Ministro panameño: Selva del Darién sufre daño ambiental "irreversible"
En lo que va de 2023, cerca de 390.000 migrantes han ingresado a Panamá por la selva del Darién, de 266 kilómetros de largo.
Migrantes cruzan el río Tuquesa cerca del pueblo de Bajo Chiquito, el primer control fronterizo de la provincia de Darién en Panamá, el 22 de septiembre de 2023.
Luis Acosta / AFP
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La selva del Darién, en la frontera entre Colombia y Panamá, está sufriendo un daño ambiental “irreversible”, por el récord de migrantes que la cruzan rumbo a Estados Unidos, dijo Juan Manuel Pino, ministro de Seguridad de Panamá.
"Hay un daño y cada semana, cada día, es peor", dijo Pino, en una visita al Darién con su par de Costa Rica, Mario Zamora, este sábado 23 de septiembre de 2023. Y añadió que pasarán muchos años para que la selva recupere sus condiciones normales.
La frontera natural, de 266 km de largo y 575.000 hectáreas de superficie, se convirtió en corredor obligado para miles de migrantes que, desde Sudamérica, tratan de llegar sin visa a Estados Unidos, a través de América Central y México.
Unos 390.000 migrantes han ingresado a Panamá por esta selva en lo que va de 2023, mucho más que en todo 2022, cuando fueron 248.000, según datos oficiales de Panamá.
"Tenemos que tener mucho cuidado con esto, porque esto va a afectar a generaciones futuras, a nuestras comunidades indígenas, que se ven impactadas con el tráfico de estas personas", añadió Pino.
Botellas plásticas, pañales y otros desperdicios
Una estela de basura dejan los migrantes en la selva: botas, botellas plásticas, calzoncillos, sostenes, vasos, cepillos de dientes y pañales. Muchos desperdicios cubren las riberas de los ríos, observaron periodistas en una visita a la selva.
"Nos impresionó mucho el deterioro de las condiciones naturales, un escenario que no está diseñado para este tipo de usos humanos y que, desde el punto de vista natural, ha sido severamente afectado", dijo Zamora, ministro de Seguridad de Costa Rica.
Los funcionarios visitaron la aldea de Bajo Chiquito y Canaán Membrillo, donde llegan miles de migrantes cada día.
Desde allí abordan piraguas y navegan hasta el albergue de Lajas Blancas, donde suben a buses que los trasladan a la frontera con Costa Rica para seguir viaje hacia Norteamérica.
La mayoría de los migrantes que cruzan la selva son venezolanos, pero también hay ecuatorianos, haitianos, chinos, vietnamitas, afganos y de países africanos.
El presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, visitará la selva del Darién el 7 de octubre, con su par panameño, Laurentino Cortizo, para coordinar acciones conjuntas.
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