Hayanne y Gabrielle traen la magia brasileña al equipo femenino de Liga

Se llevan casi 10 años de edad de diferencia, pero en Liga son socias a la hora del gol. Se trata de Hayanne Sousa, quien llegó a Quito hace un mes y ya está acostumbrada a la altura. Le gustan el club y la ciudad, pero aún sufre con el frío.

Y Gabrielle Díaz, quien ha cumplido el sueño de toda futbolista: jugar en el exterior, debutar y anotar un gol.

"Estoy muy emocionada, Dios tenía preparado esto para mí. Debuté con un gol y con el pase de otra brasileña. Teníamos que mostrar que estamos aquí para sumar", dice Gabrielle con una simpática sonrisa, de alegría y orgullo.

En 2019, Liga no contó con jugadoras extranjeras en sus filas para la Superliga, el máximo torneo del fútbol femenino de Ecuador. En 2020 incorporó a tres jugadoras venezolanas, que se quedaron también para 2021.

Para la temporada 2022, el cuerpo técnico de Liga se renovó con la contratación de la entrenadora Verónica Marín.

Al equipo también llegó la coordinadora María José Benítez, quien participó en la contratación de las dos brasileñas. "Le va a hacer bien al equipo este cambio", dijo.

Hayanne Sousa y Gabrielle Díaz son muy creyentes y dan gracias a Dios por su fichaje. Para ambas es su primera transferencia al fútbol del exterior.

Gaby, como le dicen sus amigas, viene de jugar en el Vasco Da Gama. Cuando su empresario le comentó sobre la posibilidad de ser contratada para el fútbol ecuatoriano no dudó en dar el sí.

"Liga de Quito es mundialmente conocido. Al equipo masculino lo vi jugar en el estadio Maracaná, en un partido de la Copa Libertadores".

Gabrielle Díaz, jugadora de LDU

Ella es una volante ofensiva de 22 años de edad. "Creativa, juego de 8 o de 10, aunque llevo la camiseta 17", agrega.

Admira a jugadores como Cristiano Ronaldo y Philippe Coutinho, pero tiene especial deferencia para Marta, la histórica futbolista de su país, así como para Formiga. "Las dos son jugadoras referentes de superación".

Gaby dice que viene a Ecuador a aportar y a ser campeona de la Superliga. "Tenemos un plantel calificado con el que podemos llegar a las finales", asegura.

El fútbol en Brasil es el juego que atrapa a las niñas desde muy pequeñas. Gaby empezó a jugar a los cinco años con los amigos en la cancha del barrio o en la calle.

En su adolescencia compartía el fútbol sala y el fútbol de 11 integrantes. Se desempeñaba como delantera, pero no se sentía bien porque, dice, esperaba mucho tiempo para que el balón le llegara a sus pies.

Decidió entonces retroceder unos metros y bajar al medio campo para asumir las funciones de la volante 10.

Asiste a sus compañeras y, cuando puede, remata de media distancia, como ocurrió en la cuarta fecha de la Superliga, cuando anotó su primer gol en Ecuador.

Es originaria del estado de Minas Gerais, allí jugó en Athletic Club y en el club Ipatinga. Viajó a Río de Janeiro para formar parte de Vasco Da Gama y su último club fue el Tiradentes, de Teresina, en el estado de Piauí.

Tiene la habilidad de los clásicos 10. Domina el balón con la derecha y es certera con la zurda. Cuando puede hace malabares con la pelota.

Volante de contención

Hayanne Sousa tiene 31 años. Nació en el cálido estado de Pernambuco, por eso dice que el frío de Quito aún no termina de gustarle. "A la altura ya estoy adaptada", cuenta en 'portuñol'.

Lleva más de 15 años jugando, aprendió desde niña y tuvo que convencer a su madre que este deporte era lo suyo. "Somos cuatro hermanas y a mi mamá no le gustaba esto".

Pero el balón pudo más y después de superar la oposición materna empezó a jugar en clubes locales. Su último equipo fue Pernambuco, con el que ganó el torneo estatal.

Es volante de contención, pone el equilibrio en el equipo. Su principal misión es contagiar seguridad, pues es una de las de mayor experiencia en Liga de Quito. "Me he acoplado al juego de Liga, me viene bien a mi estilo", agrega.

Dice que el plantel de jugadoras, así como el cuerpo técnico de Liga, le han brindado todas las facilidades para lograr su mejor versión como futbolista.

"Antes de venir solo había visto dos videos del equipo femenino. El club es conocido mundialmente por el plantel masculino", dice tras destacar las instalaciones del Centro de Alto Rendimiento de LDU.

Ya ha jugado algunos partidos de la Superliga, un torneo al que califica como muy bueno "por el número de equipos y los meses de competencia".

Hasta fichar por Liga de Quito no tenía conocimiento del nivel del fútbol femenino ecuatoriano, pero está sorprendida.

Cree que su equipo puede llegar a instancias finales. "Tenemos que mejorar, el club va a dar lo mejor para hacer una buena temporada".

Hayanne y Gabrielle despliegan su magia en el equipo femenino de Liga Deportiva Universitaria que este año va por todo. La 'U' quiere ganar el campeonato y clasificar a la Libertadores.