Kendry Páez, ¿el nuevo Messi o solamente es un producto bien vendido?
El mejor futbolista Sub 17 del país no jugará en el Mundial de la categoría porque... ¡ya es un crack! Absurdo.
Kendry Páez, durante el partido de Ecuador ante Corea del Sur del Mundial Sub 20, el 1 de junio de 2023.
EFE
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Parece que el 'producto Kendry Páez' le está ganando al 'deportista Kendry Páez'. Cuidado, eso es peligroso. Afiebrarse y cometer locuras es lo que impidió que gente con proyección y talento se consumiera a la velocidad de un papel arrojado al fuego.
Resulta que Kendry Páez, el mejor futbolista Sub 17 del país, no jugará en el Mundial Sub 17. ¿La razón de esta irracional idea que trastoca el orden natural de la carrera de un futbolista? Pues alguien quiere consolidar a Kendry como la nueva estrella de la Tricolor de mayores, que casualmente tiene partidos de eliminatorias en las fechas del Mundial Sub 17.
Como se trata de un crack del seleccionado adulto, no puede seguir perdiendo el tiempo en torneos de niños. ¡Por favor!
En otras palabras, ese alguien (el entrenador Félix Sánchez) está impidiendo que el mejor futbolista adolescente de Ecuador vaya al Mundial de adolescentes, porque quiere hacer creer a la gente que, mágicamente, descubrió al nuevo referente de la Tricolor.
¿Tan indispensable es Kendry que, sin su presencia, no se podrá ganar a Chile y Venezuela? ¿Es el nuevo Messi?
Este año, Kendry ha aparecido hasta en la colada morada debido a una alta sobreexposición. Ha jugado la Copa Libertadores y el Mundial Sub 20, además de que participa en la LigaPro y, de paso, protagonizó la pre-venta más importante de un ecuatoriano de la historia. Desde el punto de vista del marketing, ha estado en todas las vitrinas.
Su debut en la Tricolor de mayores era solo un paso más de su meteórico ascenso. Pero extirparlo de la etapa natural de jugar un Mundial propicio para su edad (donde puede brillar aún más) suena a abuso, a prepotencia. Sus allegados están viendo a Kendry como un producto que, es evidente, ha sido bien vendido.
Pero vayan despacio: estamos hablando de personas, de gente que tarde o temprano se harta, se llena de dudas y debe afrontar la presión. Kendry no es una lata de atún.
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