Madelin Riera superó a Kaviedes como goleadora del campeonato ecuatoriano
La goleadora de Deportivo Cuenca, Madelin Riera, en la final de ida de la Superliga femenina frente a Ñañas.
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La jugadora guayaquileña y actual número 11 del Deportivo Cuenca empezó a jugar al fútbol en la selección del colegio Liceo Cristiano de Guayaquil.
Después, pasó por diferentes equipos del puerto principal hasta llegar en enero de este año al club que se convertiría en el primer campeón de la Superliga femenina.
Riera, de 30 años, tiene previsto graduarse como diseñadora gráfica y audiovisual en el Instituto Tecnológico Euroamericano en los primeros días de noviembre.
La goleadora asegura que jugar fútbol y estudiar no fue una tarea fácil, incluso se cambió de carrera por más de una ocasión, porque le dio prioridad al deporte que tanto la apasiona.
Aparte de ser la figura del Deportivo Cuenca y de estudiar su carrera de diseño, ella ayuda a su mamá en un restaurante en Guayaquil cuando no tiene partidos los fines de semana.
Mientras piensa en cómo anotar un gol sin margen de error en el área chica, también ayuda a pasar los platos de comida que piden los comensales.
Vivir del fútbol en Ecuador no es tan fácil como parece y menos para una mujer. Riera, la goleadora del torneo, capitana y figura del equipo campeón solo cobra mensualmente un salario básico (USD 394), pero lo complementa con la ayuda que brinda en el pequeño restaurante de su mamá.
Madelin Riera es dueña de una larga trayectoria en el fútbol nacional. Defendió los colores de la Tricolor desde los 13 años, ha jugado Copa Libertadores, Copa América y fue parte de la selección histórica que participó en el Mundial de Canadá en el 2015.
Este 2019 ha sido de ensueño para la capitana de las Leonas. Se consagró campeona de la Superliga femenina con Deportivo Cuenca, rompió el récord de Jaime Iván Kaviedes como goleadora y jugará la Copa Libertadores, que se disputará en el país del 11 al 27 de octubre en el país.
Madelin Riera confía en que el fútbol femenino en el Ecuador sea completamente profesional en poco tiempo. Mientras tanto la delantera guayaquileña, a sus 30 años, ya piensa en el retiro.
Se ilusiona con ejercer su carrera de diseñadora gráfica y cumplir otros objetivos. Sin embargo, es una decisión que aún no es definitiva.
Lo único claro para la atacante es que jugará la Copa Libertadores con el Deportivo Cuenca y que hizo historia en el fútbol ecuatoriano y convirtió sus goles en un hito del deporte femenino.
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