Doménica Azuero está de acuerdo con la postergación de Tokio 2020

A sus 24 años, Doménica Azuero es parte del circuito mundial de BMX, deporte al que se dedica por completo desde los siete años.

La cuencana ha representado al Ecuador en varios eventos, entre los que figuran los Juegos Olímpicos de la Juventud Nanjing (China) 2014, y los Panamericanos de Toronto (Canadá) 2015, donde obtuvo la medalla de plata.

Lastimosamente, una lesión en su rodilla en 2015, y dos rotaruas de clavícula en 2016, no le permitieron llegar a Río de Janeiro 2016, los que hubiesen sido sus primeros Juegos Olímpicos, con apenas 19 años. Eso no le quitó fuerzas, sino que la impulso a buscar su clasificación a Tokio 2020.

Para ello ha tenido un ciclo olímpico, en el que ha participado en los distintos eventos del calendario. Obtuvo buenos resultados, como el primer lugar en el campeonato nacional y en la Copa Internacional, realizada en Argentina el año pasado.

En cada una de las competencias, Azuero fue sumando puntos para el ranking clasificatorio a Tokio. Al momento se encuentra en el primer lugar, según la Unión Ciclista Internacional (UCI).

Pero la temporada 2020 para la cuencana fue muy extraña. Aparte de no alcanzar buenos resultados, tuvo que ver como se cancelaba una de las etapas de la Copa Mundo de Australia en febrero. Y cuando estaba lista para asistir al mundial de BMX, el coronavirus obligó a la UCI a cancelar su calendario hasta mayo.

“Con el Covid-19 se cancelaron varias carreras por el aislamiento. Creo que todos los deportistas en estos momentos nos estamos enfocando en mantener el cuerpo activo en la medida de lo posible”, le comentó Azuero a PRIMICIAS, desde su casa en Cuenca, donde se mantiene en cuarentena.

Aunque realiza una rutina de ejercicios diarios, Azuero sabía que el rendimiento no iba a ser el mismo si el Comité Olímpico Internacional (COI) decidía realizar los Juegos Olímpicos este año. “Hubiera estado al 60 o 70% de mi nivel", dice la ciclista.

Con la postergación oficial, el panorama ha cambiado. La pedalista ecuatoriana tendrá tiempo para prepararse y, sobre todo, volver a competir para recuperar su nivel.

“Creo que la ventaja es que el Comité Olímpico Internacional ha visto nuestra salud como primordial. Es la mejor decisión”, concluye la deportista que espera tener una gran actuación en sus primeros Juegos Olímpicos, en Tokio 2020, aunque se realizarán en 2021.

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