El recuerdo de Carlos Muñoz en una triste Navidad de Barcelona
El 26 de diciembre de 1993, el goleador Carlos Muñoz Martínez falleció en un accidente de tránsito, solo tres días después del 'hat trick' que le marcó a El Nacional.
Carlos Muñoz Martínez fue un ídolo en Barcelona Sporting Club.
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La imagen goleadora del 'Frentón' Carlos Muñoz quedó en la memoria de los barcelonistas, con esas tres anotaciones que permitieron al conjunto amarillo clasificar a la Copa Libertadores de 1994.
Los cinco recuerdos que calaron en la memoria torera de Carlos Muñoz son:
1. Su carrera
Carlos Antonio Muñoz Martínez nació en Guayaquil, el 13 de noviembre de 1964. Se formó en las divisiones menores de Emelec, equipo del que se declaró hincha, pero se convirtió en ídolo en Barcelona.
Con Everest ganó el título de la Segunda Categoría, además del goleador de la temporada. Luego formó parte del Audaz Octubrino de Machala. Pasó por Olmedo de Riobamba, Filanbanco de Milagro y llegó a Barcelona en 1989.
En esa temporada fue vicecampeón nacional. Formó parte del plantel que llegó a la final de la Copa Libertadores contra Olimpia de Paraguay, en 1990.
Con Filanbanco y Barcelona jugó 47 partidos de la Copa Libertadores entre 1987 y 1993 y sumó cuatro goles.
Inicialmente se ubicaba en la media cancha, como volante ofensivo. En Audaz Octubrino bajó a la ofensiva, donde demostró su velocidad, rapidez mental y gambeta para deleitar al hincha y convertir en el arco rival.
2. Fue reconocido
En Barcelona es considerado uno de los mejores delanteros que formó parte del plantel entre 1989 y 1993.
Su primer encuentro con los amarillos fue en 1990. Fue vicecampeón nacional en 1990, 1992 y 1993 y ganó el campeonato nacional de 1991.
Fue un goleador nato, siempre peligroso en el área rival. En 1991 convirtió 15 goles; en 1992 fue el máximo anotador del campeonato nacional con 19; y, en 1993 quedó en segundo lugar en la tabla de goleo con 15 tantos.
Barcelona le rindió un homenaje especial al colocar un busto en el estadio Banco Pichincha, donde también la general sur lleva su nombre.
3. La Selección
Ese rendimiento goleador le permitió formar parte de la Selección nacional que dirigía el montenegrino Dussan Draskovic, en el proceso de transformación del fútbol nacional.
Muñoz sumó 35 partidos oficiales con la Tricolor. Debutó el 15 de marzo de 1989 ante Brasil en Cuiabá en un partido amistoso. Su último cotejo fue el 19 de septiembre de 1993 ante Bolivia en Guayaquil.
Disputó tres ediciones de la Copa América: 1989 en Brasil, 1991 en Chile y 1993 en Ecuador, donde jugó en seis cotejos y anotó un gol.
A nivel de Eliminatorias, completó 12 partidos y convirtió en una ocasión en el proceso para Estados Unidos 1994.
Pese a que su rendimiento goleador le abrió las puertas en la Selección, Draskovic lo colocaba en la cancha como carrilero por derecha. Debía cumplir tareas defensivas y luego acompañar a sus compañeros de delantera.
4. Fichaje frustrado
En 1992, tras su actuación en Barcelona y la Selección, el club amarillo recibió una oferta por su pase de parte del Club Las Palmas de España.
No se concretó la transferencia y el club recibió una nueva oferta al finalizar 1993. Su transferencia al Independiente de Avellaneda, de Argentina, estaba por cerrarse en enero, pero todo quedó truncado.
Era un goleador con definición exquisita. Anotaba con pierna derecha, pero también con la izquierda. Convirtió goles de penal y de tiro libre. Pese al 1,67 metros de estatura, remataba de cabeza con enorme éxito.
5. El accidente
La madrugada del 26 de diciembre de 1993, a pocos kilómetros de General Villamil (Playas) ocurrió el accidente de tránsito que cobró la vida de Carlos Muñoz, que un mes antes había cumplido 28 años.
El futbolista conducía su auto a altas velocidades y según la autopsia, había registros de consumo de alcohol en su cuerpo. La muerte fue instantánea por un golpe que recibió en la cabeza.
Hinchas de Barcelona, al conocer el suceso se trasladaron hasta el anfiteatro de Playas y luego al de Guayaquil para rendir tributo a su ídolo.
Su funeral fue uno de los más concurridos en Guayaquil. Compañeros de plantel como Holger Quiñónez, Claudio Alcívar, Jimmy Montanero, Carlos Luis Morales, cargaron la caja mortuoria que fue cubierta con una bandera del ídolo.
Una de las más afectadas también fue Violeta Vergara, su viuda y quien se encontraba en los últimos meses de su segundo embarazo.
Carlos Muñoz dejó una huella en el fútbol nacional, pues su muerte llegó en el mejor momento de su carrera deportiva.
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