Ganso asegura que Fluminense no toma como revancha la Recopa contra Liga

El delantero del Fluminense, Paulo Henrique Ganso, aseguró este miércoles que no tomará como una revancha el tercer intento por ganar un título internacional contra Liga de Quito, el rival del club carioca en la Recopa Sudamericana.

"No tomaremos como una revancha el partido ante Liga, saldremos con la responsabilidad de ganar estando juntos y muy atentos en el campo de juego", señaló Ganso durante una rueda de prensa previa al partido de ida de la Recopa Sudamericana, que se disputará este 21 de febrero (19:30).

El 'Flu' buscará una ventaja con la que afrontar el partido de vuelta de la próxima semana en Río de Janeiro y lograr así un título internacional ante Liga Deportiva Universitaria, lo que no logró ni en la final de la Copa Libertadores de 2008 ni en la final de la Copa Sudamericana de 2009.

Con relación al conocimiento del rival, Ganso dijo que "tenemos poco tiempo de haber llegado a Quito, pero hemos visto algunos vídeos de Liga, que tiene una forma de jugar, con un ritmo muy alto, principalmente de sus atacantes, por lo que tenemos que estar preparados y siempre juntos en el partido".

Para Ganso, el 'Rey de Copas' sabe sacar provecho jugando en la altura (más de 2.800 metros sobre el nivel del mar), "gracias al buen juego y la fortaleza física que tiene".

"Por más que tenga a un nuevo técnico (el español Josep Alcácer) y estén empezando la temporada, será un rival complicado", vaticinó.

El brasileño aseguró que Fluminense buscará tener el control máximo del juego, manteniendo la tranquilidad y procurando que todo les salga bien durante los 90 minutos.

"Va a ser un partido muy difícil, contra un equipo muy complicado, con gente que juega con una gran actitud, que realmente es difícil porque están muy acostumbrado a eso", expresó.

Insistió en que los jugadores de Fluminense salen a cada partido con la obligación de ganarlos todos, en procura de conquistar grandes cosas.

También aseveró que están tratando de adaptarse a la altura de Quito, procurando oxigenarse, moviéndose en forma inteligente para dosificar energías en el campo de juego.