"Estaba llena de escombros": el drama de los sobrevivientes de mortal terremoto en Marruecos
El número de víctimas por el terremoto que azotó el pasado viernes Marruecos asciende a 2.497 muertos y 2.476 heridos, según el último reporte del Ministerio del Interior.
Imagen del pueblo de Targa tras el terremoto de Marruecos, el 11 de septiembre de 2023.
EFE
Actualizada:
Compartir:
Amina Ait Abdulá cenaba con su marido y su hija de 11 años cuando escucharon un ruido raro el viernes 8 de septiembre. Una gran brecha fue recorriendo las paredes del salón y, en un momento, todo se hundió. Su marido murió en el acto, pero su hija no. La escuchó llamarla hasta que su voz calló.
En las aldeas cercanas al epicentro del terremoto que sacudió Marruecos el pasado viernes, las historias se repiten. Más de la mitad de los 2.497 muertos registrados por el momento fueron en esas localidades de la provincia de Al Haouz, en el sur de Marrakech.
El pueblo de Amina, Targa, estaba en una zona inaccesible hasta el domingo. La carretera de montaña que la une con Marrakech se bloqueó con montones de piedras desprendidas de las laderas e hicieron falta 13 horas de trabajo para abrir paso.
En ese tiempo de aislamiento, en Targa los vecinos desescombraron lo que pudieron, como pudieron, y consiguieron sacar a Amina del hueco en el que había quedado encerrada, sin ganas ya de vivir.
Ella lo cuenta casi dos días después, rodeada de mujeres, cubierta con una manta y recostada en la esquina de una tienda hecha de palos, alfombras y asientos fabricados con paquetes de paja forrados. Sus ojos, perdidos.
"Estaba llena escombros y, cuando dejé de oír a mi hija, no quería quitármelos, solo morir. Me decía: no tengo nada, cómo voy a vivir sin ellos".
Amina, sobreviviente del terremoto
Pero sus dos hijos, que viven en Marrakech, no perdieron la esperanza y siguieron llamando al móvil. Hasta que ella lo cogió y, alertados, unos hombres del pueblo la llamaron desde fuera.
Al escuchar sus voces, se zafó de las rocas que la aplastaban hasta el pecho, del cable de electricidad que le rodeaba el cuello y consiguió salir por el techo derrumbado. Nada más salir, se desmayó y es incapaz de recordar cuánto tiempo pasó hasta ese momento.
En los escombros de las 80 casas de Targa se quedaron 20 personas. Los vecinos encontraron 17 cuerpos, sus tumbas recién excavadas son ahora testigo de ello. Tres personas, explican, siguen sepultadas.
Junto a Amina están Fatima, de 30 años, y su hermana. Comparten pena con el resto de mujeres. Ellas, que viven en Marrakech, han perdido a su madre. "Le cayó la casa encima, murió sola. Pasó toda la noche bajo los escombros y la sacaron al día siguiente", contó.
Marroquíes envían ayuda
Ciudadanos de varias localidades marroquíes lanzaron iniciativas para asistir a los supervivientes del terremoto del pasado viernes
Los pobladores han empezado a enviar ropa, mantas y productos alimentarios hasta las aldeas afectadas, como en la ciudad norteña de Alhucemas.
Chakir al Majrut, uno de los promotores de la iniciativa de Alhucemas, explicó que seis camiones salieron esta madrugada de Alhucemas -azotada también en 2004 otro seísmo que causó cientos de muertos- y que van a cruzar mil kilómetros para llegar a su destino.
Compartir: