Jairo Campos: “La gente del Valle del Chota perdió el hambre”
El exjugador, oriundo de Carpuela, inició una nueva faceta en su vida. Se desempeña como director técnico de la Sub 15 de Independiente del Valle. Dice que ya no salen tantos futbolistas del Valle del Chota porque "perdieron el hambre".
Jairo Campos, director técnico de la categoría Sub 15 de Independiente del Valle, 23 de febrero de 2024.
Daniela Romero / PRIMICIAS
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Jairo Campos tuvo una larga trayectoria como jugador de fútbol. A nivel nacional jugó en Aucas, Liga de Quito, Deportivo Quito, Barcelona SC, El Nacional e Imbabura. Mientras que en el extranjero defendió las camisetas del KAA Gante de Bélgica y el Atlético Mineiro de Brasil.
En enero de 2014, Campos jugaba un partido amistoso en Quito entre Barcelona SC, su equipo en ese entonces, y Mushuc Runa, que recién había ascendido a la Serie A.
El zaguero se rompió el tendón de Aquiles de la pierna izquierda. El defensa fue operado, estuvo fuera de las canchas por seis meses y se perdió el Mundial de Brasil 2014.
Después intentó recuperar su nivel, que lo llevó a ganar la Copa Libertadores con Liga de Quito en 2008 y a la selección ecuatoriana. Pero no lo logró. Por eso, prefirió retirarse.
Cuando llega el momento de colgar los botines, los jugadores ecuatorianos buscan seguir involucrados en el mundo del fútbol. Como el caso de Antonio Valencia, quien creó su equipo AV25, que juega en segunda categoría.
Jairo Campos no se quedó atrás. El exjugador, que ahora tiene 39 años, es uno de los entrenadores de las categorías formativas de Independiente del Valle. Además, tiene su propia escuela de fútbol a la que le bautizó con el nombre de ‘Canteranos’.
Su academia le permitió entrar a Independiente, equipo que ha fichado a cuatro jugadores: dos son sus hijos y dos jugadores más. Antes de llegar a IDV y mientras se estaba preparando para ser director técnico, Jairo Campos hizo pasantías en Liga de Quito.
PRIMICIAS conversó con el exjugador ecuatoriano, quien contó cómo llegó a ser entrenador y el sueño que tiene de dirigir a la Selección
Cuando era jugador, ¿ya pensaba en seguir vinculado al fútbol?
Sí, mientras uno está jugando, se va perfilando. Mi idea siempre fue seguir relacionado con el fútbol, que es a lo que uno se especializó. Como entrenador o representante de jugadores.
¿Qué es lo que le llamaba más la atención de ser representante?
He tenido una buena relación con los excompañeros, con los dirigentes que siguen, algunos en los equipos que estuve, entonces creía que desde ahí podía tener contacto y la facilidad para llegar a los chicos. Al inicio comencé a trabajar con la agencia Kancha. Después me incliné a ser entrenador.
¿Por qué cree que ya no han salido muchos futbolistas del Valle del Chota?
Es un punto muy bueno. La gente de mi tierra perdió el hambre, esa hambre que teníamos de salir. De mi generación, la mayoría son policías, entonces están buscando lo más fácil y no están queriendo hacer ese esfuerzo de irte lejos y buscar triunfar.
Cuando yo decía que quería ser jugador profesional, sabía que tenía que seguir por un camino. O irme lejos, a Quito o Guayaquil. En mi caso fue Guayaquil y busqué eso. Ahora los chicos no buscan eso, buscan graduarse del colegio, juegan bien, pero no quieren hacer ese esfuerzo de irse lejos. La mayoría son policías o se hicieron militares.
¿Por qué decidió ser director técnico?
Hubo una buena posibilidad de sacar la licencia, de hacer convalidación con los jugadores de amplia trayectoria. La Conmebol mandó una autorización a la FEF para solamente hacer cinco o seis meses. Como era algo que me gustaba, aprovechamos con algunos excompañeros y sacamos la licencia.
¿Cómo fue tener que estudiar para conseguir la licencia?
Lindo. Hermoso. Es como refrescar lo que ya hiciste, pero ahora en la faceta de dar las indicaciones a los chicos, ya no como jugador, sino como entrenador.
¿Cuándo empezó su carrera como director técnico?
En ese lapso que yo tuve la lesión y mientras me recuperaba, se dio la posibilidad de abrir una academia de fútbol junto a mi hermano Ronnald. Entonces nos empezó a ir bien en distintos torneos y como Independiente hace scouting, nos vieron y les interesó nuestra academia.
Tenemos seis años en el mercado de escuelas de fútbol, hemos logrado meter cuatro jugadores a Independiente del Valle (...) El objetivo siempre fue ese, no solo tener una escuela y tener un rubro de eso, sino también poderles enseñar a los chicos y ser una cantera, por eso la escuela se llama ‘Canteranos’. Ya tenemos jugadores en IDV, Cumbayá y Cuniburo.
¿Cómo llegó a Independiente del Valle?
Gabriel Rendón, encargado de scouting en Pichincha y Tungurahua, y Arkaitz Mota, jefe de scouting se acercaron a la academia y nos propusieron hacer un convenio con IDV, el cual consiste en que los jugadores que ellos vean bien en los entrenamientos, torneos, traerlos acá para que hagan un proceso para ser parte de IDV.
Mota me propuso hacer pasantías en IDV. Eso fue en noviembre de 2022, entonces hice un mes de pasantías. Me gustó mucho, es un gran club que te da muchas herramientas, ese fue el primer paso.
En diciembre me llamaron para ser parte del cuerpo técnico de la Sub 13, eso fue en 2023. Ahora estoy como entrenador principal de la Sub 15.
¿Cuál ha sido el reto más grande que ha tenido en IDV?
Ahorita el de estar de entrenador principal, porque hay muchos factores diferentes. Cuando eres asistente, estás ayudando a cristalizar la idea que tiene el profesor. En cambio, como entrenador, tienes que llevar las riendas, manejar el grupo, controlar que los chicos estén bien en el colegio, que los entrenamientos salgan bien. Es una mayor responsabilidad, pero bonita. Esto es como un entrenamiento para lo que quiero llegar, que es ser entrenador de primera categoría o una Selección.
¿Por qué es tan importante trabajar con las formativas?
Porque ahí está el futuro, los proyectos deben comenzar mirando las canteras porque de ahí nace. La mayoría de equipos en nuestro país se fijan en el primer equipo, pero después cómo alimenta para hacer recambios, ¿cómo alimentas a ese primer equipo? Desde abajo.
Independiente lo ha entendido muy bien, a las mil maravillas, tanto así que aquí los chicos tienen una educación integral, no solamente es fútbol. Si no estás bien en el colegio, no juegas, entonces la consigna es esa: estudiar, jugar fútbol. Acá tienen buena alimentación, psicólogo, médico, tienen todas las herramientas para poder llegar a su objetivo que es ser futbolistas.
¿Cuál es su objetivo como director técnico?
Yo pensaba que sin haber estudiado, solo con el hecho de jugar, podía dirigir cualquier selección o cualquier equipo, pero no. Hay muchos factores que no te permitirían hacerlo de la forma correcta, porque uno tiene que empaparse de muchas cosas, porque el manejo con chicos es totalmente diferente al manejo con gente grande.
Mi idea es ir creciendo en IDV. Comencé como asistente en la Sub 13, tuve un gran maestro ahí, Diego Pillajo. Uno se pregunta por qué personas así no tienen la oportunidad de dirigir un primer equipo. Creo que los profes que están acá desde hace más de cinco años, tranquilamente podrían estar dirigiendo cualquier equipo de primera en el país. Los dirigentes deberían empezar a ver eso.
Mi idea es aprender lo que pueda y luego dar el salto. Ir poco a poco. Me veo en unos dos o tres años ya dirigiendo una Selección juvenil, un equipo de primera, poder tener esa posibilidad.
¿Sueña con dirigir a la selección de Ecuador?
Sí, ¿por qué no? Uno tiene que soñar en grande, uno tiene que proyectarse y atraer eso. Pero también prepararse. En el lugar en el que estoy ahora estoy aprendiendo mucho y estoy seguro que, en un futuro, voy a lograr esa meta.
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