La selección ecuatoriana de fútbol alcanzó una sufrida clasificación a cuartos de final de la Copa América, tras empatar 0-0 ante México en el estadio State Farm de Glendale, Arizona. Al menos 20.000 hinchas apoyaron a la Tri.
DESDE GLENDALE, ARIZONA
Fue otra jornada calurosa en Glendale, la ciudad ubicada a 14 kilómetros de Phoenix, que este domingo 30 de junio recibió a Ecuador y México, por el Grupo B de la Copa América.
A falta de seis horas para el arranque del partido, varios aficionados empezaron a llegar a los exteriores del estadio State Farm. Algunos montaban su puesto de comida. Otros de venta de camisetas, sombreros y banderas.
"Espero que sea una gran jornada. Que venga mucha gente. Quiero vender lo que más pueda", contó Juan, un comerciante venezolano que arribó a Estados Unidos hace tres meses.
Los minutos pasaban. El calor se hacía insoportable. 41 grados Celsius a la sombra.
@jugada_ec Ecuador y México se juegan la continuidad en esa Copa América 👀🏆 #fy #fypシ゚viral #fypage #foryou #foryoupage #latri #ecuador🇪🇨 #fyp ♬ sonido original - Jugada_EC
Pero eso no impidió que decenas de ecuatorianos y mexicanos desfilen por las calles aledañas al estadio, que se adornaron con los colores de ambos países.
Cinco horas para el pitazo inicial. Restaurantes, hoteles y centros comerciales de la zona lucen repletos. Parqueaderos colapsados. Se siente el ambiente a Copa.
Continúan arribando hinchas. Grupos de amigos. Padres con sus hijos. Familias enteras. Incluso con integrantes ecuatorianos y mexicanos. Todos desafían al calor.
Se abren las puertas del estadio. La cantidad de accesos habilitados facilita la entrada. Cientos de voluntarios guían a cada aficionado hacia su asiento. Todo transcurre con normalidad.
Una vez adentro, el público sonríe. Se siente aliviado. Y es que el sistema de refrigeración funciona. 22 grados Celsius.
Rápidamente, los graderíos se pintan de verde, y también de amarillo, azul y rojo. Ambientazo para un partido en el que se sufrirá demasiado.
Los gritos y alientos se sintieron, aun con mayor fuerza, cuando los equipos salieron a hacer los trabajos precompetitivos. Y una vez finalizados, Alexander Domínguez provocó el delirio de un puño de ecuatorianos, cuando regaló sus guantes y se sacó un par de fotos.
Jeremy Sarmiento, de Ecuador, disputa un balón con Jorge Sánchez, de México, en el partido del domingo 30 de junio, por la Copa América. AFP
Ya con los equipos en los vestuarios, la organización del torneo levantó a los hinchas con canciones de Julio Jaramillo y Vicente Fernández.
El árbitro guatemalteco Mario Escobar pitó el inicio del partido. 62.000 personas presentes en el State Farm. Una verdadera multitud tricolor.
A partir de allí, partido trabado, de muchos nervios. Afortunadamente, todo terminó a favor de Ecuador, que alcanzó una sufrida clasificación a cuartos de final de la Copa América. Se viene Argentina.
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