Desorden en traslados escolares del sistema fiscal frustra a padres de familia
Padres de familia reclaman por traslados arbitrarios, retrasos en matrículas y dificultad para unificar a hermanos en una misma institución. Testimonios revelan preocupación por presunta venta de cupos y fallas en atención del Ministerio de Educación.
Padres de familia ingresas con un niño en bicicleta al distrito centro del Ministerio de Educación en Guayaquil.
PRIMICIAS
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Padres de familia en Guayaquil enfrentan un inicio de clases lleno de contrariedades en el sistema fiscal. Retrasos en traslados escolares, dificultades para unificar a hermanos en una misma institución educativa o cambios arbitrarios de unidad constan entre los problemas.
Primero se registraron inconvenientes en la página web del Ministerio de Educación para la matriculación por primera vez en el sistema fiscal, en el nuevo año escolar en el régimen Costa. Y, superada esa etapa, persisten las irregularidades.
Al escenario se suman denuncias de presunta venta de cupos escolares y deficiencias ya no solo en la plataforma digital del Ministerio, sino en la propia atención de los casos.
Traslado de escuela no solicitado
Carolina Cedeño, madre de una niña de cuatro años que ya estudió el año pasado en la escuela fiscal Elías Muñoz, de Bastión Popular, al norte de Guayaquil, se mostró indignada al descubrir que su hija había sido trasladada arbitrariamente a una escuela de otro cantón.
Se trata de un traslado “no solicitado”, ni consentido. “La semana pasada mi hija acudió a su escuela, yo le compré todo los útiles y esta semana me salen con que ahora está inscrita en otra unidad, en un recinto de Samborondón. Imagínese”, dijo Cedeño, aún incrédula.
La mujer acudió este martes 14 de mayo al distrito de Educación de Los Vergeles a realizar el reclamo y a pedir la ratificación del cupo de su hija en la escuela Elías Muñoz, cerca de dónde vive. Allí le pidieron que dirigiera una carta al distrito exponiendo su caso.
Mientras tanto, la niña no puede acudir a clases, pese a que debería tener una plaza asegurada, pues el año pasado ya estudió en la institución. “A estas alturas no tengo para matricularla en una escuela privada”, agregó Cedeño.
Además, denunció una presunta venta de los cupos escolares, USD 20 por la plaza de estudio, lo que estaría perjudicando a estudiantes como su hija en Bastión Popular.
Retrasos con ratificación de matrícula
El año escolar 2024-2025 en el régimen Costa y Galápagos inició de forma escalonada del 29 de abril al 6 de mayo de 2024. Las matrículas y traslados ordinarios en instituciones educativas fiscales se extendieron hasta el 24 de abril en una segunda fase.
Belkis Ortega dijo que debido a las intermitencias y fallas que se extendieron por semanas en el sistema en línea del Ministerio de Educación solo pudo acceder y matricular a su hijo hasta el 10 de mayo.
Ella busca cambiar a su hijo de siete años de una unidad particular, en la que estudió el periodo lectivo pasado, a una escuela pública. "La página web del ministerio de Educación se colapsaba mucho. No me reflejaba el traslado”, indicó.
El pasado viernes finalmente recibió un correo de confirmación de inscripción de su hijo, en la Escuela Fiscal Los Vergeles (al norte), pero el certificado de matrícula, necesario para que el niño pueda asistir a clases, aún no aparece en el sistema.
“Sin el certificado, que se debe generar luego de 48 horas, el cupo aún está en el aire y no ha podido asistir a clases”, agregó.
Dificultades para unificar a hermanos
Sandro Valdiviezo es otro de los padres afectados. Él también cambió a sus dos hijos del sistema particular al público, pero ahora intenta unificarlos en una sola institución.
Su hija de 12 años obtuvo cupo en la Unidad Educativa Fiscal Veintiocho de Mayo, en el norte de Guayaquil, mientras que a su hijo, de 15 años, lo asignaron a un colegio en otro extremo, cerca de la Bahía, en el centro de la ciudad.
“Aquí en el distrito me dicen que no pueden hacer nada, porque todo está en el sistema”, dijo Valdiviezo.
En el vecino cantón Durán, perteneciente también a la Zona 8, Rosa Anchundia, de 66 años, también reportó dificultades para unificar a dos hermanos en una sola institución.
Ella tiene a cargo a cuatro nietos -una recién nacida- de los que la madre no puede hacerse cargo por problemas de adicción a las drogas, contó.
Uno de los hermanos, de 8 años, estudia en la Unidad Educativa Tiwintza, cerca del sector donde viven, en la Abel Gilbert Pontón 2, sitio de una reciente masacre. Y el hermano de 6 años resultó matriculado en otro sector, en la Escuela de Educación Básica Luis Sánchez Borja.
“No tengo con quien enviarlo. Me dicen que entre a una plataforma pero no sé nada de eso. Espero que de la Fundación que me está ayudando puedan venir a explicar la situación”, dijo Anchundia, quien asistió con los niños este 15 de mayo a la Sede Educativa de Durán.
PRIMICIAS solicitó este miércoles 15 de mayo a la subsecretaría del Ministerio de Educación en la Zona 8 una respuesta ante las denuncias de los padres de familia, pero hasta el cierre de esta nota no había una respuesta.
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