Matej Mohoric sorprende y gana la clásica Milán-San Remo

Matej Mohoric atacó a falta de tres kilómetros para el final y sacó la ventaja suficiente en una espectacular carrera que se decidió en el último sprint. Los favoritos para alzarse con el primer puesto, el neerlandés Mathieu Van der Poel, el esloveno Tadej Pogacar y el belga Wout Van Aert finalizaron tercero, quinto y octavo, respectivamente.

Los fugados mandaron desde el inicio, en una carrera que se mantuvo llana durante casi 130 kilómetros, y consiguieron una ventaja de hasta siete minutos justo antes del exigente 'Passo del Turchino', donde el pelotón redujo la ventaja cerca de treinta segundos.

Pero camuflados en el pelotón estaban los mejores de la carrera, que guardaron fuerzas para poder llegar frescos al final de una de las clásicas más duras del mundo.

Los belgas Jasper Philipsen y Wout Van Aert, el neerlandés Mathieu Van der Poel, el eslovaco Peter Sagan, el danés Mads Pedersen, el italiano Filippo Ganna, y los eslovenos Primoz Roglic y Tadej Pogacar fueron haciéndose hueco entre el pelotón y calculando el momento justo para lanzar un ataque, siempre pendientes de los movimientos de los rivales.

Y apareció Pogacar. El esloveno intentó escaparse cuando el grupo de cabeza de carrera se estaba partiendo y con la baja de uno de los favoritos, el británico Thomas Pidcock, fuera de combate por abandono.

Además, Sagan tuvo problemas con el cambio y se vio obligado a montarse en otra bicicleta, lo que le hizo perder un tiempo que no recuperó.

Con esos dos favoritos fuera de combate, la lucha parecía reducirse a Pogacar, Van der Poel, Van Aert y Roglic, pero ninguno consiguió que su ataque fuera decisivo. En ese momento emergió la figura de Mohoric.

A falta de tres kilómetros para la meta, el esloveno sacó fuerzas de donde ya no quedaban para lanzar una espectacular ofensiva y liderar en solitario la carrera. No miró atrás desde que inició su atrevido sprint, en el que retó a los grandes nombres de este deporte.

Con esta victoria, Mohoric se convierte en el primer esloveno en ganar la Milan-San Remo y hereda la corona del belga Jasper Stuyven.

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