrancia, el juez de Garantías Penales, Bernardo Ortega, dictó prisión preventiva para Juver Elián S. L., Juan Gabriel Ch. S., Ronald Samuel G. M., Bryan Nick G. M., Darlyn Javier G. A. y Diego Ismael C. C.
Los procesados fueron llevados a la Penitenciaría del Litoral porque todos son mayores de edad (entre 18 y 22 años). Sin embargo, seguían en el Centro de Adolescentes Infractores porque cumplían "medidas socioeducativas" por delitos cometidos cuando eran menores.
Desde el SNAI aclaran que se trata de un hecho aislado, pues nunca se había registrado una muerte violenta en un CAI. También esclarecieron por qué mayores de edad estaban allí.
"Cumplieron su delito cuando eran adolescentes, se los sancionó conforme a la ley y al COIP y se les dictó una medida socioeducativa", señaló John Román, coordinador del CAI de Guayaquil.
En diálogo con PRIMICIAS, indicó que en el caso de los hoy procesados, cumplían penas de entre 1 y 8 años por varios delitos. Por su edad se encontraba en la fase eco, una de las cinco por las que se divide a los internos.
En este centro hay 72 adolescentes que cometieron delitos de violación, robo, delincuencia organizada y tráfico de drogas, en menor escala. Solo dos agentes penitenciarios se encargan de su custodia.
En todo el país, hay 11 centros de adolescentes infractores, indicó Euriza Rivera, directora de Medidas socioeducativas del SNAI.
La funcionaria aseguró que la entidad tomó las medidas necesarias para evitar que hechos como este se repliquen. Adicionalmente, trabajan en la parte psicológica de los internos.
William Borja, jefe subrogante de la Dinased zona 8, explicó a PRIMICIAS que el menor ingresó al reclusorio tras su aprehensión en Milagro. Sobre él pesaba una boleta de captura por varios delitos.
El funcionario desmintió que los victimarios hayan burlado la seguridad policial, como lo señaló Fiscalía en un comunicado. Y agregó que fue la Policía la que detuvo a los agresores.
También lamentó que durante las investigaciones de la Dinased, los testigos no hayan colaborado con información para esclarecer los hechos. No obstante, cree que el mensaje es claro y obedece a pugna entre bandas delictivas.
Un historial delictivo en Milagro
Carlos V. era oriundo de Milagro, en Guayas. La Policía le seguía la pista por varios asesinatos.
Fue procesado por tentativa de asesinato en un doble crimen en el centro de Milagro, la tarde del 7 de abril de 2022. En esa diligencia fue donde se dispuso su traslado al Centro de Adolescentes Infractores de Guayaquil.
También se le formuló cargos por porte ilegal de armas, pues al momento de su captura, tenía en su poder un revólver, según explicó Marco Proaño, jefe de la Dinased de Guayas.
"Disparó contra un policía durante la persecución, el agente resultó ileso y el adolescente botó el arma", detalló a PRIMICIAS.
Pero en otra diligencia quedó procesado por un asesinato que data de enero de 2022. El joven tenía boleta de captura.
Proaño indicó que Carlos V. pertenecía a la banda de Los Lagartos y que en una entrevista reveló que había recibido amenazas de muerte y que su cabeza tenía precio.
Los victimarios fueron identificados como parte de Los Choneros, agregó el jefe de la Dinased.
Carlos V. cumplía 18 años el 19 de abril próximo.
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