La selección ecuatoriana de fútbol fue eliminada de la Copa América de Estados Unidos tras un partidazo ante Argentina, que se definió en los tiros desde el punto del penal. La Tricolor se va con la frente en alto. Compitió y lo complicó al vigente campeón del mundo.
DESDE HOUSTON, TEXAS
No se pudo. Se hizo lo que estuvo dentro de las posibilidades. Y las capacidades. Ecuador quedó eliminado en los cuartos de final de la Copa América y sumó otra irregular actuación en el torneo, que ha resultado una pesadilla a lo largo de la historia.
La participación de la Tri en esta instancia del torneo era, en principio, una obligación. Sobre todo por los rivales del Grupo B que, salvo Venezuela, no tenían armas suficientes para hacer daño.
Pero después, en la cancha, una vez que el árbitro pita el inicio del partido, todo puede pasar. Es fútbol. "Dinámica de lo impensado".
Ecuador se ilusionó en el debut en Santa Clara. Todo estaba dado para derrotar a los venezolanos y acomodarse en el grupo. Pero la expulsión de Enner Valencia condicionó el plan de juego. Se perdió.
En la segunda jornada, el equipo dirigido por Félix Sánchez Bas estaba obligado a ganar. No servía otro resultado. La presión estaba del lado de los tricolores. Se hicieron los deberes. Victoria ante Jamaica y a soñar.
Ante México era una final. Servía el empate. Pero el objetivo era ganar. "Salir con mentalidad de igualar no era una buena opción", dijo Sánchez Bas en la previa.
Ecuador sufrió y sumó un punto. Clasificación en el bolsillo. Se cumplió el primer reto. Pero, desde el juego, quedaban más dudas que certezas.
¿Uno o dos delanteros? ¿Alan Franco o Carlos Gruezo como acompañantes de Moisés Caicedo? ¿Kendry Páez debía mantener la titularidad? ¿4-4-2 o 4-5-1? ¿Cuál era el rol de Kevin Rodríguez?
Lo cierto es que la Tricolor no fue un equipo confiable en la fase de grupos. Le costó mantener la intensidad y la tenencia de la pelota, sobre todo en los segundos tiempos. Tampoco hubo gol. Algo que preocupa desde hace muchos años.
Y después, ante Argentina, el equipo compitió. Jugó, quizás, el mejor partido del ciclo Sánchez Bas. Lo complicó al campeón del mundo. Era a todo o nada. "No había un mañana", advirtió Enner Valencia, quien lamentablemente erró un tiro penal.
Moisés Caicedo y Jeremy Sarmiento, las figuras
La Copa América 2024 de Moisés Caicedo y Jeremy Sarmiento fue conmovedora. Los mejores de la cancha. El desgaste y el compromiso que demostraron a lo largo de los cuatro partidos contagió al resto del grupo.
No por nada, el mediocampista del Chelsea recibió el premio al mejor futbolista de la cancha después de la victoria ante Jamaica y el empate ante México.
Caicedo se adueñó del medio campo. Tuvo muchos aciertos en la marca e influencia en ataque. Ratificó, una vez más, por qué es el jugador más caro en la historia de la Premier League.
Además, Sarmiento, una de las apuestas (y aciertos) de Félix Sánchez Bas, respondió de gran forma, no le pesó la camiseta y se destacó por su desequilibrio y audacia. Hizo todo bien.
La gran actuación de Sarmiento, de 22 años, definitivamente resulta positivo para este proceso, que necesitaba un elemento de esas características. Encarador, buen pie y gol.
¿Fin de ciclo para Sánchez Bas?
En medio de esta Copa América se instaló el rumor acerca de la continuidad del entrenador español al frente de Ecuador.
Si bien Sánchez Bas presenta una efectividad superior al 50%, y sus números lo respaldan, las formas no convencen, algo que ha provocado la resistencia de la hinchada.
El director técnico fue consultado sobre su situación y su convencimiento en el proceso, aunque no desvió su atención del torneo. Eludió todas las especulaciones.
CALENDARIO DE LA COPA AMÉRICA
